viernes, 30 de noviembre de 2012

TU MANO ENTRE MI MANO Y SU CARICIA...


Tu mano entre mi mano y su caricia
me llevan al pasado y al recuerdo,
me dejan en los años juveniles
vividos con pasión y desenfreno.

Recuerdo aquella tarde en los jardines,
la lluvia goteaba en el paseo,
ocultos, esperando la escampada,
pasamos los minutos tan eternos.

Hablamos del trabajo y los estudios
mirando de reojo a nuestros cuerpos,
la lluvia cantarina no cesaba
bailando en el asfalto y el cemento.

La tierna melodía de tu mano
hacía estremecerse mil arpegios,
y un solo de violín, en la mirada,
mis ojos te mandaban con afecto.

No sé la duración de aquel hechizo
ni cuando fue el final del aguacero,
tan solo he retenido aquel instante
del labio, que en mis labios dejó un beso.

Y fue la escolanía de una mano,
rompiendo los acordes y el silencio,
la sangre que latía por sus cuerdas,
tus dedos enlazados a mis dedos.

La gente que pasaba con paraguas
miraba con envidia todo aquello,
quizás no comprendían que la lluvia
formaba la coral y el minueto.

Tu mano soñadora me llevaba
al mundo de los locos sin remedio,
el mundo de las tierras sin fronteras
y el mundo donde gozan los pequeños.

"...Tu mano entre mi mano y su caricia
me vuelven al pasado y a los sueños,
al mundo juvenil de aquella infancia
y al niño soñador que tanto anhelo...".

Rafael Sánchez Ortega ©
30/11/12

jueves, 29 de noviembre de 2012

AUNQUE...


Aunque soy consciente de toda la realidad
que reflejan tus versos,
aunque he llorado y sufro por tantas cosas
que veo cerca y lejos,
aunque sé que es un clamor inútil
y una lucha imposible,
aunque la corrupción avanza y nos desborda
y la generosidad brilla por su ausencia,
aunque el amor y la sensibilidad se pide
y se precisa y se obtiene el desprecio
por respuesta...

"...A pesar de todo, estoy condenado,
(¡como tantos!),
a seguir soñando y a morir con mis sueños..."

Rafael Sánchez Ortega ©
23/11/12

EN TUS OJOS COMIENZA EL PARAÍSO...


En tus ojos comienza el paraíso,
ese mundo tan lleno de aventuras,
la ilusión de los niños en la infancia
cuando miran al cielo y a la luna.

Porque tienes mensajes y leyendas
en las dulces palabras tan profundas,
que tejieron las manos temblorosas
intentando cubrirlas de ternura.

Y es ahí, donde brilla tu pupila,
en que salen respuestas a preguntas,
formuladas por labios temblorosos
temerosos y llenos de mil dudas.

Es muy fácil perderse en los atajos,
confundir los estuarios por lagunas,
el cambiar el camino placentero
con la senda que lleva a la locura.

Es muy fácil mirar para otro lado
y llenarte de ideas muy confusas,
olvidando que tienes un camino
y una meta que espera y que te busca.

Pero todo se olvida con tus ojos,
con la tierna mirada que susurra,
con las letras que surgen dulcemente
y que ofrecen palabras y ternura.

Una estrella que pasa por los cielos
con su cola brillante nos saluda,
y se llenan tus ojos de alegría
que tus labios ofrecen con dulzura.

Yo quisiera tenerte entre mis brazos
como ardilla que pasa vagabunda,
y subir por las ramas, hasta el cielo,
persiguiendo las nanas de la cuna.

Pero tú te quedabas extasiada
con los ojos cubiertos de negrura,
y una luz nos llevaba hasta el cuaderno
donde estaba el mensaje de tu pluma.

"...Llego a ti, mi dorado paraíso,
donde está la preciada partitura,
y la tomo sin más, entre las manos,
mientras busco en tus ojos la batuta..."

Rafael Sánchez Ortega ©
29/11/12

miércoles, 28 de noviembre de 2012

ME GUSTAN...


Me gustan los rosales y las rosas
y el pelo en que se posan de las hadas,
me gustan los aromas que desprenden
y el tacto de sus pétalos de grana.

Me gustan las caricias de la brisa
que llegan con las olas a la playa,
me gustan con el yodo y el salitre
que dejan a la piel tan erizada.

Me gustan las muchachas que caminan
haciendo filigranas con sus faldas,
me gustan esos pasos tan seguros
que besan las losetas de la plaza.

Me gustan los carteros sonrientes
que vienen con avisos y con cartas,
me gustan cuando suenan los timbrazos
y anuncian la misiva que me mandan.

Me gustan los ancianos, que en los parques,
enjuagan sus ojillos de las lágrimas,
me gustan porque sé, que es el nordeste,
la causa de esos besos que les faltan.

Me gustan los sesudos funcionarios
mirarlos sin parar, cuando trabajan,
me gustan cuando emplean lapiceros
y atentos, nos preguntan qué nos pasa.

Me gustan las historias agridulces
que cuentan peripecias y batallas,
me gustan, si al final de esos relatos,
no hay niños que perdieran lo que aman.

Me gustan las sonrisas y suspiros
que dejan tantos labios y nos matan,
me gustan esos ojos seductores
hablando, en el silencio, su mirada.

"...Me gustan los amores y el cariño
que llegan hasta el fondo de las almas,
me gustan, ¡cómo no!, si son sinceros
y entregan a sus rosas sin palabras..."

Rafael Sánchez Ortega ©
28/11/12

martes, 27 de noviembre de 2012

BUSCABA LA PALOMA ENTRE LAS LETRAS...


Buscaba la paloma entre las letras,
la sombra pronunciada y el silencio,
buscaba entre las páginas dormidas,
la arena tan ardiente del desierto.

No cruces el umbral de la inocencia,
ni rompas con tu sombra este momento,
por mucho que te afanes y que busques
los libros te conducen a los sueñós.

Hay sueños con arenas misteriosas
y sueños suspendidos de los cielos,
en unos las arenas se hacen perlas,
y en otros las estrellas son luceros.

Buscamos el origen de la vida
en letras encerradas en cuadernos,
sin duda porque somos como niños
corriendo tras los renos por el hielo.

Buscaba la paloma con la lira,
el pan con la comida del hambriento
la tierna campanilla de las hadas
y el suave ronroneo de los elfos.

Buscaba como buscan los poetas,
la voz inmaculada de los versos,
el eco inconfundible de las olas
dejando en las estrofas su lamento.

