domingo, 31 de enero de 2021

4.448 - TIEMBLAN LAS ROSAS...



Tiemblan las rosas

que esperan ser cortadas

por una mano.


Hay miedo urgente,

tristeza en los jardines,

quiere llover.


Y así, los cielos,

con lágrimas envuelven

su melodía.


Mientras, las rosas,

suspiran con los niños

que se acercan.


Oyen las voces,

eternas e infantiles,

casi cantando.


Buscan las flores

para ofrecer un ramo

con ilusión.


Ramo de rosas

que llevan a la Virgen

de la Barquera.


En la capilla

las rosas dormirán

un dulce sueño.


Y guardarán

sus pétalos sagrados

tanta ternura.


Rafael Sánchez Ortega ©

16/09/20


(Se trata de reflejar a unas rosas en un jardín, y su tristeza porque saben que va a llegar una mano, infantil, que las va a cortar para hacer un ramo de flores y llevarlo a la Virgen. Quizás es un acto que, como tantos, no pasa de ahí y no tiene más trascendencia. Sin embargo se intenta ver esta figura de las rosas, adivinar que tiemblan ante la separación del rosal y que el cielo se entristece y empieza a llover mientras van llegando unos niños que entre canciones cortan y hacen ese ramo de flores para llevarlo a la Virgen y que allí, duerman las rosas y cierren sus pétalos.)

sábado, 30 de enero de 2021

4.447 - ERAN BANDERAS...



Eran banderas

de patrias y naciones

que no existían.


Viejas reliquias

de tiempos y de hombres

que atrás quedaron.


Entre la gleba

reposan hoy sus restos

y son olvido.


Aquellas telas

flamean por los ojos

de algún nostálgico.


Ojos de ciegos,

pupilas, derrotadas,

que ansían paz.


Ciertas canciones

resurgen en los labios,

como el salitre.


Bajo las nubes,

navíos sin figura,

buscan un puerto.


Son desperdicios

del mar y del océano

a la deriva.


Buscan descanso,

sin patria y sin banderas,

¡no quieren más!


Rafael Sánchez Ortega ©

15/09/20

viernes, 29 de enero de 2021

4.446 - BESOS DE FRESA...



Besos de fresa

con rimas en desorden,

apasionadas.


Bellas estrofas

que van pidiendo vida

con gran pasión.


Labios preciosos

sedientos de lujuria

y de candor.


Y tras los besos

un rostro enternecido

busca unos ojos.


Versos sublimes

ocultan las pupilas

sin gran misterio.


Hay sencillez,

en letras y palabras

de este susurro.


¡Qué embriagador

el gusto de las fresas

entre tus labios!


Quiero ese néctar,

llevarle a mis sentidos.

¡Cerrar los ojos!


...Y compartir,

las fresas y los besos

en un poema.


Rafael Sánchez Ortega ©

14/09/20


(Hoy nacen y llevan un toque lujurioso y apasionada, pero sin caer en lo ordinario, quizás porque siempre se ha dicho y escrito mucho, en poesía, acerca de las fresas y ese fruto que tienen con el que la imaginación ha querido desbordar lo infantil y lo bello hacia un mundo de lujuria y pasión sin límites ni fronteras.

Pienso que en el mundo de los niños, sus almas infantiles, no quieren tanto y se conforman con algo más sencillo, pero no por ello, menos bonito y tan sincero como la otra situación.

Soñar con ese momento en que unos labios llevan a otros labios una fresa y la comparten, unir dos manos y cerrar los ojos para hacer de ese acto una especie de comunión de sentimientos y de corazones, sentir el latido, el galope, el gemido hasta romperse y proclamar a los cuatro vientos que se quieren, y, también, lo que sueñan, lo que ansían, lo que desean...)

jueves, 28 de enero de 2021

4.445 - RECUERDO EL CUENTO...



Recuerdo el cuento

precioso, que en la tarde,

tú me contaste.


Eran dos niños

jugando por la playa

con un cometa.


Danzas y bailes,

trazaba su figura

por un instante.


(Entre los  cielos,

debajo de las nubes,

esto ocurría).


Pero la brisa

rabiosa del nordeste

lo fastidió.


Rompió aquel cuadro

y el cuento con la magia

cayó por tierra.


Lloran los niños,

decías dulcemente,

y yo lloraba.


Porque en el cuento,

cargado de ternura,

yo te veía.


