PERO HAY...
Pero hay que romper viejos tabúes,
dar un paso adelante,
decirte que es posible olvidar,
sin hacer daño.
Es probable que vuelvas la vista atrás,
a ese pasado,
pero no importa.
Debes vencer y vencerte,
la tentación seguirá
y eres tú el que debes estar
por encima de ella.
Ya sé que no va a ser fácil la tarea,
Que maldecirás mil veces su nombre.
Te culparás de tantas cosas
que hasta verás borrosa
esa encrucijada en que te encuentras
y hasta no sabrás el camino de salida.
Pero debes luchar, creer en ti.
No importan las heridas,
importas tú.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/11/18
Mal de amores, difícil cura.
ResponderEliminarEs posible, Manuela.
EliminarUn abrazo.
Las heridas sangran un tiempo, luego un nuevo amor tendrás para ser feliz.
ResponderEliminarAbrazo
Así lo cuentan las novelas y los relatos, María del Rosario.
EliminarUn abrazo y gracias por tu comentario.
Olvidar, no siempre es fácil, pero es necesario. Saludos Rafael.
ResponderEliminarmariarosa
Cierto María Rosa.
EliminarUn saludo.
Las heridas nos recuerdan, con sus cicatrices, que siempre hay que levantarse, y seguir.
ResponderEliminarMuy bonito post. Un abrazo grande
Gracias por tus palabras, Albada Dos.
EliminarUn abrazo y feliz comienzo de semana.
Uno mismo, con su empeño y fortaleza.
ResponderEliminarNo hay otra manera.
Abrazo, Rafael.
Cierto Verónica.
EliminarAbrazo.
Todo nos ayuda a madurar, a saber perdonar a seguir amando por encima de todo, porque eso nos salva y nos mantiene vivos, Rafael.
ResponderEliminarMi abrazo madrileño y mucho ánimo, amigo.
Gracias por tus palabras María Jesús.
EliminarUn abrazo.
Una sabiduría serena, me encanta, contiene mucho de lo aprendido en el camino, y es que cuando se ama y hay que dejar partir, hay que hacerlo con tranquilidad.
ResponderEliminarMuy bello amigo.
Besos.
Gracias por tu comentario, Paty.
EliminarUn abrazo en la tarde.