...Más hube de parar de tanta búsqueda
quedando entre las letras prisionero,
las sombras perseguían a los signos,
formando mil guarismos y elementos.

No sé cuanto duró la travesía;
de pronto me asediaron los recuerdos,
cambiaron los papeles de la infancia
por otros más vigentes en el tiempo.

Y así se terminaba aquella estampa,
tan llena de alegría y movimiento,
"un libro entre la arena abandonado
y un niño suspirando tras sus sueños"

Rafael Sánchez Ortega ©
27/11/12

lunes, 26 de noviembre de 2012

BOTONCITOS DORADOS QUE ACARICIO...


Botoncitos dorados que acaricio
suspendidos desnudos en mis sueños,
me dejáis esa magia y fantasía
de los niños que pugnan por tenerlos.

Y mis manos se pierden sin descanso
recorriendo los pétalos serenos,
mientras siento el suspiro vacilante
y el temblor de la brisa por mis dedos.

Botoncitos rosados de la infancia
que buscaban mis labios tan sedientos,
yo quisiera de nuevo acariciarlos
con mi lengua de trapo y estraperlo.

Se quedaron por siempre retenidos
entre nanas, canciones y entre besos,
y no puedo librarme de la imagen
tan hermosa y tan suave de aquel pecho.

Botoncitos de tiernos querubines
que buscaban los ojos tan hambrientos,
más allá de sonrisas y de abrazos
en la leche materna y el silencio.

Yo quisiera volver a aquellos años,
a ese instante perdido en el recuerdo,
y quisiera escuchar aquel susurro
que cerraba mis párpados inquietos.

Botoncitos de seda y amapolas
que rocé con mis labios tan pequeños,
sin saber que la fuente de la vida
me dejaba su sabia en cada encuentro.

Nuevamente quisiera revivirlos,
trasladar a mis labios en el tiempo,
acercar a mis dedos esa fruta,
y que de ella robaran sus misterios.

"...Botoncitos de rosa y nacarados
que venís en la noche hasta mis versos,
no dudéis de dormir en mis poemas
porque yo velaré vuestros secretos..."

Rafael Sánchez Ortega ©
26/11/12

domingo, 25 de noviembre de 2012

ATRÁS QUEDÓ SU CASA...


"...Atrás quedó su casa solariega
y entre sus paredes,
en los rincones más íntimos,
quedaron archivados miles de recuerdos,
miles de momentos y sucesos
vividos bajo su techo,
miles de sueños inalcanzables
que su imaginación hizo volar,
(estoy seguro de ello)...

Y allí quedó la casa,
a su espalda,
mientras él caminabas alejándose
y secando una lágrima
que había brotado de su alma..."

Rafael Sánchez Ortega ©
15/10/12

QUIERO PLASMAR EL MUNDO DE LOS SUEÑOS...


Quiero plasmar el mundo de los sueños
y robar sus colores y sus prendas,
sentir esa delicia deslumbrante
del sol que en la distancia ya se aleja.

Me quiero emborrachar del colorido
que ofrecen la bahía y la marea,
la barca descansando en el estuario,
las garzas planeando hacia la tierra.

Y quiero retener, en esta imagen,
los niños, abrazados que contemplan,
la linda panorámica del cielo
ajenos a los hombres y las guerras.

Su mundo no precisa de reclamos,
tampoco de ambiciones y violencias,
si acaso se conforman con sus juegos
soñando con las Hadas y Princesas.

Existe una casita pequeñita
con flores que la sirven como cerca,
al lado de unos robles centenarios
que escriben del otoño y sus poemas.

Nos dejan su mensaje entre las hojas
que bajan de las ramas y planean,
en medio de suspiros de los Elfos
que buscan en la playa a las sirenas.

El árbol, solitario, de una rama,
sostiene a una goma con su cuerda,
se trata de un columpio improvisado
capaz de sacudirnos las tristezas.

Los niños, que abrazados, continúan,
contemplan todo aquello mientras sueñan,
haciendo realidad tantos deseos
que salen de repente a su cabeza.

La niña que sostiene margaritas,
con pelo revoltoso y con melena,
suspira de placer por esta imagen
tan dulce y tan sutil en su belleza.

El niño soñador que está a su lado,
susurra poesías por sus venas,
el mar verdeazulado le reclama,
la barca solitaria en la ribera.

No sé como cerrar, con mis latidos,
los versos que ahora forman el poema,
se trata de un retrato solamente
y un sueño con un viaje a la inocencia.

Rafael Sánchez Ortega ©
25/11/12

sábado, 24 de noviembre de 2012

QUIERO SER UNA GOTA QUE TE BESE...


Quiero ser una gota que te bese,
que recorra tu cuello y tus sentidos,
que buscando tu seno se durmiese
y que escuche el tic-tac de sus latidos.

Quiero ser la mirada que leyese
esos versos que tienes escondidos,
esa luz adorada que me aprese
y que vibren mis labios aturdidos.

Quiero ser esa mano que se posa
y que busca tu mano en el sendero.
Quiero ser el jardín, y tú la rosa,
y sentirme, a tu lado, prisionero.
Quiero ser esa nota misteriosa
que en silencio te diga que te quiero.

Rafael Sánchez Ortega ©
24/11/12

MIENTRAS YO TE ESCRIBÍA...


Mientras yo te escribía unos versos de amor
unas lágrimas rodaban por mis mejillas.

Mientras mi poema iba tomando la forma
de unas ruinas, y el color ocre del pasado,
el corazón se encogía más y más
con las letras que escapaban al cuaderno.

Mientras yo resistía y ponía poesía
en los labios moribundos que suplicaban alegría,
los míos se agrietaban, por el paso de los años,
y perdían la frescura de la vida.

Mientras todo seguía cruelmente en su sitio
yo esperaba simplemente tu palabra
y la sonrisa que tenías para otros.

Rafael Sánchez Ortega ©
05/09/12

viernes, 23 de noviembre de 2012

CUANDO LOS GORRIONES SE HAYAN IDO...


Cuando los gorriones se hayan ido
y enmudezca el bullicio de la casa,
entonces sentiré lo que he perdido,
el fuego y el calor junto a la brasa.

Es fácil emitir hasta un gemido
como hace el esqueleto y su carcasa,
del viejo galeón que yace hundido,
ajeno al aparejo y a la nasa.

Necesito un abrazo fuertemente,
dejando su caricia en mi costado.
Preciso que mi amor irreverente
se junte con el tuyo desbocado.
Entonces sentiré como el torrente
se mezcla con el río enamorado.

