Has vuelto, compañera de mis sueños,
volviste con la cara arrebolada,
traías en los labios la sonrisa
que habías conseguido con el alba.
Entonces me ofreciste tu silencio,
y yo lo recogí con una lágrima,
la perla que unos ojos de sirena
dejaron dulcemente por la playa.
Recuerdo tantos ratos del pasado
jugando por la arena tan dorada,
entonces susurraban nuestros nombres
los barcos que cruzaban la bocana.
Creíamos tener el universo
cosido en un pañuelo junto al agua,
pero algo se interpuso en el camino
del sueño y el sendero de la infancia.
Estábamos repletos de ilusiones,
de versos y de letras, "sin palabras",
eterna melodía de aquel tiempo
tan bello y fastuoso con su calma.
Jugábamos en parques y jardines,
en bosques correteando con las hadas,
subíamos colinas imposibles
a ver a las montañas con su falda.
Nos daba una emoción esa blancura,
de nieve transformando con su magia,
el traje inaccesible de las cimas
cubierto con un néctar de hojalata.
No sé como ocurrió, pero te fuiste,
volaste en una tarde hacia la nada,
dejándote los sueños y los juegos
anclados y guardados en un arca.
"...Has vuelto, Cenicienta de mis sueños,
la musa que animaba mis andanzas,
el faro que alumbraba los claveles
del verso y el candor que te extrañaba..."
Rafael Sánchez Ortega ©
05/12/16
volviste con la cara arrebolada,
traías en los labios la sonrisa
que habías conseguido con el alba.
Entonces me ofreciste tu silencio,
y yo lo recogí con una lágrima,
la perla que unos ojos de sirena
dejaron dulcemente por la playa.
Recuerdo tantos ratos del pasado
jugando por la arena tan dorada,
entonces susurraban nuestros nombres
los barcos que cruzaban la bocana.
Creíamos tener el universo
cosido en un pañuelo junto al agua,
pero algo se interpuso en el camino
del sueño y el sendero de la infancia.
Estábamos repletos de ilusiones,
de versos y de letras, "sin palabras",
eterna melodía de aquel tiempo
tan bello y fastuoso con su calma.
Jugábamos en parques y jardines,
en bosques correteando con las hadas,
subíamos colinas imposibles
a ver a las montañas con su falda.
Nos daba una emoción esa blancura,
de nieve transformando con su magia,
el traje inaccesible de las cimas
cubierto con un néctar de hojalata.
No sé como ocurrió, pero te fuiste,
volaste en una tarde hacia la nada,
dejándote los sueños y los juegos
anclados y guardados en un arca.
"...Has vuelto, Cenicienta de mis sueños,
la musa que animaba mis andanzas,
el faro que alumbraba los claveles
del verso y el candor que te extrañaba..."
Rafael Sánchez Ortega ©
05/12/16
Bien por esa musa inspiradora llegada desde la nostalgia.
ResponderEliminarBesos y buen día.
La musa está en la propia vida, Carmen.
EliminarBesos y feliz día querida amiga.
Cuando alguien vuelve es porque lo que antes existió dejó una semilla en su alma. Si esa flor crece, así la distancia y el tiempo sean extensos, el sentimiento la lleva a donde pertenece.
ResponderEliminarBuen día amigo. Besos.
Perfecto anlísis de una situación concreta Paty.
EliminarUn abrazo.
Que siempre tan bonitos tus versos con esa esencia candorosa y ese amor sobrevolando, hasta incluso las briznas de tristeza que también conllevan.
ResponderEliminarBesos poeta.
Gracias por verlos así Marinel.
EliminarUn abrazo.
ResponderEliminarBelleza de letras que se esparcen al viento, de playas, jardines, que se inclinan frente al mar, junto a la falda de montañas rebosantes de blancura, fresco, realmente me ha encantado conocer tu blog, gracias.
Abrazo
Me alegro de que te gustara mi Blog, María del Rosario, ya sabes que puedes volver cuando gustes.
EliminarUn abrazo.
La Navidad se acerca y con ella la presencia de nuestros seres más queridos.
ResponderEliminarHermoso poema, Rafael.
Ya tenemos la Navidad a la vuelta de la esquina Tecla, es cierto.
EliminarUn abrazo.
Hermoso poema, Rafael...El amor siempre vuelve con sus mil caras, llenándonos de fuerza e ilusión para seguir adelante.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo siempre, poeta.
M.Jesús
Gracias por tus palabras María Jesús.
EliminarUn abrazo.
El verdadero amor siempre regresa a su nido.
ResponderEliminarAbrazos.
Así es Rafael.
EliminarAbrazos.
Si es verdadero siempre regresará precioso Rafael un abrazote desde mi brillo del mar
ResponderEliminarSeguro que sí, Bea.
EliminarUn abrazo.