Recuerdo una vieja historia
que de niño me ofrecieron,
unos labios maternales
sonrientes y sinceros.
En un bosque variopinto
convivían unos ciervos,
paseando entre los robles
y las hayas del momento.
Eran nobles y tranquilos
y cruzaban los senderos
muy pendientes de los niños
que vivían cerca de ellos.
Ocurrió que una mañana
se acercaron unos cuervos,
que buscaban la carroña
de alimañas y de muertos.
Nuestros ciervos se asustaron
y corrieron como elfos
a buscar en la cabaña,
de los niños, su aposento.
Surgió el pánico, sin duda,
y extendió su garra el miedo,
hasta el ciervo bonancible
donde el blanco se hizo negro.
Una dama prodigiosa,
de los niños hada y reino,
a los cuervos espantaba
con garrote y palo tieso:
Dejad libres nuestros bosques
y a los ciervos como dueños,
ya que así lo han decidido
nuestros niños con su dedo.
Y soltando mil graznidos
se marcharon a otro entierro,
unos cuervos, malsonantes,
con vestido opaco y negro.
"...Recuerdo una vieja historia
escuchada en un invierno,
de unos labios bonancibles,
musitando junto al fuego..."
Rafael Sánchez Ortega ©
04/09/17
Las historias siempre reposa al abrigo del aparente olvido que no es tal. Están en nuestra piel desperezandose.
ResponderEliminarUn abrazo de luz ☆
Tienes razón Athenea.
EliminarUn abrazo de luz.
Eres afortunado por tener ese recuerdo,por saber plasmarlo.
ResponderEliminarBesos.
Todos tenemos alguno parecido Carmen, ¿verdad?
EliminarBesos.
Plasmar así los recuerdos es ir desnudando los fantasmas del ayer.
ResponderEliminarPrecioso.
Mil besitos en la noche, amigo Rafael.
Gracias Auroratris.
EliminarUn abrazo en la noche.
Onírico poema que nos lleva a lugares soñados.
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias Rafael.
EliminarUn abrazo.
Una bella historia transformada en poesía.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Que linda historia contada en versos!!
ResponderEliminarMe alegro de que te guste Carmen.
EliminarUn abrazo.
Muy tierno, un poema encantador.
ResponderEliminarAbrazos
Gracias por tus palabras Julia.
EliminarAbrazos.
En toda bella historia existe la amenaza, es como en la vida... los cuervos a veces están vestidos de terno y corbata. Ojalá siempre fuese fácil espantarlos.
ResponderEliminarUn abrazo querido amigo.
¡Ojalá, Paty...!
EliminarUn abrazo.
Siempre entre tus bellos versos.
ResponderEliminarun abrazo
Gracias Marina.
EliminarUn abrazo.
Me acordé de Peter Pan de esas historias que nos leían de peli encantadas una dulzura de poema precioso, un abrazote desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea.
EliminarUn abrazo desde el cantábrico.
Este poema me transporta a lugares... y demuestra que la historia es poesía.
ResponderEliminarUn placer leerte, me ha gustado, como siempre.
Besos Rafael.
Gracias sinceras Carmen.
EliminarBesos.
Una bonita historia con final feliz. Abrazos
ResponderEliminarGracias Alicia.
EliminarAbrazos.
Cual si fuese un cuento, Rafael.
ResponderEliminarUn abrazo y lindo martes para ti
Fina
Gracias por tus palabras Fina.
EliminarUn abrazo y feliz martes también para ti.
¡Qué bella historia, cuantos recuerdos hay encerrada en ella, gracias por traerla.
ResponderEliminarAbrazo
Gracias por verlos María del Rosario.
EliminarUn abrazo.
Hermosa historia, Rafael.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Pilar.
EliminarBesos.