Rafael Sánchez Ortega ©
23/11/12

DEJA QUE YO TE ACARICIE...


Deja que yo te acaricie
en el fragor de la tarde
y que suspire contigo
mientras recorro tu talle.

Porque en la mano nerviosa
una pasión ahora nace,
es como un fuego que surge
y algo se altera en la sangre.

Deja que mire tus ojos
solo por unos instantes
para que busque entre ellos
esa pasión indomable.

Porque la dulce mirada
lleva el clamor de la carne,
que susurrando precisa
una caricia tan suave.

Deja que roce tu pelo
tan sugerente y brillante,
y que se cierren mis ojos
estremecidos de hambre.

Porque quisiera el dibujo
de tu perfil y paisaje,
mientras me embriaga el perfume
de tu contorno elegante.

Deja que bese tus senos
y que mis labios se sacien,
en la fontana bendita
que me conduzca a tu valle.

Porque mis labios sedientos
quieren el beso adorable,
el que palpita en tu sexo
con la pasión desbordante.

Deja que alcance tu vientre
y que a tus muslos me baje,
y que recorra tus piernas
mientras de amor te deshaces.

Porque eso quiero que sientas
y con paciencia adorarte,
para que vibres conmigo
en un amor incansable.

"...Deja que yo te acaricie
y que recorra en el viaje,
desde las suaves colinas
a los pequeños detalles.

Esos que todo lo escuchan
y que nos dejan señales,
para llegar hasta el bosque
donde los juncos se abren..."

Rafael Sánchez Ortega ©
23/11/12

jueves, 22 de noviembre de 2012

EN LA FÁBRICA DEL TIEMPO...


En la fábrica del sueño
se acumulan nubarrones,
unos buenos y otros malos
porque somos soñadores.

Hay payasos con caretas
y con largos pantalones,
y con caras sonrientes
muy pintadas de colores.

Hay estrellas que salpican
en el cielo por la noche,
y una nube sonrojada
que tras ella las esconde.

Hay canciones en el campo
de cigarras tan conformes,
que dan gracias a la vida
y a los niños que las oyen.

Hay pegasos en las ferias,
caballitos trotadores,
que no saben de batallas
y dan vueltas, a su trote.

Hay juguetes esperando
a la mano que los tome,
bicicletas, tirachinas,
cochecitos y camiones.

Hay un mundo diferente
de mujeres y de hombres,
donde impera la alegría
entre niños y mayores.

Hay jardines con rosales,
entre hayedos y entre robles,
donde alondras y jilgueros
dejan vida en sus canciones.

Hay perfectas marionetas,
sentimientos monocordes,
y una paz que va en las almas
disolviendo las pasiones.

Hay mil sueños escondidos
sin billetes y en desorden,
en el pecho que suspira
con temor a que le roben.

Hay sonidos agridulces
de sirenas y gorriones,
que han surgido de los versos
y del néctar de las flores.

Hay un sol que ya se apaga
sobre un lago y unos montes;
y una rosa y una rama
a sus rayos que recogen.

"...En la fábrica del sueño
van surgiendo mil rumores
y la vida continúa,
entre sueños e ilusiones..."

Rafael Sánchez Ortega ©
22/11/12

miércoles, 21 de noviembre de 2012

MIRADAS QUE DICEN TANTO...


Miradas que dicen tanto
sin sonidos ni palabras,
y que son el fiel reflejo
del latido de las almas...

Son las miradas del niño
inocentes en su infancia,
con el brillo en las pupilas
de mil luces encantadas.

Son las miradas del joven,
muy nerviosas y románticas,
con el ansia tras sus cejas
por soñar con su guitarra.

Son las miradas tranquilas,
del anciano que se calla,
y contempla ensimismado
las palomas de la plaza.

Son las miradas furtivas
de la joven, que en su casa,
busca y busca en el camino
la figura tan amada.

Son las miradas del padre,
suplicando por el agua,
regresando de los campos
bien labrados con su azada.

Son las miradas sinceras,
de los ojos miel castaña,
de la madre enternecida
que ya tiende la colada.

Son las miradas ansiosas
del molino de la granja,
que estremece a quien le mire
con sus aspas de venganza.

Son las miradas oscuras
de la bocana y la barra,
con sonidos y rugidos
que las hacen tan opacas.

"...Miradas que dicen tanto,
miradas, tiernas miradas;
miradas que son sonrisas
y en nuestras almas se guardan..."

Rafael Sánchez Ortega ©
20/11/12

martes, 20 de noviembre de 2012

TE MARCHAS CORAZÓN HACIA LA NADA...


Te marchas corazón hacia la nada
y dejas en suspense los sentidos,
las olas se han quedado silenciosas
igual que las estrellas sin su brillo.

Susurran los cipreses en el campo
y lloran los gorriones en sus nidos,
las hojas de los árboles de otoño
detienen ese vuelo al infinito.

Se cierran los violines de la orquesta
y apagan los laúdes los sonidos,
el coro se retira temeroso
detrás de los telones por testigos.

Ha muerto el corazón de la esperanza,
el tiempo se ha parado y detenido,
no suenan las resacas en las aulas,
ausentes de alumnado y vocerío.

Se quedan las pizarras sin palabras
carentes de razón y contenido,
las tizas blanquecinas no contestan
y esperan a los dedos de los niños.

Esperan como esperan los amantes,
el beso y la mirada complacidos,
la mano que les roce los cabellos
y el labio que les deje su cariño.

Se aleja el corazón y se distancia,
navega y va sin rumbo definido,
no sabe de ventiscas ni galernas
y menos de funestos vaticinios.

Es fácil que tropiece y se desangre
por culpa del costado malherido,
y es fácil que se apaguen sus pupilas
si acaso no llegara a su destino.

Lo malo es que camina en el silencio,
sus pasos ya cansados van dormidos,
y así no se distinguen las pisadas
que van desde la tierra hasta el Olimpo.

Me dueles corazón, y tú lo sabes,
ahogas con tu marcha mis latidos,
el alma ya no pide, sólo implora,
y muere a mi pesar, sin dar un grito.

Rafael Sánchez Ortega ©
20/11/12

lunes, 19 de noviembre de 2012

DIFUMINÉ EL RECUERDO ENTRE LA NIEBLA...


Difuminé el recuerdo entre la niebla
y seguí caminando nuevamente,
llevaba tantos sueños en el alma
queriendo confundirse con la nieve...

