Un día perseguí la poesía
tratando de entender de qué trataban
los versos y las letras que rimaban,
mezclando la ilusión y la utopía.
No supe comprender esa alegría,
que oculta, entre la tinta, murmuraban
los ojos que, nerviosos, te buscaban
y un tierno corazón en su porfía.
Hoy sigo persiguiendo lo imposible;
el verso sigue siendo codiciado,
y aprecio hasta el poema impredecible.
Es cierto que el buen vino es añorado,
incluso al paladar más insensible,
por eso corazón serás amado.
Rafael Sánchez Ortega ©
06/10/17
Quien persigue la poesía encuentra corazones de tinta, rimas que abrazan... sí, puede ser utópico pero, amigo Rafael, en justas dosis... es reconstituyente.
ResponderEliminarMil besitos en la tarde.
Buenas noches , creo que a veces no hace falta entender un poema para que te haga sentir al igual que el vino hace falta saber de que cosecha es , tan solo al saborearlo en nuestro paladar él es quien no dirá sinos gusta o no ..no el año que fue cosechado.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día del Pilar.
Tienes razón Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
Y yo aún persigo mis sueños !! a veces decaigo uuff tú que buscas en ese corazón que murmura allí encuentra tu sueño hermoso soneto , un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tus palabras Bea.
EliminarUn abrazo.
Rafael gracias por tu visita ...y los versos ...versos son ...al final decimos lo mismo siempre al amor...es la vida .y escribir nos da ...eso , vida y letras que alimentan.
ResponderEliminarabrazos y feliz fin de semana.
abrazos
Sí, Marina, así es.
EliminarUn abrazo y feliz fin de semana también para ti.
Gracias Rafael por pública tan maravillosa poesía .ya me gustaria ami saber escribir
ResponderEliminarcon tan tanta delicadeza ..Un saludo.
Seguro que sabes hacerlo mejor, Amparo.
EliminarUn saludo.
Rafael que hermoso poema y muy dulce . Un abrazo amigo.
ResponderEliminarGracias Edith.
EliminarUn abrazo.
Perseguir lo imposible es muy humano, versos que enamoran. Gracias por tu excelsa poesía Rafael.
ResponderEliminarGracias por tus palabras, María del Rosario.
EliminarUn abrazo.