martes, 20 de mayo de 2025

6.208 - YO VINE AL MUNDO...



Yo vine al mundo

un día de septiembre,

un dieciséis.


Y fue un verano,

en puertas de un otoño,

quién me dejó.


De aquellos dulces,

colores, marchitados,

nació un mendigo.


Y es que la mano,

pequeña y temblorosa,

siempre pedía.


Pedía amor

en sueños y esperanza,

en su niñez.


Pedía paz,

en años de ilusiones

y juventud.


Y así llegó,

la eterna primavera,

con madurez.


Y la vivió

bebiendo de ese cáliz

intensamente.


Se emborrachó

del néctar de la vida

que tuvo un fin.


Porque la vida

no para, y se detiene,

como él quisiera.


Y en su vejez,

ahora, en otro otoño,

mira al invierno.


Rafael Sánchez Ortega ©

16/05/25

6 comentarios:

  1. Preciosas letras, la vida misma.
    Saludos

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  2. Un lindo poema donde en esas líneas está el autor de él , Un besote Rafael, buenas noches.

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  3. Una perspectiva al pasado, donde la gratitud y la belleza interior siguen presentes y seguirán en el futuro del poeta...Muy hermosa esa memoria eterna, amigo.
    Mi abrazo y mi cariño.

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  4. La vida no se detiene y da la visión personal forjada desde la niñez.
    Precioso poema.

    Abrazo, Rafael.

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