Iba a tu lado,

detrás de aquel cometa

que se escapaba.


Subía al cielo,

detrás de las estrellas.

¡Quería amar!


Rafael Sánchez Ortega ©

13/09/20


(Esta vez el motivo está en la playa y en la imagen de esos niños, (reales o ficticios), que juegan con un cometa y que intentan, con su cuerda y tras ella, hacer que vuele y se eleve y hasta que cobre vida y haga todos esos movimientos invisibles que la imaginación infantil ya recrea entre sus labios. Y lo consiguen durante unos momentos y ven volar al cometa y sueñan con todo aquello que los ojos del alma desean, hasta que la fuerte brisa, del nordeste, hace vacilar y tira por tierra a este comenta infantil que deseaba subir más arriba del cielo, y posarse a dormir y a descansar detrás de las estrellas porque simplemente buscaba y quería amar, con ese sentimiento que dos niños llevaban en su alma.)

miércoles, 27 de enero de 2021

4.444 - EN EL CUADERNO...



En el cuaderno

quedaron los poemas

de aquel verano.


Versos de ratos

pasados y vividos

entre los sueños.


Días de magia

con paz y con ternura

junto a las olas.


Y aquellos días

mirando, en la distancia,

ponerse el sol.


Hubo mañanas

que el gallo despertaba

amaneciendo.


También las noches

quedaron reflejadas

con su misterio.


Y en el cuaderno

hoy veo las caricias

que compartimos.


Labios ansiosos

buscándose en el beso

y en la pasión.


Ojos que amaban

y dedos que escribían

a un corazón.


Rafael Sánchez Ortega ©

12/09/20

martes, 26 de enero de 2021

4.443 - Y FUE TU VOZ...



 Y fue tu voz

sonando en el recuerdo

quien me llamó.


"¡Ven a mi lado,

preciso de tus besos

y tus caricias!"


Fueron susurros,

suspiros de tus labios

que recibí.


Sin más palabras,

te tuve entre mis brazos

en un instante.


Fuimos al parque,

buscamos a la fuente

y a las palomas.


Luego, en la playa,

mezclamos con la arena

nuestras pisadas.


Los dos, felices,

vivimos y soñamos

sin darnos cuenta.


Y se saciaron

la sed y las pasiones

mal contenidas.


Luego dormiste,

tus ojos se cerraron,

junto a los míos.


Rafael Sánchez Ortega ©

11/09/20


(Es como cerrar los ojos y soñar con esa voz que esperas, que necesitas, que tiene aquello que tú quieres y ansías, y entonces, tras esa súplica, ese ruego, llega la voz "sin palabras" y te llena, te llama, te rescata de las sombras y te hace vivir un momento inolvidable en el parque, en la playa, en una comunión casi perfecta de las almas, para acabar cerrando los ojos, y quedarse dormidos con una sonrisa en los labios.)

lunes, 25 de enero de 2021

4.442 - SECA TUS OJOS...



Seca tus ojos

de lágrimas amargas

que son pasado.


Vive y arranca

sonrisas y alegría

del nuevo día.


Y luego toma

la mano que te busca

en el camino.


Siente los dedos

ansiosos de caricias

y de ilusiones.


Dale tu sangre,

tu voz y tus latidos.

No tengas miedo.


Queda un camino,

de sendas y de sombras

que hay que pisar.


Luego, sin prisas,

camina tras las huellas

de la utopía.


Son invisibles, 

difíciles de ver,

trozos de un sueño.


Y es que los sueños,

son parte de la magia

de nuestra vida.


Rafael Sánchez Ortega ©

10/09/20

domingo, 24 de enero de 2021

4.441 - PUERTOS DE MAR...



Puertos de mar

con olas que dormitan

en las resacas.


Van a las playas

las aguas de esos mares

para soñar.


Van a los muelles

las barcas y marinos

a descansar.


Puertos y costas

de gentes marineras

que bien conozco.


En ellos cantan

ochotes barquereños

en las tabernas.


Allí las algas

se mezclan con los peces

y buscan vida.


Manos que buscan

el pan y medicinas

que necesitan.


Y entre el salitre,

curtido del nordeste,

surge el milagro.


Alguien sonríe,

pasea por el muelle.

¡Son las gaviotas!


Rafael Sánchez Ortega ©

09/09/20

sábado, 23 de enero de 2021

4.440 - MIRO TU CARA...



