lunes, 18 de marzo de 2024

5.781 - SE PRECISA LA LLUVIA...



Se precisa la lluvia

y las gotas del llanto,

que refrescan el alma

y hasta animan los pasos.


Y es que marchas de prisa

con el viento alocado,

en profundas galernas

de tormentas y rayos.


Han saltado cristales

y han sangrado las manos

que dejaban caricias

y candor a los labios.


Se ha perdido la risa

y la flor del verano

que asomaba a tus ojos

tan lindos y claros.


Ahora estás silenciosa

y persigues los claros,

donde duermen cipreses

y unos robles ya ancianos.


Y te veo y te sigo

sin saber lo que hago,

ya que intento mirarte

y sentirte a mi lado.


Yo no quiero que llores

ni que sufras en vano,

mariposa, sin nombre,

de mis sueños alados.


Porque fuimos amigos

y hasta amantes y magos

convirtiendo los sueños

en jardines extraños.


Y vivimos el sueño

de gozar un verano,

alejados del mundo

con mil besos robados.


Rafael Sánchez Ortega ©

16/03/24

domingo, 17 de marzo de 2024

5.780 - HOY HE VISTO UNOS NIÑOS...




 (Para "Ade", 

inspirado en su labor

de ángel con unas personas

que siguen siendo "niños")


Hoy he visto unos niños

y ha llorado mi alma

porque en ellos había

una estampa de playa.


Eran olas coquetas

de unos ojos que llaman,

y dejaban sonrisas

con la brisa y las algas.


Eran gracia sublime, 

con sonrisa de plata,

la inocencia sin nombre

de unos ojos que hablan.


Hoy he visto estos ojos,

que a su vez me miraban,

sin pensar en el tiempo

ni en sus piernas cansadas.


Eran ojos rasgados

de personas ancianas,

recibiendo sonrisas

en la tarde que acaba.


Y tú estabas allí,

mariposa y mi Hada,

con la brisa y la tarde

y tu voz de gitana.


¡Que prosiga la risa

y la fiesta sin pausa.

que no pasen los años

de esta edad con su magia!


Rafael Sánchez Ortega ©

15/03/24

sábado, 16 de marzo de 2024

5.779 - LA NIEVE DEL MONTE...



La  nieve del monte

son copos divinos,

que mandan los dioses

dejando suspiros.


Se cubren los bosques

con manto infinito

y ofrecen sus ramas

encantos y brillos.


Tú ves esa magia

y sueñas cual niño,

por ser ese verso

de un mundo perdido.


La parte pequeña

y ahogada es un grito,

que pide y que busca

ternura y cariño.


La nieve del monte

nos deja sus mimos,

con manto de plata

teñida de armiño.


No temas y sueña,

soñar es bonito,

si sueñas ya amas,

un Niño nos dijo.


Rafael Sánchez Ortega ©

15/03/24


viernes, 15 de marzo de 2024

5.778 - AHORA ESTOY SOLO...



Ahora estoy  solo,

susurra mi conciencia

en medio de la noche.


Lo sé y soy consciente

de mi estado.


Se marcha el invierno

de los días crudos y sombríos,

con la soledad infinita

y las brumas del alma.


Por una parte ya quiero que acabe,

que termine este tiempo,

este estado, 

esta agonía...


Atrás quedan los pasos

y las huellas de una etapa de la vida,

de unos días mal viviendo, y añorando,

otros de estío y primaveras

ya lejanas.


Crecen los días 

y amanece más temprano.

Parece como si la niebla se rompiera,

se fragmentara en mil pedazos

y permitiera ver, a lo lejos,

a una primavera renovada

y que se acerca,

aunque, quizás, es una utopía.


Pero son la edad y los años,

la eterna confusión de los sentidos,

los que piden y sueñan con volver al pasado,

con sentir el galope impetuoso 

de un joven corazón ya marchitado,

y el correr acelerado de la sangre

por un cuerpo que ha cumplido su objetivo

mientras sus labios se estremecen 

y pronuncian un nombre

y unos ojos, sus ojos, te buscan 

y buscan la vida

que parece resurgir, entre la bruma

de un invierno que se marcha.


...Pero el tren está parado

y su vagón, sin número ni nombre,

allí te espera.


Es una estación sin nombre, sin señales;

es un andén y tú estás en él, esperando,

y esperándome...


Me miras y te miro, 

acercas tu mano a la mía

y temblando, pero con una sonrisa,

subimos a ese tren y a ese vagón,

que pronto marchará

y partirá hacia otro mundo,

otra vida, otros sueños, 

con nosotros, como versos 

y viajeros, solamente,

del poema, inacabado, 

de dos almas que se amaron.


Rafael Sánchez Ortega ©

14/03/24


jueves, 14 de marzo de 2024

5.777 - APENAS RECUERDO...



Apenas recuerdo el color de las nubes

y su traje de gala,

porque mis ojos, cansados,

han perdido la memoria

y la oscuridad se refleja

en mis pupilas.


Apenas recuerdo el sonido

de tus labios, musitando mi nombre

en un susurro enamorado

y pidiendo, de los míos,

otro beso y un poema.


Apenas recuerdo aquel otoño

tan sagrado y colorido,

y los paseos,

por la playa con sus olas y resacas

y, también, en el bosque, junto al río

y sus meandros.


Apenas recuerdo el saludo de las aves

que pasaban y dejaban con sus alas

la ternura de un momento inolvidable

y hoy ajeno en mi memoria.


Pero sí recuerdo 

mis manos en tu cuerpo,

mis dedos por tu cara y tus mejillas

y aquel dulce escalofrío

que me diste

y compartimos en silencio

y sin palabras.


Rafael Sánchez Ortega ©

13/03/24

miércoles, 13 de marzo de 2024

5.776 - DEJARÉ...



Dejaré de seguir las palabras que el viento

le susurra a los robles,

cuando llega el invierno.


Dejaré de añorar a tus labios inquietos

en el beso sagrado

que producen los sueños.


Dejaré de buscar los abrazos eternos,

que abarcaban mis brazos

al tenerte entre ellos.


Dejaré que la noche, borre el llanto en mi pecho,

que se ahogue en la niebla,

y que marche en silencio.


Dejaré de soñar con el niño del cuento

que escribía poemas

y soñaba despierto.


Dejaré que se vayan los acordes del tiempo

y con él, ese niño,

porque el hombre ya ha muerto.


Rafael Sánchez Ortega ©

12/03/24

martes, 12 de marzo de 2024

5.775 - DESPIERTAS UNA TARDE...



Despiertas una tarde

y ves todo distinto,

el día está cambiado

y duermen los vinilos.


Te invade la tristeza

y sientes que el destino

te agobia con su carga

de nubes y granizo.


Hay barro por las calles

y restos de ladrillos,

cristales troceados

y tejas de Cupido.


Parece que los elfos

pasaron despacito,

dejando las tinieblas

despiertas y en sigilo.


Arriba está la luna,

coqueta y con su brillo,

su cara plateada

saluda con un guiño.


Sacudes la cabeza

y ves el infinito,

te llaman las estrellas

y alumbran tu camino.


"...Enjuágate una lágrima

poeta, y sé tú mismo,

el hombre que ahora sueña

y tiene alma de niño..."


Rafael Sánchez Ortega ©

11/03/24