(Inspirado en unos versos
de Juan Ramón Jiménez:
"Estoy triste, y mis ojos no lloran..."
Estoy triste al no ver a tus letras
alegrar a mi alma en la tarde,
la mirada se pierde a lo lejos
para ver soledad en las calles.
Ya no buscan mis pasos perdidos
al gorrión que cantaba en el parque
y mis ojos se esfuerzan mirando
este mar tan azul y sin naves.
Ha llegado el invierno temido
y se cierran ventanas y hogares,
los suspiros se ocultan muy hondo
y los pechos le gritan al aire.
Al mirar a tu silla vacía
veo allí la silueta admirable,
la princesa de niños y sueños
con un halo de eternos saudades.
Volveré a cobijarme en el templo
mendigando limosnas y frases
que contengan la risa y el llanto
y que calmen la sed de mi sangre.
Es, quizás, una excusa sublime,
el cruzar los quebrados cristales,
enfrentarse al vacío que llega
y a la muerte de aspecto tan grave.
Pero quiero llorar en silencio,
y llorar como el niño que sabe
que ha perdido a la rosa bendita
y el poema de tacto tan suave.
"...¡Cuánta nota perdida en sus cuerdas
danzará por los cielos con hambre,
sin saber que hay un niño, que busca
a la estrella perdida de un ángel!..."
Rafael Sánchez Ortega ©
17/01/20
¡Qué bonita inspiración! Cómo me gusta leerte.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Yashira, me alegro de que mis versos te gusten.
EliminarBesos.
Qué bonito, Rafael.
ResponderEliminarHay personas que dejan tanto vacío cuando de van...
Un besoabrazo.
Cierto Eva, así es, por desgracia.
EliminarUn beso y un abrazo.
Aquí de nuevo agradeciendo tu cariñosa visita y siempre puedo así felicitar tus bellísimos versos unos mas tristes ,otros mas alegres pero siempre, hermosos al amor.
ResponderEliminarabrazos
Gracias por tus palabras siempre tan sinceras y cariñosas, Marina.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Tu final me ha recordado los versos de Bécquer, Cuánta nota dormía en sus notas...Del salón ne el ángulo oscuro. Un poema triste, sin desesperación, pero con tristeza incrustada.
ResponderEliminarBello poema, sin embargo. Un gusto leerte. Un abrazo
Sí, Albada Dos, no pude evitar recordar esos versos inmortales de Bécquer: ("del salón en el ángulo oscuro, de su dueño tal vez olvidada...") al acabar el poema, aunque la inspiración estaba buscada en Juan Ramón.
EliminarUn abrazo y gracias.
Precioso Poema inspirado en los versos de un gran poeta... Tú también lo eres, amigo Rafael.
ResponderEliminarMil besitos en la tarde.
Gracias Auroratris.
EliminarUn abrazo.
Hermosos y tristes versos llenos de ausencia.
ResponderEliminarMuy bueno, Rafael.
Gracias Galilea.
EliminarUn abrazo.
Preciosos versos, aun cuando la tristeza sean las notas perdidas de ese canto y su estrella perdida..
ResponderEliminarUn abrazo, feliz noche.
Gracias Campirela por tus letras.
EliminarUn abrazo y feliz noche.
Hermosa inspiración la tuya.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias María.
EliminarUn abrazo.
Te dejo un abrazo contra tristeza.
ResponderEliminarBuen domingo.
Gracias Laura.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Tristemente te he elido y disfrutado este gran poema en honor a Juan Ramón Jimenes, uno de mis favoritos.
ResponderEliminarFeliz domingo.
Un abrazo
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Hermoso poema recordando a Juan Ramón. La tristeza es un sentimiento necesario para expresar la nostalgia y el dolor que a veces nos produce la vida. Después, valoramos mucho más la alegría y los momentos felices.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo, Rafael.
Gracias María Jesús.
EliminarUn abrazo.
Leerte es el placer de encontrarte en tu poesía tan hermosa .
ResponderEliminarAbrazo
Gracias María del Rosario.
EliminarAbrazo.
Gracias por compartir tus bellos poemas. Saludos Rafael S.O. desde Argentina
ResponderEliminarGracias por tu visita y comentario, Catia.
EliminarUn abrazo desde España.