Ahora que llega el otoño
y nos habla sin palabras,
con sus tonos de colores
y sus tardes sonrojadas...
Siento que el cielo se abre
y que suenan mil campanas,
que la noche se hace día
y que saludan las ramas.
Las pequeñas mariposas
con sus alas encantadas,
ya van cubriendo los suelos
desde el ocaso hasta el alba.
Porque la luz se pronuncia
en tono azul y escarlata,
con mil ribetes dorados
que ya presagian la escarcha.
Llega en la noche el rocío,
vuelve el temblor a las almas,
y hasta las flores de octubre
tienen su página blanca.
Para que en ella tu escribas
esa sutil añoranza,
todas las frases que piensas
al ver la imagen sagrada.
Porque el otoño es sagrado,
tiene también esa magia,
ese precioso embeleso
con mil suspiros que embriagan.
Y nos arropa en sus brazos
y nos susurra una nana,
mientras afuera los vientos
silban con voz muy extraña.
Ahora que llega el otoño
siento su voz que me habla,
y que me dice que siga,
que no me pare ante nada.
Porque la vida del hombre
es retornar a la infancia,
es primavera y verano
y es apurar el mañana.
Para que nunca se acabe
este presente que marcha,
esta emoción tan sublime
de la fontana sagrada.
...Quiero embriagarme en su néctar,
quiero beber de su agua,
quiero sentir el otoño
con sus claveles de plata.
Para a su lado dormirme,
y traducir sus palabras,
mientras la luna se esconde
y entre las nubes me abraza.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/09/14
y nos habla sin palabras,
con sus tonos de colores
y sus tardes sonrojadas...
Siento que el cielo se abre
y que suenan mil campanas,
que la noche se hace día
y que saludan las ramas.
Las pequeñas mariposas
con sus alas encantadas,
ya van cubriendo los suelos
desde el ocaso hasta el alba.
Porque la luz se pronuncia
en tono azul y escarlata,
con mil ribetes dorados
que ya presagian la escarcha.
Llega en la noche el rocío,
vuelve el temblor a las almas,
y hasta las flores de octubre
tienen su página blanca.
Para que en ella tu escribas
esa sutil añoranza,
todas las frases que piensas
al ver la imagen sagrada.
Porque el otoño es sagrado,
tiene también esa magia,
ese precioso embeleso
con mil suspiros que embriagan.
Y nos arropa en sus brazos
y nos susurra una nana,
mientras afuera los vientos
silban con voz muy extraña.
Ahora que llega el otoño
siento su voz que me habla,
y que me dice que siga,
que no me pare ante nada.
Porque la vida del hombre
es retornar a la infancia,
es primavera y verano
y es apurar el mañana.
Para que nunca se acabe
este presente que marcha,
esta emoción tan sublime
de la fontana sagrada.
...Quiero embriagarme en su néctar,
quiero beber de su agua,
quiero sentir el otoño
con sus claveles de plata.
Para a su lado dormirme,
y traducir sus palabras,
mientras la luna se esconde
y entre las nubes me abraza.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/09/14
El otoño es tiempo de melancolía, de cambio…
ResponderEliminarTiene magia en tus letras.
Pronto llegarán los fríos…
Puede ser un buen momento para volver a escribir la vida. Sus letras para ti son hermosas.
Escuchar esa voz que anima no tiene precio..
Dejar salir el niño que llevamos dentro, pero sin perder este presente que puede ser interesante.
Siente el otoño como tú deseas y sé muy feliz.
Me ha gustado mucho, mil besos.
Gracias por tus palabras Sakkarah
EliminarUn beso.
Rafael tus versos son preciosos...gracias por tu visita a mi ultima publicación la que acabo de retirar y publicar ota mia de archivo...
ResponderEliminarfeliz dia amigo.
un abrazo
Marina
Me alegra de que así veas mis versos Marina. Ya pasaré por tu Blog.
EliminarUn abrazo.
Bellísimo homenaje ala otoño, Rafael.
ResponderEliminarA mi me fascina.
Te deseo muchos poemas este otoño.
Abrazos
Gracias Verónica.
EliminarAbrazos.
La luz del día se abre para ti en la emoción de tu sentir.
ResponderEliminarUn beso.
Es la luz del otoño María.
EliminarUn beso.
una loa al otoño
ResponderEliminartoda la magia decanta entre sus ocres y naranjos
será porque es la estación más lírica
por su belleza y significado
abrazos y buena jornada Rafael
Sí, Ely, aunque todas las otras estaciones también tienen su magia.
EliminarUn abrazo y feliz martes.
que hermosos Otoño nos traen tus ojos a nuestra miradas, como no sentir cada hojarasca en tan perfecta descripcion hecha por el alma.
ResponderEliminarme quedo con esta sensacion de otoño en mi tropico de selvas
Besos
Gia
Gracias por verlo y aprciarlo de esa manera Gia.
EliminarBesos.
Amigo mio ...aqui todas las palabras son hermosa y llenas siempre de amor y esperanza a la vida .
ResponderEliminargracias por tu nueva entrada a mi casa ...tuya
un gran abrazo
Marina
Homenajeando al otoño que tambien se lo merece.
ResponderEliminarHermoso poema, cada estación tiene su hechizo.
Un abrazo Rafael.
Cierto Carmen, pienso lo mismo.
EliminarUn abrazo.
El otoño es para mí la estación con mas encanto junto con la primavera. Contiene los colores tierra y dorado, castaños exóticos, me encanta!
ResponderEliminarTambiés es una estación melancólica, de más recogimiento por las lluvias en mi tierra, Galicia, mas que nada, porque las temperaturas son muy agradables en esta época del año.
Estos versos están repletos de otoño, serenidad, melancolía y encanto.
Te felicito
Rosa
Tu tierra Galicia y la mía Cantabria tienen todo ese encanto que dices tanto en otoño como en primavera Rosa B.G
EliminarUn abrazo.
Querido Rafael, me encanta la fuerza de la cuarta estrofa! "Porque la luz se pronuncia
ResponderEliminaren tono azul y escarlata..."
El Otoño sin duda alguna es absolutamente inspirador para las almas de los poetas sensibles, como tú...
Abrazos grandes, y felicitaciones, querido amigo.
Me alegra de que te llegue el contenido de estos versos querida amiga.
EliminarUn abrazo en la noche Maritza.
El otoño es serenidad, calma, añoranza y claro es inspirador hermoso uuffff y ese azul , esa luz y tú Poeta y tú escribiendo lindo como siempre , un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias una vez más Bea.
EliminarUn abrazo.
El otoño se va posando en tus letras, Rafael. Tus versos caen con un encanto y una serenidad genuina, que nos va poblando el alma de dorados y rojizos sentimientos...Muy bello, amigo. Mi abrazo y mi cariño, Rafael.
ResponderEliminarM.Jesús
Gracias por tus palabras M.Jesús.
EliminarUn abrazo.