Por eso y porque el tiempo va de prisa
abandoné cadenas para siempre,
entre la bruma densa y el rocío
de aquella tarde y noche de septiembre.

Tenía por delante mil etapas,
proyectos imposibles y deberes,
tenía muchos besos en los labios
con ganas de posarse entre tus sienes.

Debía recobrar la compostura,
marchar hacia la vida sin dobleces,
cansarme por veredas y caminos
bebiendo el agua fresca de sus fuentes.

Debía recoger en los sembrados
el trigo tan dorado y tan alegre,
oír de las estrellas sus sonrisas
y el canto de cigarras  y cipreses.

Es fácil sucumbir a la nostalgia
producto de la brisa y del nordeste,
que aumentan, más si cabe, la locura
de un día acalorado por la fiebre.

Es fácil que no salgan las palabras
y queden en la boca, entre los dientes,
las frases recitadas al espejo
ocultas en los labios y en sus pliegues.

No importa reflejar tanta demencia
producto del amor que es  evidente,
los hombres se comportan como niños
y ansían sentimientos tan rebeldes.

"...Difuminé el recuerdo entre la bruma
y seguí paso a paso por el césped,
tenía mil latidos retenidos
y sueños con claveles que ofrecerte..."

Rafael Sánchez Ortega ©
19/11/12

domingo, 18 de noviembre de 2012

ERA UN MUNDO DE PAPELES...


Era un mundo de papeles
de revistas y de libros,
donde sueños y alegrías
se juntaban con sigilo.

Era un mundo de cristal
en el alma de aquel niño,
que leía y releía
mil novelas de bolsillo.

Recortaba con tijeras
crucigramas con artículos,
reportajes con ensayos
que guardaba con gran mimo.

Pero el tiempo no perdona
ni el espacio es infinito,
y llegaron otros años
de inquietudes y suspiros.

Y vinieron las mudanzas
con el cambio de los pisos,
y los libros se quedaron
entre el polvo y el olvido.

Muchos años han pasado,
tantos ya, que no los sigo,
cuando un día, por la tarde,
de limpieza va aquel niño.

Y se encuentra las revistas,
con los libros intranquilos,
bajo el polvo y la miseria
entre cajas escondidos.

Allí están tantos tesoros,
viejos sueños primerizos,
que surgieron en la infancia
con piratas y con indios.

Allí están las ilusiones,
las princesas con su hechizo,
las sirenas de la playa
con sus cantos y sonidos.

Y allí duermen los susurros,
los claveles y los lirios,
que nacieron en el alma
de aquel tiempo ya marchito.

Pero es tiempo del otoño,
con los cielos tan sombríos,
y es el tiempo de limpieza
de rincones escondidos.

Y los libros van saliendo
sin saber bien su destino,
entre lágrimas furtivas
y recuerdos infinitos.

Porque un mundo y una vida
van en ellos muy unidos,
con el alma de aquel hombre
que ahora debe suprimirlos.

Allí van las emociones,
los retratos y el cariño,
que sirvieron de modelo
para amar y ser querido.

Una lágrima se pierde
y se funde sin motivo
en los labios temblorosos
que han soñado y han leído.

"...Era un mundo de revistas
de oropeles sin sentido,
donde libros y alegrías
se juntaban en sus signos..."

Rafael Sánchez Ortega ©
18/11/12

sábado, 17 de noviembre de 2012

YO QUISIERA SENTIR...


Yo quisiera sentir entre mis labios
la gota del rocío dulcemente,
llegando en el relente de la noche
cual tierna avanzadilla de las nieves.

La gota que calmara mis sentidos
el agua de la noche que se duerme,
la nota desgajada de los cielos
llegando hasta la tierra donde muere.

Yo quisiera sentir entre mis brazos
tu cuerpo tan sensual y tan ardiente,
la excelsa melodía de la carne
que tiembla, que suspira y se estremece.

El cuerpo que deseo y me desea,
los ojos de mirada tan alegre,
la hermosa algarabía de la sangre
que corre desde el pecho hasta tu vientre.

Yo quisiera sentir entre mis manos
tus manos delicadas y calientes,
para ir a disfrutar entre las olas
del mar y del salitre de los muelles.

Las algas quitaría de tu pelo,
dejando que la brisa impunemente,
llegara y te abrazara con cariño
cerrando tus ojitos tan rebeldes.

Yo quisiera sentir entre mis dedos
el roce alborotado de tus sienes,
la sangre que te quema las entrañas
y el fuego de tu seno tan ardiente.

Quizás reprimiría los suspiros,
atento al galopar de los corceles,
del viejo corazón que me sustenta
y atiende mis locuras y vaivenes.

Yo quisiera sentirte entre mi alma
y sentir, a la vez, como tú sientes,
luchando y empleando la energía
del tiempo que se pasa y que no vuelve.

Y quisiera sentir que estás tan viva
que somos uña y carne en el presente,
que corren paralelas nuestras sendas
en busca de un amor que es para siempre.

Rafael Sánchez Ortega ©
17/11/12

viernes, 16 de noviembre de 2012

TE LO DIRÉ SIN GRITOS NI PALABRAS...


Te lo diré sin gritos ni palabras,
te lo daré, si acaso, en el silencio,
y tras tomar tus manos en mis manos,
musitarán mis ojos que te quiero.

Pronunciaré la dulce melodía
para sentir la curva de tu seno,
en el vibrante son acompasado
de ese temblor que llega hasta los huesos.

Rescataré del alma los suspiros
un día cancelados en el tiempo,
y nacerán de nuevo mis poemas
para entregarte a ti, sobre tu cuerpo.

Dibujaré tu piel con mil caricias
con el candor intenso de mis dedos
para dejar allí con un susurro
el tierno contenido de unos versos.

Pero no quiero solo que estas frases
se vayan de vacío con el viento,
y sean como lazos de cometas
que suban con las nubes hacia el cielo.

Yo quiero desnudarte con mis manos
y quiero recorrerte con mis besos,
sintiendo como brinca tu cintura
y clama con pasión todo tu sexo.

Yo quiero que te acuestes a mi lado
y escancies la bebida que yo bebo,
que subas extasiada hasta la cima
y goces con fervor de ese momento.

Seguro que se duermen los sentidos
mecidos por la brisa y el flamenco,
y es fácil que se callen las guitarras
cansadas de caricias y magreos.

Te lo diré sin gritos ni palabras,
te lo daré, si acaso, con mis sueños
y tras tomar tus labios con mis labios,
susurrarán mis besos lo que anhelo.

