Yo quisiera volver a ser niño
y jugar y estudiar en la escuela,
para luego venir a la casa
donde el plato y comida me esperan.
Porque tengo aquel tiempo presente
y me abraza con fuerza su esencia,
hasta el punto de estar en las nubes
y soñar con cometas y estrellas.
Yo sé bien que los sueños son sueños,
utopías que rompen cadenas,
ilusiones que llenan las almas
y que buscan la paz entre ellas.
Es por eso que vuelvo al pasado,
a ese niño que juega en la arena,
al que forma castillos sin nombre
y que luego las olas se llevan.
Yo quisiera ser niño y ser hombre,
Peter Pan conquistando sirenas,
y también peregrino, sin patria,
con mochila, zurrón y sin tierra.
Pero soy el que soy con mis actos,
y el que rinde, al espejo, sus cuentas,
porque el niño y el hombre se juntan
desatando feroces galernas.
Es cuestión de equilibrio en las almas
y quizás de buscar la paciencia,
la que tienen los hombres ancianos
y los niños ocultan con pena.
Más la vida se agita y reluce
cual crisol que renace con fuerza,
mariposa que vuela y es libre,
en el alma del hombre y poeta.
"...Yo quisiera ser niño, repito,
y mirar tus pupilas traviesas,
aspirando el perfume sagrado
de ese cuerpo de diosa perfecta..."
Rafael Sánchez Ortega ©
20/04/16
y jugar y estudiar en la escuela,
para luego venir a la casa
donde el plato y comida me esperan.
Porque tengo aquel tiempo presente
y me abraza con fuerza su esencia,
hasta el punto de estar en las nubes
y soñar con cometas y estrellas.
Yo sé bien que los sueños son sueños,
utopías que rompen cadenas,
ilusiones que llenan las almas
y que buscan la paz entre ellas.
Es por eso que vuelvo al pasado,
a ese niño que juega en la arena,
al que forma castillos sin nombre
y que luego las olas se llevan.
Yo quisiera ser niño y ser hombre,
Peter Pan conquistando sirenas,
y también peregrino, sin patria,
con mochila, zurrón y sin tierra.
Pero soy el que soy con mis actos,
y el que rinde, al espejo, sus cuentas,
porque el niño y el hombre se juntan
desatando feroces galernas.
Es cuestión de equilibrio en las almas
y quizás de buscar la paciencia,
la que tienen los hombres ancianos
y los niños ocultan con pena.
Más la vida se agita y reluce
cual crisol que renace con fuerza,
mariposa que vuela y es libre,
en el alma del hombre y poeta.
"...Yo quisiera ser niño, repito,
y mirar tus pupilas traviesas,
aspirando el perfume sagrado
de ese cuerpo de diosa perfecta..."
Rafael Sánchez Ortega ©
20/04/16
me anoto con esta proposición bien expresada Rafael!
ResponderEliminarGracias Lao Paunero.
EliminarUn saludo.
Que lindo sería volver a la infancia, pero solo es el sueño de un poeta.
ResponderEliminarUn abrazo.
mariarosa
Pienso que todos, alguna vez, hemos soñado lo mismo, María Rosa.
EliminarQue forma tan precisa y hermosa tienen tus versos para definir esa parte de nosotros que a veces queremos regrese, por eso de vez en cuando dejo que la niña que habita en mi cante y sonría, cuando eso pasa los sueños se hacen ligeros como el vuelo de campanilla.
ResponderEliminarPrecioso y a todos nos toca de una forma u otra.
Abrazos, Rafael
Me alegro de que todo eso te ocurra, Entre palmeras.
EliminarUn abrazo y gracias por tus palabras.
Todos llevamos un niño dentro,unos más que otros...
ResponderEliminarBesos.
Seguro que sí, Carmen.
EliminarBesos.
Buenos días Rafael...sería hermoso volver a ser niños...además con la experiencia que hoy tenemos de la vida...
ResponderEliminarGracias por tus atenciones ...
Un gran abrazo ...
Marina
Cierto, Marina, sería algo maravilloso.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Todos deseamos y levamos ese niño que nos hace amar la inocencia de la persona amada.
ResponderEliminarUn abarzo.
Así es Efe.
EliminarUn abrazo.
despojados de lastres y plenos
ResponderEliminarquien no desea sacar a ese niño que tantas veces tenemos que guardar en el bolsillo del alma
un abrazo
Cierto María, creo que todos queremos sacar a ese niño.
EliminarUn abrazo.
No te preocupes por el niño que fuiste, Rafa, siempre lo llevarás dentro de ti.
ResponderEliminarSolo tienes que dejarlo fluir.
Al menos lo intentaremos, Tecla.
EliminarUn abrazo en la tarde.
uff queridoamigo y a quein no le gustaría volver,pero también somos aquellos que rendimos cuentas y se ve reflejado en ese espejo , pero todos los días nace un día lindo lo intentamos vivir con alegría y entonces sales niño que todos llevamos , precioso, un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tus palabras y reflexión, Bea.
EliminarUn abrazo.
Todos seguimos llevando ese niño en nuestro interior, jamás podrá irse del todo.
ResponderEliminarUn beso.
Y que nunca falte, María.
EliminarUn beso.
Bendita inspiración la tuya!
ResponderEliminarNada como volver a la niñez y retozar el presente con el espíritu de entonces.
Sería genial obviar la dichosa madurez y sus eternas responsabilidades.
Abrazos.
Sí, Marinel, sería un maravilloso sueño.
EliminarUn abrazo y feliz día.