Es quizás una suerte, lo confieso,
recibir la caricia de la vida
y sentir ese roce apresurado
de la rosa y su beso en la mejilla.
Pero sé que la vida y la nostalgia
muchas veces se juntan y se miran,
y después de minutos de silencio
surge un llanto de forma repentina.
Yo no sé los designios del destino
ni si existen o no las maravillas
de otro mundo, mejor y más pequeño,
con su carga de amor y fantasía.
Pero estoy en el mundo en que he venido,
una tierra de arenas y de envidias,
un lugar con fronteras y deshielos
donde reina la paz en la utopía.
Es quizás, esa eterna interrogante,
la pregunta surgida y tan sencilla,
ese nudo formado en la garganta
y el susurro con lágrimas vertidas.
Sigo aquí, soñador impertinente,
en el tren que ha parado en estas vías;
un andén ya diviso en lontananza
y un vagón que me apresa y me confina.
Pero sigo mirando hacia adelante
a ese mar que me cubre y me salpica,
con sus olas que llegan y se alejan
y me mojan con besos y caricias.
Yo no sé lo que busco por la playa
entre luces de estrellas reunidas,
y si va o no va, entre mis manos,
esa mano que quiero entre las mías.
Es quizás, un monólogo de sordos,
un crisol apagado y sin cerillas,
un volcán con su lava intermitente
y un amor que precisa tu sonrisa.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/05/13
recibir la caricia de la vida
y sentir ese roce apresurado
de la rosa y su beso en la mejilla.
Pero sé que la vida y la nostalgia
muchas veces se juntan y se miran,
y después de minutos de silencio
surge un llanto de forma repentina.
Yo no sé los designios del destino
ni si existen o no las maravillas
de otro mundo, mejor y más pequeño,
con su carga de amor y fantasía.
Pero estoy en el mundo en que he venido,
una tierra de arenas y de envidias,
un lugar con fronteras y deshielos
donde reina la paz en la utopía.
Es quizás, esa eterna interrogante,
la pregunta surgida y tan sencilla,
ese nudo formado en la garganta
y el susurro con lágrimas vertidas.
Sigo aquí, soñador impertinente,
en el tren que ha parado en estas vías;
un andén ya diviso en lontananza
y un vagón que me apresa y me confina.
Pero sigo mirando hacia adelante
a ese mar que me cubre y me salpica,
con sus olas que llegan y se alejan
y me mojan con besos y caricias.
Yo no sé lo que busco por la playa
entre luces de estrellas reunidas,
y si va o no va, entre mis manos,
esa mano que quiero entre las mías.
Es quizás, un monólogo de sordos,
un crisol apagado y sin cerillas,
un volcán con su lava intermitente
y un amor que precisa tu sonrisa.
Rafael Sánchez Ortega ©
14/05/13
El tema de la playa es un tema recurrente en tus versos, imagino que vives cerca del mar y el te inspira tanta belleza en tus poemas.
ResponderEliminar¡Muy bello!
.
Es cierto María Rosa, vivo cerca del mar y nací casi a la orilla del mismo. Quizás es por ello esa recurrencia que me hace volver constantemente y sin darme cuenta.
EliminarUn abrazo y feliz martes.
Super bello este poema..!!!!! Me encanto el final...Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Idolidia, me alegra de que te gustara este poema.
EliminarUn abrazo en la noche.
Yo nací a orillas del Caribe, un mar alegre y turquesa, lleno de historias mágicas. Me encanta rozar tus versos Rafael.
ResponderEliminarUn abrazo
Bella zona la que citas y lugar paradisiaco, sin duda.
EliminarGracias por ver así mis versos Natalia.
Un abrazo y feliz día.
Quizás sea hora que ese monólogo de sordos aprenda a usar las palabras, no para caer en una conversación de mudos sino para poder expresar los sentimientos y dejar de estar anclado en una vía sin rumbo para que ese amor obtenga la sonrisa que tanto anhela.
ResponderEliminarMe encanto hoy tu poesía, has vuelto a acariciar mi alma!!
Cariños..
Quizás Oriana, quizás sea ya el momento...
EliminarUn abrazo en este martes.
Soñando. Empecinado en ese sueño que se estacionó en los andenes de la memoria y que ahí queda para el consuelo a veces o la herida.
ResponderEliminarUn abrazo
Cierto TriniReina y mientras el tiempo pasa ante nosotros, como espectadores temblorosos.
EliminarUn abrazo y feliz día.
nunca se sabe lo que se busca en las playas, ni entre esas gotas que salpican...
ResponderEliminarsigue adelante, soñando... viviendo...
llevandote por ese amor y esa sonrisa...
besitos Rafael
Pero a pesar de ese "no saber qué se busca", seguimos buscando, caminando y dejando tras de nosotros infinidad de sueños.
EliminarBesitos también para ti Cora.
Basta buscar, seguir.. que la búsqueda no acabe nunca.
ResponderEliminarEse debe ser el verdadero espíritu de la búsqueda, Diminuta, que la misma "no acabe nunca", como bien dices.
EliminarUn abrazo y feliz martes.
mala cosa son las envidias Rafael
ResponderEliminarmatan el alma y envenan
y lo peor que hasta la víctima se contagia
mejor otra cosa , y seguir pa´lante enfocado hacia lo propio
abrazos
Totalmente de acuerdo Elisa, no es buena para nada la envidia, como bien dices.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Siempre es bueno, seguir las incertezas que parecen ser mejores que las certezas que tenemos. Es la fe amigo, esa que nos impulsa a seguir y ser optimistas.
ResponderEliminarComo siempre, una creación profunda y bella.
Un beso.
Seguro que es como dices Paty.
EliminarUn beso en la tarde.
Amigo mío, me encanta.
ResponderEliminarLa suerte, a veces tan buscada y otras tantos encontrada por que la vida lo desea asi.
Aprovechemos cada dia esa caricia que nos ofrecen
Besos
Si, Anna, seguro que sí.
EliminarBesos en la tarde.
Tu poema me ha gustado mucho, es muy bonito.
ResponderEliminarComo siempre las sontisas, ¡que importantes son!
Un abrazo fuerte amigo desde mi Librillo.
Gracias Rosario, un abrazo también para ti desde Cantabria.
EliminarNadie sabe su futuro,nos enfrascamos en una busqueda sin fin dejando atras como dices sueños sin realizar,hay que vivir intensamente el presente y abrir nuestro corazón a lo que llega.Un bello poema como todos los que escribes amigo,me encanta que relaciones el mar,sera porque yo tambien lo amo.Besines Rafa
ResponderEliminarEl mar está muy unido a mis versos Shantal y es algo que no puedo evitar.
Eliminar"Besines" en la tarde querida amiga.
Estos versos son una sonrisa , gracias, besos.
ResponderEliminarMe alegro de que así sean Amapola.
EliminarBesos en la tarde.
Rafael,la vida palpita a tu alrededor y tu la sientes cercana,que te invita a seguir creando y recreando...Es una gozada leerte y renovar los sentimientos,que dán sentido a la vida...
ResponderEliminarUn beso y feliz día.
M.Jesús
Quizás es que la busco, como todos vosotros, y hasta ahora tengo suerte en encontrarla cada día M.Jesús y me deja llevarla a los versos.
EliminarUn beso y feliz día.