Rafael Sánchez Ortega ©
16/11/12

jueves, 15 de noviembre de 2012

¿CUÁNTAS VECES, DESDE EL ÁRBOL...?


¿Cuántas veces, desde el árbol
ha cantado un ruiseñor?
¿Cuántos sueños has tenido
y quedaron bajo el sol?

No respondas, no hay derecho
a que pierdas la razón,
en un tiempo y en la suma
marchitados con dolor.

Es posible cautivarse
vivamente de una voz,
de una cara y unos labios
que has besado con ardor.

Es posible estremecerse
ante un cuerpo y su canción,
de unos ojos que te miran
y te ofrecen su candor.

Es posible que no sepas
donde queda tu razón,
y que tiembles como un niño
cuando oculta su valor.

Sin embargo tus suspiros
son bebida y seducción,
una llama de tu pecho
y el tic-tac de su reloj.

Los latidos son constantes
y aceleran su rumor,
un galope y un crescendo
de ese viejo corazón.

Ha llegado la resaca,
el salitre y el candor,
ha venido la alegría
de unos ojos y su amor.

¿Cuántas veces en el árbol
una alondra se posó?
¿cuántas veces has amado
y sentido esta pasión?

Rafael Sánchez Ortega ©
15/11/12

miércoles, 14 de noviembre de 2012

SI VOLVIERA A VIVIR LO QUE HE VIVIDO...


(A Australia Elisa Lattke Valencia
ya que esta noche, sus versos, fueron
la fuente de inspiración de este poema)
https://www.facebook.com/groups/313722575319280/502945389730330/?notif_t=group_activity
 

Si volviera a vivir lo que he vivido
y naciera de nuevo de la tierra,
sentiría el dolor de tanta guerra
en el pecho quebrado y malherido.

Es un tiempo pasado y no presente,
es el sueño quizás tan añorado,
el volver a ese tiempo que ha marchado
caminando sin miedo entre la gente.

Volvería la vista a la pradera
conteniendo la lágrima furtiva,
esa gota de amor que está tan viva
y que pide una nueva primavera.

Es posible que surja alborotada
la pasión desbordada y contenida,
y que brote del alma, renacida,
otra llama de fuego afortunada.

He sembrado ese grano, que cosecho,
en la tierra silente del mañana,
y he sentido la voz de la campana
repicar en mi azada y en mi pecho.

He bailado de noche por la playa
y mis pies han formado un maremoto
respondiendo a ese ciclo tan remoto
de unas olas sacando su rondalla.

Y al final he acabado con el sueño,
acortando la luz y la utopía,
es mejor contener tanta alegría
que morir por amor en este empeño.

Rafael Sánchez Ortega ©
14/11/12

martes, 13 de noviembre de 2012

NOS DICES QUE NOS DEJAS POR UN TIEMPO...


(A Flor, nuestra compañera del Taller de Escritura...)

Nos dices que nos dejas por un tiempo,
que buscas esa paz tan necesaria,
y queda la escritura, mientras tanto,
carente de tus letras y tu gracia.

Nos dices muchas cosas en tu escrito
y vemos el temblor de tus palabras,
tus ojos portadores de sonrisas
cubiertos de tristeza por las lágrimas.

Y quedan las cuartillas en silencio,
los versos suspendidos en el aula,
la mano portadora de la pluma
silente y sin la nota que le falta.

Se quedan los jardines sin la rosa,
la Flor, entre las flores, destacada,
la dulce primavera y el rocío
carentes de tus versos y tu alma.

Y pierdo en los encuentros a la amiga,
la dulce compañera destacada,
capaz de sorprendernos con sus letras
igual que las resacas en la playa.

Perdemos los amigos tu presencia
de siempre, tan gentil y deseada,
igual que hemos perdido los sonidos:
"enmudeció el reloj y su campana".

Por eso te rogamos que regreses
tan pronto recuperes a tu calma,
y alejes de tu pecho la tristeza
al pozo tan lejano de la nada.

Sabemos que los días serán tristes,
eternos, con galernas y batallas,
y sabes que estaremos a tu lado
eterna Dulcinea con tu barca.

Sabremos remontar, con nuestros remos,
la dura travesía de la barra,
llegando hasta tu puerto, en La Barquera,
para pedir descanses en sus faldas.

Nos dices que nos dejas por un tiempo,
que buscas a tu Musa en la distancia,
y queda un gran vacío entre nosotros
carentes de tu risa tan preciada.

Rafael Sánchez Ortega ©
13/11/12

lunes, 12 de noviembre de 2012

SUJETARÉ TUS BESOS A MIS LABIOS...


Sujetaré tus besos a mis labios
para que vivan siempre y no perezcan,
para que dejen risas y esperanzas
haciendo más difícil la tristeza.

No quiero que se pierdan esos besos
ni quiero que se muera tal belleza,
recuerdo aquel momento inolvidable
unidos y mirando las estrellas.

Fue un rato muy bonito el que pasamos
soñando con futuros y promesas,
con días paseando por la playa
y ratos escuchando las mareas.

No puedo describir esos instantes
ni el beso recibido con presteza,
tan sólo que sentí como en la noche
de pronto me abrazaba una sirena.

Los besos de sabor a chocolate
tenían una pizca de frambuesa,
mezclados con el néctar agridulce
libado por tus labios de cereza.

Por eso los recuerdo entusiasmado,
suspiro recordando aquella escena,
y vivo en ese  instante nuevamente
por medio de los versos y mis letras.

Uniéronse mis besos a tus besos
sin frases ni palabras de leyenda,
surgieron de los sueños de dos almas
que amaban y querían tal vivencia.

Los besos que nos dimos, uno a uno,
sumaban una cifra muy diversa,
no puedo precisarla, ni lo intento,
la sangre, al recordarlo, se me altera.

Tus labios se mezclaban con mis labios
surgiendo así los besos y su esencia,
suspiros y susurros contenidos
que quiero que perduren y no mueran.

"...Sujetaré tus besos a mis labios
para que estén por siempre entre mis venas,
uniendo su alegría con la sangre
para escribir con ésta mis poemas..."

Rafael Sánchez Ortega ©
12/11/12

domingo, 11 de noviembre de 2012

UNA LÍNEA NOS UNE Y NOS SEPARA...


I

Una línea nos une y nos separa,
un cordón en la mente imaginario,
un candor que se extiende por la cara
al oír en silencio un comentario.

Más el hilo sutil de la almenara,
el que aviva las llamas a diario,
es la voz prodigiosa que no para
en el fino conducto utilitario.

