En una silla rota
quedaron los recuerdos,
la niebla cristalina
y el labio con mis besos.
También en esta huida
quedaron los enebros,
erguidos en sus matas
mirando hacia los cielos.
Las notas de discordia,
las lágrimas y miedos,
quedaron bien guardadas
y a salvo de los vientos.
La brisa y el salitre
llegando hasta los cuerpos,
sacando escalofríos
de pechos más bien neutros.
En una silla rota
quedaron muchos sueños,
las risas contenidas
y el roce de tus dedos.
Quedaron para siempre
suspiros y desvelos,
palabras con destino
y un nombre descubierto.
Aquellas viejas alas
que un día nos cubrieron,
los campos y caminos
plagados de senderos.
En ellos los susurros
hablaban, sin saberlo,
decían mil palabras
rompiendo los silencios.
"...En una silla rota
dejé cuanto yo quiero,
la rosa perfumada
y el llanto de mis versos..."
Rafael Sánchez Ortega ©
03/07/14
quedaron los recuerdos,
la niebla cristalina
y el labio con mis besos.
También en esta huida
quedaron los enebros,
erguidos en sus matas
mirando hacia los cielos.
Las notas de discordia,
las lágrimas y miedos,
quedaron bien guardadas
y a salvo de los vientos.
La brisa y el salitre
llegando hasta los cuerpos,
sacando escalofríos
de pechos más bien neutros.
En una silla rota
quedaron muchos sueños,
las risas contenidas
y el roce de tus dedos.
Quedaron para siempre
suspiros y desvelos,
palabras con destino
y un nombre descubierto.
Aquellas viejas alas
que un día nos cubrieron,
los campos y caminos
plagados de senderos.
En ellos los susurros
hablaban, sin saberlo,
decían mil palabras
rompiendo los silencios.
"...En una silla rota
dejé cuanto yo quiero,
la rosa perfumada
y el llanto de mis versos..."
Rafael Sánchez Ortega ©
03/07/14
preciosos siempre tus versos,pero la silla tiene arreglo y todo se recupera.cuando no se rompe el amor
ResponderEliminarfeliz dia UN abrazo
Marina
Un abrazo Marina y feliz semana.
EliminarEs inquietante esa imagen de la silla rota.
ResponderEliminarFeliz semana
Supongo que todos la hemos visto alguna vez así Julito, no sé.
EliminarUn abrazo y feliz semana.
Debes de buscar otra silla.
ResponderEliminarSí, Amapola, supongo que ese se debe hacer.
EliminarUn abrazo.
uufffff hermosamente dulce y tambien lleno de tristeza en esa silla viviste cosas hermosas pero también dejastes sueños en el medio del silencio suspiraste y lloraste tus versos jooooo muy bello poema y final que llega al alma un abrazo y feliz día desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tus palabras Bea.
EliminarUn abrazo y feliz lunes.
Muchas gracias Rafael por tu visita a mi blog...cada casa es un mundo...tengo un hijo operado dos veces a corazón abierto y lleva una pieza de metal,...a mi se me rompen todas las sillas cuando le veo ma y depende de su mamá...hay quien no lo entiende.
ResponderEliminarperdona y un abrazo
Es cierto lo que dices Marina y cada casa es un mundo. Por eso, sobre lo que me dices, solamente puedo enviarte mi abrazo y mis palabras de ánimo en ese día a día que me cuentas.
EliminarQue tengas un lindo día.
Vas con tus poemas tan rápido que no puedo alcanzarte y me pierdo algunos.
ResponderEliminar¡Qué metáfora más original "la silla rota". Creo que ahora ya no existen los que arreglaban las sillas.¿Qué hacer?
Un abrazo.
Tratar de reponerla Fanny.
EliminarUn abrazo.
Y aún sin saberlo nos quedan tantos versos hueros, muertos y al viento...
ResponderEliminarMientres vuele la poesía y aún sin nosotros mismos, se crezca,
Veremos nacer hasta el suspiro de un verso.
Abrígate!
Te dejo un abrazo, aun a sabiendas de lo poco que sirven----
Gracias por tu abrazo Zarzamora y seguiremos a esa poesía que vuela hasta el último suspiro.
EliminarUn beso en la noche.
La silla rota y el corazon también,bello versos a partir de una silla,a veces algo tan personal y tan nuestro.
ResponderEliminarAbrazos Rafael,sabes que es un placer leerte.
Gracias América.
EliminarAbrazos.
¡Qué lindo! me gusta muchísimo :)
ResponderEliminarBesos
Gracias Mayde.
EliminarBesos.