miércoles, 21 de noviembre de 2018

UN DÍA...



Un día desperté, en medio de la bruma,
y me sentí desnudo y solitario;
quise levantarme, dar dos pasos,
buscar en el espejo tu figura.

Un día pronuncié tu nombre varias veces
y al repetir el mismo, entre mis labios,
le encontré distante y alejado.

Un día comprendí que ya no estabas
al observar el lecho, que vacío, 
decía tantas cosas con su silencio.

Un día salió el sol por la mañana
y sus rayos, tibios, 
se posaron en mi cara con ternura.

Un día miré al cielo y vi a mi alma 
que me hablaba
y decía que adelante.

Rafael Sánchez Ortega ©
07/11/18

8 comentarios:

  1. Estoy con un post de un renacer, parece que el otoño conecta sensaciones a ambos lados del teclado. He usado la segunda persona, sin embargo.

    Un abrazo grande, Rafael.

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    1. El otoño es culpable de ello, Albada Dos, afortunadamente.
      Un abrazo y feliz día.

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  2. Sí, adelante Rafael, no hay más remedio.
    Amanecemos y lo primero que viene a la mente es lo que hemos perdido... hay que dar las gracias siempre al universo por darnos un día más...

    Ahora estoy en Rodar y Volar, quiero darle vida al blog donde empece.
    Feliz noche Rafael.
    Un abrazo.

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    1. Gracias por tus palabras Carmen.
      Un abrazo y feliz noche.

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  3. Como en tu poema todos los días sale el sol y con él nuevas ilusiones solo hay que mirar y dejarse llevar por esa brisa que aún siendo ligera nos toca el alma .
    Un abrazo en la noche .

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    1. Gracias Campirela, me alegra de que lo veas así.
      Un abrazo y feliz noche.

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  4. La vida nos da y nos quita, Rafael...Nos va mostrando lo que y a quien necesitamos para seguir adelante con fortaleza y generosidad...
    Mi felicitación y mi abrazo.

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