Es amor y dolor tan simplemente
que se cambia y transmuta en un instante.
Es la risa y el llanto de la gente
compartidas de forma emocionante.
Y a la vez es el cáliz sugerente
que se bebe y apura refrescante.

Rafael Sánchez Ortega ©
11/11/12

UNA MANO LO ATRAPA Y ACARICIA...


II

Una mano lo atrapa y acaricia,
y los dedos recorren sus sentidos,
hay en ellos un tanto de pericia
arrancando suspiros contenidos.

La otra mano lo mira sin codicia
y en el aire dibuja mil sonidos,
es quizás esa nota con malicia
rescatando del pecho los laltidos.

Pero sigue la voz encandilada
susurrando palabras y mensajes.
Es la voz tan hermosa y adorada
que estremece cual brisas y masajes.
Y es la oreja paciente y resignada
quien aguanta resacas y oleajes.

Rafael Sánchez Ortega ©
11/11/12

AL FINAL, EL LECTOR ESTUPEFACTO...


III

Al final, el lector estupefacto,
quiere hablar y escuchar en este día,
reclamando tener ese artefacto
compartiendo su llanto y alegría.

Ya se apaga aquel cuerpo tan compacto,
esa extraña y pequeña mercancía,
que es capaz de dejarte estupefacto
y a la vez elevar tu picardía.

Pero sé que no he dicho en este escrito
ese nombre que llama en la distancia,
la palabra que causa el sambenito.
al oído viril y al de la infancia.
Resumiendo, en silencio y sin un grito,
el teléfono diré, es la sustancia.

Rafael Sánchez Ortega ©
11/11/12

sábado, 10 de noviembre de 2012

ES FÁCIL CONFUNDIRSE CON LA NIEBLA...


Es fácil confundirse con la niebla
en medio de la noche y de las sombras,
las dudas aparecen sin pensarlo
y surgen las espinas con las rosas.

Entonces es la sangre la que grita
y sale por la herida gota a gota,
sumida en la penumbra y el misterio,
del alma, confundida, que la llora.

Es fácil recurrir a la utopía
hablando de metáforas y alondras,
buscando mil excusas sin sentido
que ofuscan la razón de los idiotas.

Se cambia el corazón con un remiendo
que rompe, que trasplanta y que lo borda,
el pecho silencioso y maloliente
que sufre por amor en su derrota.

Ya suenan las campanas en la iglesia
y anuncian oraciones en la aurora,
ya llegan las gaviotas a la playa
y vuelan por encima de las olas.

La vida se compone de misterios,
de nieblas que se funden con las rocas,
de dudas que renacen cada día
y surgen en las almas cada hora.

La vida es esa eterna interrogante
que marca las respuestas silenciosas,
la voz de las estrellas que nos hablan,
y el llanto contenido del que llora.

Entonces despertamos de los sueños
sintiendo el temporal en nuestra borda,
resuenan las cuadernas de las almas
por culpa de los vientos que la azotan.

"...Es fácil confundirse con la niebla
en medio de una vida tan ansiosa,
las dudas se entremezclan de utopías
y surgen las carencias dolorosas..."

Rafael Sánchez Ortega ©
10/11/12

viernes, 9 de noviembre de 2012

UNA ROSA OLVIDADA EN EL CUADERNO...


Una rosa olvidada en el cuaderno,
una flor simplemente enamorada,
un volar muy sutil de mariposa
y el temblor de los pétalos con alma.

¿Por qué tiembla la flor tan diferente?,
¿por qué habla de amor en la mañana?,
¿por qué duerme olvidada entre las letras
y su alma se agita y no descansa?

Es posible, quizás, que en esta rosa
se acumulen promesas muy lejanas,
y también sensaciones y suspiros
al calor de las noches y las palabras.

Es posible que esconda los susurros
y canciones de búhos y cigarras,
enlazados con besos otoñales
y el fulgor de una estrella solitaria.

Sin embargo volvamos al cuaderno,
a ese libro surgido de la nada,
a las hojas que encierran sentimientos
en la tinta mezclada con las lágrimas.

Contemplemos al hombre apasionado,
al candor que le nace y le rebasa,
a la nube sutil y al dobladillo
que la luna despliega y que señala.

A su lado se ve una mariposa
con sus alas coquetas, desplegadas,
y que quiere pasar indiferente
e invisible seguir en esa marcha.

Pero llega la noche y el rocío
y se hielan la rosa y las palabras,
se congelan los ojos con las dudas
y al final hasta el alma se desgarra.

Yo quisiera plasmar en un poema
todo aquello que quema las entrañas,
la ilusión que se ahoga lentamente,
y el amor que vacila y que se apaga.

Más no sé, y mis versos son muy torpes,
el invierno me aturde con sus garras,
el amor se ha quedado con los sueños
de una infancia vivida y ya lejana.

"...Una rosa olvidada en el cuaderno,
una flor amorosa y añorada,
un volar con los sueños  por el mundo
y el temblor de mi alma en la distancia..."

Rafael Sánchez Ortega ©
09/11/12

jueves, 8 de noviembre de 2012

NO BUSQUES EL AMOR ENTRE LOS LIBROS...


No busques el amor entre los libros
y sigue tras su pista en la mirada,
quizás en las pupilas que te buscan
esté la poesía que te falta.

Es fácil que equivoques el camino
y marches, sin saberlo, hacia la nada,
incluso que vaciles y que dudes
en cruce de caminos y cañadas.

Más mira si esto pasa hacia adelante,
los cielos cargarán con tu nostalgia,
las penas se te harán más llevaderas
si sigues en la búsqueda preciada.

Hay días que sin duda no amanece,
la noche se resiste con el alba,
los tonos de negrura y los granates
compiten cual si fuera una batalla.

Así es el corazón de las personas,
un cono de volcán, donde la lava,
fermenta y, se desborda día a día
y sale entre los pliegues de las almas.

Dominan egoísmos y pasiones
y faltan precisiones y palabras,
en medio de la juerga y fantasía
que altera las promesas y esperanzas.

Un día se detienen los relojes
y quedan sus agujas tan cansadas,
durmiendo del tic-tac tan presuroso
y ajenas a guiarnos con  su marcha.

Las dulces manecillas de los hombres
quedaron tan enfermas y oxidadas,
que un pecho suspiró desde el futuro
por culpa del amor y la distancia.

No importa lo que piensen los poetas
y menos sus estrofas tan doradas,
importa lo que sientas en el pecho
y aquello que te ahoga en la garganta.