Miro tu cara

tan llena de ternura

y tiene sueño.


Están cansados

tus párpados, y quieres

cerrar los ojos.


Pero preciso

entrar a tus pupilas

y descansar.


Estar en ellas, 

vibrar con sus latidos

y así dormirme.


Sueños de niños

que ansían utopías

y poco más.


Lenguas de trapo

que apenas balbucean

pidiendo amor.


Pero mis ojos,

inquietos e infantiles,

a ti te buscan.


Quieren la voz,

la mano y el abrazo

que tú me ofreces


Y alcanzo entonces

el verso y el poema

de un nuevo sueño.


Rafael Sánchez Ortega ©

08/09/20

viernes, 22 de enero de 2021

4.439 - EN LAS MACETAS...

 


En las macetas

florecen los geranios

en primavera.


En las aceras

caminan las personas

todos los días.


En los suspiros

se esconden los silencios

de tantas almas.


Esos geranios

de flores temblorosas

como tu piel.


Y las personas

de pasos presurosos

buscan a dios.


Pero el silencio

produce escalofríos

y hasta temor.


La primavera

no sabe de geranios

ni de macetas.


En cuanto a dios

nos dice, que los hombres

vuelven al barro.


Van al silencio,

vivero de suspiros,

risas y lágrimas.


Rafael Sánchez Ortega ©

07/09/20

jueves, 21 de enero de 2021

4.438 - LA SOLEDAD...



La soledad

no sabe de trincheras

ni de escondites.


Está muy cerca

buscando el fiel resquicio

por donde entrar.


Pero se pierde

con risas, y se aleja,

por un instante.


Es muy tenaz

y sigue en sus batallas

muy silenciosa.


Todos queremos

que pase y que nos deje

vivir en paz.


Hay muchos días

que el alba nos despierta

y ella no está.


Luego, sucede,

que avanza la jornada

y se nos muestra.


Nos amodorra,

entabla una batalla

muy desigual.


Al fin nos vence,

sus garras nos atrapan,

y estamos solos.


Rafael Sánchez Ortega ©

06/09/20


miércoles, 20 de enero de 2021

4.437 - DÍA DE LLUVIA.



 Antes recordaba que, en la mañana, 

había paseado bajo la lluvia 

y que lo hice con el paraguas abierto. 


Algo difícil, en mi caso, 

y más en un paseo de casi cuatro kilómetros. 


Es cierto que alguna vez he bajado con el paraguas 

y que también en alguna ocasión he tenido que abrirlo, 

pero ha sido a ratos 

y por el clásico chubasco 

que luego te permite volver a cerrarlo 

y continuar caminando sin tener que llevar el brazo 

aguantando ese armatoste. 


Es bonito caminar bajo la lluvia. 


Ahora me han venido a la cabeza 

momentos en los que he disfrutado 

de instantes así, 

mojándome y compartiendo con la lluvia, 

una caminata, una marcha, 

una ascensión en la montaña, 

una acampada bajo una tienda, en la sierra, 

una tormenta, y así un larguísimo etcétera 

que daría para poder escribir algún relato. 

Pero sé que fue en otro tiempo 

y con una figura más joven en edad y en fuerzas, 

en esos momentos que cada uno 

tenemos reservados en el libro de la vida 

para enmarcar con letras de oro 

y que luego rescatan los recuerdos 

y nos traen su aroma, 

como una taza de café, 

que tanto se añora y paladea. 


Y sí, tengo que reconocer 

que aquellos fueron momentos de magia, 

en que las pupilas cargadas de inocencia

iban descorriendo los visillos de la lluvia 

y mirando a través de ellos 

a un mundo desconocido, nuevo 

y lleno de encanto 

que venía a mi encuentro. 


Por eso no puedo olvidar aquella comunión, 

muchas veces repetida y aceptada, 

con los ojos recibiendo las lágrimas del cielo 

y llorando, a su vez, de emoción y alegría, 

ante un espectáculo tan maravilloso, 

mientras, el cuerpo, 

la figura con alma que me ha sido prestada 

y que da vida a mis pensamientos y sentimientos, 

se mojaba y empapaba, sin darse cuenta, 

para tener que buscar, luego, el refugio 

y el abrigo en un lugar seco 

y cambiarse de ropa 

y saborear, lentamente, esos instantes vividos.


