Quizás, por eso mismo que ahora piensas
sonrío y me estremezco dulcemente.
Es fácil que hasta sobren las palabras
y basta con el soplo del nordeste.
Quizás la quintaesencia de la vida
ahogue las plegarias de los fieles,
y puede que los rezos tan queridos
se queden a los pies de los cipreses.
Es fácil que perduren los pecados
nacidos en el alba, desde oriente,
y sigan enraizados en los hombres,
surgiendo día a día, como siempre.
Ignoro los designios de los dioses
y busco mi destino entre la gente,
la tierra con el lodo y la ceniza
cubierta por el manto de la nieve.
Allí se manifiestan realidades
que surgen de una forma diferente,
las horas de los días y las noches
nos dejan malheridos y con fiebres.
Existe una esperanza colectiva
que alberga la cordura del demente,
un rayo de ilusión entre los cardos,
corona de utopía a tantas sienes.
Quizás por eso mismo me rebelo
y nacen estos versos en mi frente,
producto de una extraña calentura
preludio del tormento y de la muerte.
La muerte del espíritu sin nombre,
que escapa de las almas más alegres,
y vaga por senderos y cañadas
que llevan a los túneles y andenes.
Es fácil recurrir a los recuerdos
tratando de excusarse, en los vaivenes,
que surgen a lo largo de la vida
y amargan nuestra risa brevemente.
Rafael Sánchez Ortega ©
23/11/14
sonrío y me estremezco dulcemente.
Es fácil que hasta sobren las palabras
y basta con el soplo del nordeste.
Quizás la quintaesencia de la vida
ahogue las plegarias de los fieles,
y puede que los rezos tan queridos
se queden a los pies de los cipreses.
Es fácil que perduren los pecados
nacidos en el alba, desde oriente,
y sigan enraizados en los hombres,
surgiendo día a día, como siempre.
Ignoro los designios de los dioses
y busco mi destino entre la gente,
la tierra con el lodo y la ceniza
cubierta por el manto de la nieve.
Allí se manifiestan realidades
que surgen de una forma diferente,
las horas de los días y las noches
nos dejan malheridos y con fiebres.
Existe una esperanza colectiva
que alberga la cordura del demente,
un rayo de ilusión entre los cardos,
corona de utopía a tantas sienes.
Quizás por eso mismo me rebelo
y nacen estos versos en mi frente,
producto de una extraña calentura
preludio del tormento y de la muerte.
La muerte del espíritu sin nombre,
que escapa de las almas más alegres,
y vaga por senderos y cañadas
que llevan a los túneles y andenes.
Es fácil recurrir a los recuerdos
tratando de excusarse, en los vaivenes,
que surgen a lo largo de la vida
y amargan nuestra risa brevemente.
Rafael Sánchez Ortega ©
23/11/14
Rafael, wwaauu que bonito cuando dices basta con que suspires si a veces ese silencio dulce uuffff,.....bueno a veces los Dioses designan cosas mágicas o siempre claro y y siempre hay esperanza siempre!!! precioso amigo un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGraqcias por tus palabras Bea.
EliminarUn abrazo y feliz miércoles.
Quizas los recuerdos nos lleven por el camino que marcan tus versos. Genial poema.
ResponderEliminarun saludo
fus
Quizás Fus.
EliminarUn saludo.
Porque de recuerdos nos llenamos cuando son bellos, en esos momentos en silencio
ResponderEliminarUn beso y feliz dia Rafael
Cierto Slave.
EliminarUn beso y feliz día.
De una melancolía como esa nacen también versos hermosos.
ResponderEliminarY sentidos,mucho.
Besos
Así es el otoño Carmen.
EliminarBesos.
buenos dias Rafael...Es verdad asi es la vida misma como la poesia...
ResponderEliminarfeliz miercoles...
UN GRAN ABRAZO
Totalmente de acuerdo Marina.
EliminarUn abrazo.
Quizá los recuerdos sean la escus de no vivir los deseos.
ResponderEliminarPreciosas letras Amigo.
Un abrazo.
efe
Sin duda, muchas veces, nos aferramos a ellos Efe.
EliminarUn abrazo.
Hola Rafael...me alegro que te guste el poema del gran Poeta ,"José Ángel Buesa....en el año 2005 tuve el gusto de conocer a una Locutora de Radio Nacional..Teófila Martinez....que ella radiaba mis poesias y a la vez a las 3 de la madrugada radiaba de Angel Buesa y ella y yo nos hicimos muy amigas,,en un viaje que hizo a Madrid una maestra amiga mia la mandé un obsequio bordado por mi y ella me envio por mi amiga maestra un librillo con poesias de José Angel Buesa ya que ella sabia que yo cada madrugada la escuchaba recitar...asi las tengo y me alegra que conozcas su poesia ... me encantó desde que oia sus versos, tengo foto de el guapisimo de muy joven y tengo una de ya muy mayor encantador por ser él y ver como la vida machaca a medida que pasan los años...Rafael ..jajaja yo aun no tengo ni una arruga pero se que si Dios quiere y tengo salud llegaran...
ResponderEliminarbesos y gracias por tu visita,
Marina
En realidad conocí y recité a Buesa muchas noches en diferentes Foros, así como a otros autores, Marina, y todo fruto de mi acercamiento a la poesía. Los versos de este poeta cubano están plagados de nostalgia y romanticismo.
EliminarUn abrazo en la noche.
Precioso, como siempre, aunque me reitere
ResponderEliminarAbrazos y feliz tarde, Rafael
Gracias por tu "reiteración" Fina.
EliminarAbrazos en la noche.
Un poema de reflexiones muy profundas. Los recuerdos a veces pueden hacernos malas pasadas.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Totalmente de acuerdo Julia.
EliminarUn abrazo.
La vida y sus vaivenes pueden congelarnos la sonrisa en un segundo.
ResponderEliminarPero se deshiela, aunque tarde.
Esa conciencia colectiva está llena de humanidad, pues todos deseamos y carecemos de lo mismo.
Saludos
Coincido contigo Verónica.
EliminarUn abrazo.
Y tus palabras siguen siempre su ritmo, al paso, al paso. Como si caminaran.
ResponderEliminarMe gusta el ritmo y la cadencia que imprimes a tus versos, Rafael.
En este caso es un "endecasílabo", clásico, con rima asonante Tecla. Me alegra de que te gusten.
EliminarUn abrazo.
Porqué será que cuando entramos en la adversidad, nos vienen los recuerdos...y eso nos despista.
ResponderEliminarUn placer siempre leer tus letras Rafael
Buenas noches
Quizás porque están ahí, en silencio Carmen.
EliminarUn abrazo en la noche.