"...No busques corazón, entre los libros,
la nota del amor tan deseada
y busca entre los ojos que te siguen,
la luz enamorada que te llama..."

Rafael Sánchez Ortega ©
08/11/12

miércoles, 7 de noviembre de 2012

TE FUISTE Y SE CALLARON LAS FONTANAS...


Te fuiste y se callaron las fontanas
y también los gorriones en las eras,
un manto se posó sobre los campos,
oscuro y, conteniendo la tristeza.

Un manto de palabras escanciadas
surgieron esparcidas por la tierra,
con letras y con versos renacidos
volcados por la alegre primavera.

La voz de tu garganta silenciada
quedaba en los oídos como prenda,
regalo y melodía inconfundible
de viejos recitales en las ventas.

Ya sé que los estanques se vacían
por falta de la lluvia que no llega,
y sé que en el otoño, las alondras,
emprenden su regreso a las aldeas.

Más sé que volverán en otro otoño,
las lágrimas del cielo, como perlas,
y tú renacerás con las fontanas
mostrando la sonrisa siempre fresca.

La voz resurgirá desde tu pecho
temblando en los jardines las palmeras,
y el verbo brotará de tu garganta
con versos y con besos en la entrega.

Pues tienes esa magia y fantasía,
tan propio de sirenas y princesas,
que haces que los sueños den comienzo
y callen y enmudezcan las estrellas.

No sé si los amantes sorprendidos,
se queden escuchando las mareas,
o busquen el silencio de la nada,
allí, donde resuena con más fuerza.

Suspiras y recuerdas las fontanas,
la plaza con la torre de la iglesia,
las calles medievales de tu pueblo
y el vuelo singular de las cigüeñas.

Suspiras y recuerdas tantas cosas
que el alma se te encoge y ya no piensa,
se queda adormilada entre nostalgias
de un tiempo de la infancia y de la escuela.

Por eso las miradas se apagaron
perdidas las pupilas en la arena,
y en ellas se borraron los mensajes
escritos con fervor en tantas fechas.

Escritos conteniendo sentimientos,
abrazos seductores y promesas,
con besos, que robados a la noche
hacían más hermosos los poemas.

"...Te fuiste y se callaron las fontanas;
te fuiste corazón y aquí nos dejas,
un manto se posó sobre las almas
ardientes, soñadoras y sedientas..."

Rafael Sánchez Ortega ©
07/11/12

martes, 6 de noviembre de 2012

UNA FLOR NACIÓ EN EL ALMA


Una flor nació en el alma
y allí mismo se quedó,
una flor con sus raíces,
y mil pétalos de amor.

Una mano primorosa
fue la causa de esa flor,
pues con mimo y con cariño
día a día la regó.

Y llegó la primavera
con la lluvia y con el sol,
y la flor tan diligente
con sus pétalos creció.

Una estrella desde el cielo
vigilaba con pasión,
a la flor tan primorosa
del jardín del creador.

Flor hermosa, flor eterna,
¿dónde está quien te sembró?,
¿dónde esconde su figura
ese niño encantador?

Por si acaso tú lo ignoras,
ese niño, con su voz,
es la chispa de la vida
y es la fuente del amor.

Es el cáliz con el néctar,
es la aguja del reloj,
es la dulce fantasía
en el cuadro del pintor.

Es el alma enamorada
que ha cumplido su misión,
y el ladrón de corazones
que palpitan con ardor.

...Y a la flor, con sus colores,
en el alma la vió Dios,
sonriente, desde el cielo,
y con besos la cubrió.

Flor eterna y delicada
no nos dejes sin tu olor,
y los pétalos de seda
no me digan nunca adiós.

Yo te miro y te contemplo
y te sigo con fervor,
mientras pasan las semanas
y tú estiras tu blasón.

Una lágrima furtiva
desde el cielo te cayó,
una gota de unos ojos
de aquel niño soñador.

"...Una flor nació en el alma
y en el alma se durmió,
arrullada con canciones
y con pétalos y arroz..."

Rafael Sánchez Ortega ©
06/11/12

lunes, 5 de noviembre de 2012

HAY LÁGRIMAS QUE LLEGAN DESDE EL CIELO...


Hay lágrimas que llegan desde el cielo
y lágrimas que dejan las estrellas,
en ambas recibimos los suspiros
que envían del Olimpo los poetas.

El mundo de las musas renovadas,
allí donde renacen las leyendas,
el sitio donde el viento se contagia
de olores de rosales y azaleas.

Los niños las contemplan asombrados
abiertas sus pupilas tan traviesas,
con mezcla de ilusión y fantasía
trazada con candor en su inocencia.

Hay gotas cristalinas que resbalan
y bajan por el cuello como perlas,
se pierden en la senda intransitable
del seno que se oculta tras la prenda.

Un gato que camina por la calle
pasea con tranquila indiferencia,
ajeno a la cortina de la lluvia
y al agua que se forma en la calleja.

Un hombre va deprisa hacia el trabajo
soltando palabrotas algo oscenas,
no lleva cazadora ni paraguas,
tan solo lleva puesta su chaqueta.

El agua continúa su descenso.
No sabe de alegrías y tristezas,
el cielo las mandó con un mensaje
y ellas, en sus gotas, lo liberan.

Miremos a la lluvia con agrado,
pensemos en abrazos y promesas,
sintamos el bautismo de sus besos
que mojan nuestros labios con presteza.

"...Hay lágrimas que vienen desde el cielo
y hay otras que destilan los poemas,
en ambas rescatamos los latidos
del sueño que conduce a las estrellas..."

Rafael Sánchez Ortega ©
05/11/12

domingo, 4 de noviembre de 2012

HE DEJADO A MI ESPALDA LOS RECUERDOS...


He dejado a mi espalda los recuerdos,
las negras telarañas y la niebla,
la hiedra que trepaba por los muros
y el viejo caserón con la tristeza.

Y quedaron también las ilusiones
recogidas en verdes primaveras,
y con ellas los besos y suspiros
que surgieron mirando a las estrellas.

Me abandono a la noche del futuro,
a ese largo camino sin respuestas,
al eterno y tenaz interrogante
que persiguen mis pasos por la senda.

He salido a fumar bajo la luna
y las manos nerviosas ya me tiemblan
al tomar con las mismas las cerillas
y encender un pitillo en las tinieblas.

Es tan falsa y tan vil esta memoria
que se escuda en las sombras y miserias,
del pasado que queda a las espaldas
recubierto de frases y promesas.