Rafael Sánchez Ortega ©

05/09/20

martes, 19 de enero de 2021

4.436 - BAJABA EL RÍO...



Bajaba el río,

cantando por las aguas

que eran muy bravas.


Lloraba el cielo

con lágrimas heladas

formando nieve.


Esa blancura

que un manto deslizaba

por las montañas.


Llega hasta el río,

sus copos se deshielan

y van al mar.


El mar bravío,

azul y verde oscuro

en él se funden.


Y es ese mar

la cuna de la vida

que conocemos.


Pienso en el río,

te veo entre sus aguas,

y pienso en ti.


Siento la vida

la noto entre el rocío

de tus pestañas.


Y veo al mar

que dictan tus pupilas

en un poema.


Rafael Sánchez Ortega ©

05/09/20

domingo, 17 de enero de 2021

4.435 - YO TE RECLAMO...



Yo te reclamo

y pido que regreses

hasta nosotros.


Eres la luz,

el faro que nos guía

en esta noche.


Porque la vida

sin luz es agonía

e incertidumbre.


Nunca te vayas

del mundo y de la infancia,

¡mi poesía!


Sigue latiendo,

bombéanos tu sangre,

(esencia y ser)


Y es que los niños,

(igual que los mayores)

te necesitan.


Versos que brotan

del mundo y de la tierra

con tu presencia.


Versos y rosas

en rostros y en pupilas

enamoradas.


Versos de niños

en almas de mayores

que nunca olvidan.


Rafael Sánchez Ortega ©

04/09/20

sábado, 16 de enero de 2021

4.434 - TÓMAME EN TUS BRAZOS...



Tómame en tus brazos,

llévame hasta el cielo,

quiero ver la luna

y robarle un beso,

eso me decían

tus ojitos negros,

que con gran ternura

suplicaban quedo.

Y vibró mi alma

al saber tu anhelo

en la tarde aquella

de un otoño nuevo,

y partimos raudo

en corcel inquieto

más allá del aire

y del cielo eterno...


Tómame en tus brazos

yo le dije al viento,

para ir con ella

a forjar un sueño,

volaremos alto

superando fuegos

y también hogueras

con ceniza y restos,

y seremos libres

sin temor ni miedo,

para hacer que salgan

de los labios versos,

y en la noche oscura

sentiré su pelo

y su sangre ardiente

reclamarme un beso...


"...Tómame, me dices,

en abrazo eterno,

porque así lo anhelas

y también yo quiero..."


Rafael Sánchez Ortega ©

04/09/20

viernes, 15 de enero de 2021

4.433 - LLEGA EL OTOÑO...



Llega el otoño

quizás sin darnos cuenta,

un año más.


Vuelven las nubes

plomizas y agrisadas

con el mal tiempo.


Tiempo de sombras

de lluvias y recuerdos

para las almas.


Pero en otoño

renacen esperanzas

con ilusiones.


Un nuevo ciclo,

de días diferentes

para vivirlos.


De nada sirve

el verte fracasado

antes de tiempo.


Hay que vivir,

sentir, intensamente,

al fiel otoño.


Y de seguro,

que llega con sorpresas

y con regalos.


Entonces vive,

y encárgate que el alma

siga latiendo.


Rafael Sánchez Ortega ©

03/09/20

jueves, 14 de enero de 2021

4.432 - EL PELO LARGO...



El pelo largo

caía por su espalda

muy dulcemente.


Su cara altiva

miraba el horizonte

en una búsqueda.


Y entre sus ojos,

brillantes y febriles,

volabas tú.


La mariposa,

el sueño y la esperanza,

de su poema.


Y es que sus labios

de niña, musitaban,

hoy nuevos versos.


Eran suspiros,

latidos y metáforas,

volando lejos.


Quizás querían

fundar, desde la nada,

un mundo nuevo.


Quizás ansiaban

el brillo de otros ojos

y sus latidos.


Pero, sin duda,

amaba, en la distancia,,

sin darse cuenta.


Rafael Sánchez Ortega ©

02/09/20

miércoles, 13 de enero de 2021

4.431 - PERDÍ DE VISTA...



Perdí de vista

el álbum de recuerdos

que me ofreciste.


Y me quedé

mirando a la distancia

y el gran vacío.


Faltabas tú,

la musa de mis sueños

y poesía.


Las golondrinas

recogen ya sus ala.

Llega el otoño.


Las margaritas

se muestran perezosas

ante el rocío.


