Hoy lograste besarme,
mariposa amarilla,
al rozarme tus alas
y sentir tus caricias,
porque fueron tus labios,
con suspiro y sonrisa,
los causantes del beso
en la fría mejilla,
y venciendo rubores
que por dentro nacían,
proseguí tras tu vuelo
y tus alas benditas;
me llevaste hasta el campo,
a la verde campiña,
donde reina el silencio
mientras pasan los días...
Pero todo fue un sueño,
un desliz en la tinta,
una rosa sin nombre
que olvidó que moría,
y surgieron recuerdos
como lágrimas vivas,
y volvieron las olas
a cubrir las orillas,
y allí estabas, poeta,
con tu vista perdida,
más allá de los mares
y de oscuras neblinas,
y llegaba la lluvia
a tus lindas pupilas,
derramando unas letras
que quisiera hacer mías...
"...Hoy lograste besarme,
mariposa querida,
alterando mis sueños
con tus alas de niña..."
Rafael Sánchez Ortega ©
14/03/19
Qué bello pensar en esa mariposa, con beso y lluvias, detrás de la ventana de la vida
ResponderEliminarMuy bello poema. Un abrazo
Sí, Albada Dos, es bonito.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Mira que tienen hechizo las mariposas, como me gusta, que pena que sean tan vulnerables, yo las cogería y las besaría.
ResponderEliminarBello poema Rafael.
Un beso
Sí, Carmen, son muy frágiles.
EliminarUn abrazo.
Linda esa mariposa y bellas letras que describen a la perfección la imagen que hoy nos dejas .
ResponderEliminarUna feliz tarde .
Cómo estamos de besucones todos 🙂 bonito poema con mariposas
ResponderEliminarGracias Laura.
EliminarBesos.
uufffff entre recuerdos y nostalgias esa mariposa que vuela le da vida a mi lectura precioso me alegro de leerte, un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tus letras, Bea.
EliminarUn abrazo.
Siéntete orgulloso porque el beso de mariposa es muy dulce
ResponderEliminarBesucos
Gó
Sí, Gó, si que lo es.
EliminarUn abrazo en la noche y "besucos"