No me digas adiós,
dime hasta luego,
porque ansío tu vuelta
desde muy lejos.
Esa vuelta y tu risa
de amor sincero,
escapar de los labios
con aire nuevo.
Una brisa distinta
y un aire fresco,
el candor presuroso
de dos luceros.
Esos ojos que brillan
y tanto anhelo,
y las tiernas pestañas
que rozo y veo.
Porque son tus pupilas
como dos besos,
dos caricias sublimes
de lava y fuego.
Dos eternas canciones
que dan sosiego,
y estimulan las almas
del niño hambriento.
Porque son fantasía,
lugar de ensueño,
y rincón de los dioses
y tanto ciego.
Es el hombre nervioso,
el niño inquieto,
corazón embrujado
cristal de hielo.
No me digas adiós
Amor, que vuelvo,
a buscar tus caricias,
tu beso fresco.
Es la bella esperanza
de amor eterno,
y ese suave murmullo
que tanto pienso.
Porque quiero tus manos
aquí, en mi pecho,
con el roce sublime
que dan tus dedos.
Esos dedos de plata,
nerviosos ellos,
con caricias sin nombre
que yo deseo.
"...No me digas adiós,
ni marches lejos,
pues te quiero a mi lado
Amor, sin miedo..."
Rafael Sánchez Ortega ©
10/07/14
dime hasta luego,
porque ansío tu vuelta
desde muy lejos.
Esa vuelta y tu risa
de amor sincero,
escapar de los labios
con aire nuevo.
Una brisa distinta
y un aire fresco,
el candor presuroso
de dos luceros.
Esos ojos que brillan
y tanto anhelo,
y las tiernas pestañas
que rozo y veo.
Porque son tus pupilas
como dos besos,
dos caricias sublimes
de lava y fuego.
Dos eternas canciones
que dan sosiego,
y estimulan las almas
del niño hambriento.
Porque son fantasía,
lugar de ensueño,
y rincón de los dioses
y tanto ciego.
Es el hombre nervioso,
el niño inquieto,
corazón embrujado
cristal de hielo.
No me digas adiós
Amor, que vuelvo,
a buscar tus caricias,
tu beso fresco.
Es la bella esperanza
de amor eterno,
y ese suave murmullo
que tanto pienso.
Porque quiero tus manos
aquí, en mi pecho,
con el roce sublime
que dan tus dedos.
Esos dedos de plata,
nerviosos ellos,
con caricias sin nombre
que yo deseo.
"...No me digas adiós,
ni marches lejos,
pues te quiero a mi lado
Amor, sin miedo..."
Rafael Sánchez Ortega ©
10/07/14
pues eso , que no te digan Adiós, aunque decir Adiós es dejar en manos de Dios el destino
ResponderEliminarabrazos
Sí, Ely, es una expresión y también hay que ser creyente, aunque todos, en mayor o menor medida lo seamos a nuestra manera.
EliminarAbrazos.
Seguro que si te lee, no te dirá adiós :)
ResponderEliminarBella...
Muchos besos
"Sin palabras " Sakkarah.
EliminarUn beso.
que dulce está uufff claro que no nunca digamos Adios uuuff que bonito seguro te lle y llenas el alma de suspiras y te estará diciendo por una rendija hoooolaaaaa jejejejeje, precioso!!!! está un abrazo grande desde mi brillo dlemar
ResponderEliminarSerá difícil Bea, ya que la línea que separa la realidad de la utopía es muy delgada y puede confundirse.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Desde el pueblo...no te digo adios te digo hasta mañana
ResponderEliminarfeliz domingo
un abrazo
Marina
Entonces hasta mañana y que pases un lindo domingo Marina.
EliminarUn abrazo.
Una bonita poesía descriptiva, llena de encanto y esperanza.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias por verla así Jorge.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Los adioses no tienen porqué ser definitivos. Esperanza. Que este no lo sea.
ResponderEliminarAbrazos
¡Ojalá TriniReina...!
EliminarAbrazos.
Seguramente desde ese lugar donde la has ubicado (una línea delgada que separa la realidad de la utopía) ella jamás te dirá adiós.
ResponderEliminarCariños…
Seguramente sea como dices Oriana.
EliminarUn abrazo.
Muy oportuno, Rafa; venía a decirte "hasta luego" porque, aunque mañana muy temprano salgo de viaje, seguiré pasando a leerte de vez en cuando.Donde voy no tengo acceso a Internet y dependo de otras personas de las que no quiero abusar.
ResponderEliminarEl adiós definitivo no debería existir. Mejor decir "hasta otro día, hasta luego", o cosas así que dejan la puerta abierta.
Buenas vacaciones.
Un abrazo.
En este caso sí Fanny, mejor decir "hasta cuando quieras y puedas", ya que es lógico salir de vacaciones y tomar esos días para relajarse y lograr el equilibrio.
EliminarUn abrazo y el deseo de que lo pases bien.
Una bonita inspiración, que despeja todo tipo de dudas y temores. Así debe ser el amor, sin miedo...
ResponderEliminarUn abrazo de domingo amigo. Besos!!
Efectivamente Paty, así debería de ser.
EliminarUn abrazo en la noche querida amiga.
Hermosa en su melancolía esta súplica ante el adiós.
ResponderEliminarBesos
Gracias Carmen.
EliminarBesos.
Todo depende de la actitud...Se puede decir "adiós" de muchas formas...Y es mejor no decir "adiós para siempre" porque suele ser una carga molesta para quien lo dice...Es mejor decir hasta luego o hasta que Dios quieera...Mi gratitud y mi abrazo siempre, Rafael.
ResponderEliminarM.Jesús
Sí, M. Jesús es mejor decir ese "hasta luego" que indicas.
EliminarUn abrazo en la noche.
Un adiós es rotundo,nos sabe a ausencia casi absoluta,no,no debemos decir adiós al menos que sea absolutamente necesario....
ResponderEliminarPienso como tú América.
EliminarUn abrazo.