Y los gorriones,

nerviosos, dan mil vueltas

por los jardines.


Quiero vivir

el hoy, sin los recuerdos

y verte a ti.


Quiero sentir

el beso de tus labios.

Libar su miel.


Quiero que vuelvas,

mi musa y poesía,

y estés en mí.


Rafael Sánchez Ortega ©

01/09/20

martes, 12 de enero de 2021

4.430 - DE TERCIOPELO...



De terciopelo,
sentía las caricias
que me enviabas.

Eran tus dedos,
pinceles y batuta
de aquel adagio.

Tú dirigías
la brisa de un nordeste
desde tu lecho.

Y mientras tanto,
el baile de las olas
daba comienzo.

Baile de tarde,
pequeña romería,
desde la aldea.

Baile de noche,
con valses y miradas
que se fundían.

...Se despertaban
los ángeles inquietos
y sonreían.

Voces, suspiros,
susurros y jadeos.
¡Gran confusión!

Y el terciopelo,
sublime de tus dedos,
era el causante.

Rafael Sánchez Ortega ©
31/08/20

lunes, 11 de enero de 2021

4.429 - HOJAS DE OTOÑO...



 Hojas de otoño

que vuelan de los árboles

hasta los suelos.


Hojas doradas

cargadas de recuerdos

y sentimientos.


Hojas que lloran

y apagan las sonrisas

de tantos labios.


Hojas que brillan,

que acaso parpadean,

en su descenso.


Hojas hermosas

cargadas de ternura

y olor a infancia.


Hojas que duermen,

que guardan en la tierra

sus mil latidos.


Hojas de agosto,

veranos ya marchitos

y primaveras.


Hojas de acacias,

de robles y de encinas...

¡venid a mí!


Hojas de otoño,

verano y primaveras...

¡no me olvidéis!


Rafael Sánchez Ortega ©

30/08/20

domingo, 10 de enero de 2021

4.428 - ERAN RESCOLDOS...



 Eran rescoldos

y brasas de una hoguera

que dormitaban.


Un gran silencio

guardaba los encantos

celosamente.


Y las cenizas

del tiempo se perdían

entre los dedos.


Pasa la vida

despacio, y los minutos,

en el reloj.


Esos segundos

se forman y confunden

a los sentidos.


Y tú los mimas,

los miras y los sientes

sin comprenderlos.


Eres autor,

quizás, sin darte cuenta,

y espectador.


Un gran poema

se forma con tu vida

en cada instante.


Versos, que el viento

te roba de tus labios

y de tus dedos.


Rafael Sánchez Ortega ©

29/08/20

sábado, 9 de enero de 2021

4.427 - NO MERECE LA PENA...



 No merece la pena

intentar alcanzarte

y decir lo que pienso

en silencio y al aire,

y es por eso que miro

y que veo que partes

hacia el mundo difuso

con Babeles y calles,

y diviso banderas

y también estandartes,

con canciones que entonan

muchos labios cobardes,

son palabras difusas

sin color y sin sangre,

de los pechos calientes

en los hombres que parten...


Y se marchan los días

y se pasan las tardes,

y en la plaza se quedan

los ancianos sin traje,

con el pan y las migas

en los bancos sin sangre

atendiendo a palomas

y saciando su hambre,

y este acto sencillo 

no lo ves aceptable

porque es algo lejano

y que tú no compartes,

y por eso se nublan

los recuerdos sin llave

que a tus ojos regresan 

de galeras y cárceles...


"...No merece la pena

esperar una frase,

mendigando el "te quiero"

que estremezca tu carne..." 


Rafael Sánchez Ortega ©

28/08/20

viernes, 8 de enero de 2021

4.426 - EL LIBRO BLANCO...



 El libro blanco

guardaba los suspiros

con una rosa.


Rosa amarilla

de tardes juveniles

y apasionadas.


Rosa con beso

y pétalos mirados

con gran pasión.


Pero aquel libro,

guardado con gran celo,

tiene otras cosas.


Agua de nieve,

susurro de los robles,

brisa del mar.


Hay caracolas,

sonrisas infantiles,

ojos azules.


También el libro

contiene alguna lágrima

entre sus páginas.


Versos escritos

con dedos temblorosos

que eran los tuyos.


Así que tú

estás en este libro

que ahora rescato.


Rafael Sánchez Ortega ©

28/08/20