Unas frases nacidas en verano
al calor de pasiones satisfechas,
y promesas que nunca se cumplieron
porque fueron palabras muy ligeras.

Ya termino el cigarro y continúo
este largo camino de siluetas,
el que forman los pinos y los olmos
con la luz de la luna tan coqueta.

Más la luz que yo busco y que deseo
es aquella que brilla y que destella,
la que manda un mensaje en sus latidos
y una suave caricia hasta mis venas.

"...He dejado a mi espalda los recuerdos,
la nostalgia se funde en las leyendas,
mientras sigo, adelante, caminando,
tras el sueño de añil de la inocencia..."

Rafael Sánchez Ortega ©
04/11/12

sábado, 3 de noviembre de 2012

PREGUNTAS A LA LUNA.


(Al leer el poema "Dudas", de Anna Soler,
me vinieron a los dedos estas letras)


http://romanceanna.blogspot.com.es/2012/11/dudas.html

Preguntas a la luna
y ella no sabe mi nombre.
Tú buscas unos ojos invisibles
que presientes y que ignoras donde están.

Pero ellos sí te ven;
mis ojos sí te ven y te siguen.
Admiran tus pasos y también tu silencio.
Observan tu sonrisa y sonrién contigo.

Paseas y voy a tu lado, siguiendo tus huellas.
Miro en tu mirada y leo en tu pupila.
Escucho en tus oídos el eco
y la respuesta que te llega de la nada.

Nadie sabe mi nombre,
nadie me ha visto,
pero otros me buscan.
Tú me buscas y me llamas.
Soy el Amor, ¿acaso dudas?...

Al final despiertas de tu sueño,
envuelta entre girones de la niebla,
y de la bruma.
Extiendes una mano
y nadie te responde desde el lecho.
¿Fue el viento con la lluvia
los que hicieron que soñaras todo eso?
o ¿es el canto y el suspiro de tu pecho,
el que forma fantasías y las mezcla
con los besos y susurros de las hojas
tan doradas del otoño...?

Estás despierta.
Estoy despierto.
Tú buscas al Amor con tu sonrisa.
Yo le he buscado, y no lo encuentro...

Rafael Sánchez Ortega ©
03/11/12

HE VUELTO A LA ESCRITURA...


He vuelto a la escritura
que es parte de mi vida,
igual que de los labios
el beso y la sonrisa.

He vuelto hasta el cuaderno
de páginas vacías,
sin letras ni palabras
que alegren las pupilas.

Más quiero que renazcan
las flores tan sencillas,
que vengan mariposas
buscando margaritas.

Que brillen las estrellas
también en las cuartillas,
que hablen y que cuenten
leyendas infinitas.

He vuelto a la escritura
con olas blanquecinas,
salitre entre los dedos
mezclado en la plumilla.

He vuelto sin palabras,
tan sólo con mi dicha,
la sangre de las venas
en tinta recogida.

Más quiero que se acerquen
las tiernas utopías,
y llenen el cuaderno
de sueños y conquistas.

Que canten las cigarras
y sientan de la brisa,
el beso y el suspiro
que roza las mejillas.

He vuelto a la escritura
de forma sibilina,
sabiendo que aquí estaba
la eterna poesía.

He vuelto sin pensarlo,
como alguien que se invita,
de forma voluntaria
y pluma manuscrita.

Más quiero que los miedos
se fundan con la dicha,
recuerdos y nostalgias,
que llevo en la mochila.

Que bailen las gaviotas
y vuelen por la orilla,
y abajo, los poetas,
escriban melodías.

"...He vuelto a la escritura
sin nadie que me siga,
tan sólo con mis versos
y el alma, al fin, tranquila..."

Rafael Sánchez Ortega ©
03/11/12

viernes, 2 de noviembre de 2012

MÁS ALLÁ DE LA VIDA...


Más allá de la vida está la luz,
la eterna interrogante que nos ciega,
los puntos suspensivos que dejamos,
a veces, cuando faltan las respuestas.

Pero la luz que buscan los sentidos
es esa llave, libre y siempre eterna,
la que libere brumas y pasiones
de finas telarañas y de nieblas.

Es esa rosa fresca y perfumada
que asoma en los jardines muy traviesa,
llenando de alegría nuestros pechos
por medio de su aroma y de su esencia.

Porque la luz que viene con la rosa
es un pequeño faro que destella,
es el latido alado de los niños
con el fervor del ángel que los vela.

Más allá de la vida está la paz
y el sueño de la linda cenicienta,
las ansias de alcanzar lo que no tiene
para llegar muy pronto hasta la meta.

Pero la paz buscada y que nos falta
es como el manto añil de las estrellas,
es la cubierta gris del firmamento
que cubre los senderos y la tierra.

Es esa capa blanca del rocío
que muestra en las mañanas su belleza,
haciendo que tiriten nuestras almas
y emitan oraciones muy diversas.

Porque la paz que viene en el rocío
es sensación de calma tan eterna,
que eleva los sentidos a los cielos
y deja entre los mismos sus esencias.

Más allá de la vida está el amor,
-reclaman los agnósticos con pena-,
los signos y utopías de un pasado
clamado por tantísimos poetas.

Pero el amor ansiado desde siempre,
es ese cáliz fino y sin reserva,
es la alegría misma de la vida
que cambia y que recorre por las venas.

Es el torrente libre y desbocado,
en esos versos puros, sin cadenas,
que surgen de las almas al cuaderno
cual flores de una nueva primavera.

Porque el amor sincero, y sin palabras,
es el que dá y se ofrece sin reservas,
como una clara y linda melodía
que llega y que adormece con su entrega.

"...Más allá de la vida está la luz,
la paz tras las batallas incruentas,
las nota del amor con mil suspiros
para abrazar, sin fin, con mis poemas..."

Rafael Sánchez Ortega ©
02/11/12

jueves, 1 de noviembre de 2012

QUISIERA CONTAGIARME DE TU RISA...


Quisiera contagiarme de tu risa
que surge de los labios y de adentro,
la risa temblorosa y tan sumisa
que llega hasta mis ojos, a su encuentro.

Quisiera ser la fuerza de esa brisa
que hace de tu seno el epicentro,
la curva que ajustada a tu camisa
dibuja con mi beso, su reencuentro.

Quisiera simplemente ser tu amante
y el hombre soñador con que suspiras.

Quisiera ser la vela vacilante
y el soplo que la apague sin mentiras.

Quisiera ser la lluvia, chispeante,
que colme la pasión con que deliras.

Rafael Sánchez Ortega ©
01/11/12