Caen las hojas,
despacio de los árboles
por el otoño.
Es muy bonito
mirar este desfile
multicolor.
La luz, el sol,
el bosque y sus encantos...
¡Qué maravilla!
Pero también
las hojas van al suelo
a descansar.
Después de un tiempo,
fugaz, de primavera,
llegó el verano,
Fue la explosión,
del árbol y las flores
entre sus ramas.
Allí surgió
la vida y la esperanza
con el amor.
Luz y alegría,
colores y latidos
que ahora descansan.
Es el otoño,
musito y me estremezco,
mientras suspiro.
Rafael Sánchez Ortega ©
03/10/20
Qué duda cabe que el otoño es una estación especial, aunque también aparece como una estación triste, diría que muy triste, cuando debería ser al contrario. Es cierto que en estas fechas, y concretamente en noviembre, nos encontramos con los días uno y dos del mes con el significado que tienen sobre la vida y la muerte. Quizás ese es el motivo de la tristeza, pero ¿no hay en ella luz y colorido?
Pues sí, es cierto que lo hay y además especial. El color es más vivo, más fuerte, más intenso y con unos tonos más logrados, que llegan más a los ojos y al corazón. Y pasa igual con el manto de los árboles en los bosques y jardines, ya que, en otoño, empieza el acto erótico de irse desnudando la naturaleza y hace con una lentitud exasperante y despojándose de ropas y vestidos en un baile sinuoso con la brisa y el viento que sopla en cada momento. También, es cierto, que la lluvia participa y arrastra al suelo a las hojas, aunque de manera diferente y más violenta, sin ese cariño infantil de la brisa.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola Rafael, yo creo que todas las estaciones tienen algo especial, el invierno el calor de una buena fogata, y el desenlace fatal, la muerte, el otoño esa alfombra de ocres al caer las hojas, como caen los años, la primavera el renacer, una nueva vida, y el verano la madurez...Todas las estaciones se complementan. Todas son necesarias. Así es la vida también en los humanos, primavera, verano, otoño e invierno...este último el final de una vida. Así lo verso en un poema mío.
ResponderEliminarUnos versos muy tiernos y versados con delicadeza. Un placer leerte amigo Rafael.
Un abrazo y feliz día.
El conjunto de las estaciones es un compendio de la vida misma, pero cada una de ellas tiene su propio perfil y metáfora, al menos, en la poesía.
EliminarUn abrazo y feliz tarde, Carmen.
Esas hojas caen pero ellas no se quedan ahí algunas vuelan a otro lugar y otras son el alimento de seres pequeños que pululan por el suelo. Todas las estaciones tiene su encanto y yo no diría que es triste el otoño, la tristeza como la alegría la llevamos con nosotros, no importa la estación. Un abrazo en la tarde y feliz viernes.
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
Qué bonito lo has descrito… A mí, particularmente, me encanta. Tiene magia, y, aun en esa nostalgia que te envuelve, es emotivo, sugerente y colorido en su desnudez, así como muy bien dices.
ResponderEliminarUn placer leerte, querido amigo.
Abrazos enormes, y muy feliz finde.
Gracias por tu comentario, Ginebra.
EliminarUn abrazo y feliz noche.
Los colores del otoño son muy bonitos, nos invitan al recogimiento... y me atrevo a decir, que al recogimiento interior... de ahí esa "tristeza" Precioso tu poema, amigo Rafael.
ResponderEliminarMil besitos en la noche.
Hola Rafael!! Además de ese melodioso verso nos regalas esa bella descripción del otoño, estación del color, del viento, de la cosecha (hemisferio sur)de frutos y cereales, todo en armonía con los colores pasteles naranjas y tostados, además cumplo años penas comienza el otoño..... como no me va ha gustar.. Un abrazo!!!!
ResponderEliminarGracias Mercedes, me alegro de lo que dices.
EliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
Preciso otoño en tu voz. Buenos versos, como siempre.
ResponderEliminarUn abrazo, y buen finde
Gracias Albada Dos.
EliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
El otoño es como la vida, tiene su música lenta, tiene su glamoroso encanto a la vez de su sutil nostalgia, pero tiene algo aún más símil, que es la renovación constante y profunda que podemos efectuar con los interno. Lo que queda ya sin energía, cae como esas hojas pero dejan el espacio para que nazca otra, verde y turgente, que nosotros debemos llenar, con apreciación y agradecimiento.
ResponderEliminarBuen sábado y fin de semana para ti amigo.
Paty.
Otoño y renovación es muy apropiado.
EliminarUn abrazo y gracias Paty.
Todas las estaciones fluyen en armonía y se complementan.
ResponderEliminarDe aquellas hojas caídas en otoño, la promesa del revivir en primavera.
Abrazo, Rafael.
Es como dices, Verónica.
EliminarAbrazo.