Escucho al viento
que en forma de galerna
lanza bramidos.
Son los susurros
que toma de los robles
y de las calles.
Viejos relatos,
de idioma incomprensible,
nos va dejando.
Y los suspiros,
se ahogan y se apagan,
tras las ventanas.
Hay mucha bruma
que lanza a los oídos
su melodía.
Y en plena noche
puntean los cristales
su eterna música.
"Soy la galerna
y agito tu conciencia,
una vez más".
Rafael Sánchez Ortega ©
13/11/25

El viento de nuestra propia conciencia.
ResponderEliminarFeliz fin de semana Rafael, espero que estás bien.
Un abrazo