Se viste la noche
con piel de canela
abrigo de armiño
pañuelo de seda,
se estira en el cielo,
las sombras se acercan,
nos deja suspiros
su boca tan negra,
y en medio de todo
se escucha la guerra,
aviones que pasan,
sinuosas trincheras,
y allá, en una loma,
está un centinela
con miedo en el cuerpo
mirando hacia afuera...
Ya asoma su cara
la luna tan bella
y a ella se suman
preciosas luciérnagas,
cometas que vienen
de lindas estrellas,
cual faros que surcan
buscando traineras,
y arriba la luna
se viste de fiesta,
en aguas tranquilas
y albores que tiemblan,
dispara el soldado,
desgarra una pierna,
se duermen las almas
y un cuerpo se entierra...
"...Se viste la noche
que ahora comienza
y abajo en el mundo
la tierra está enferma..."
Rafael Sánchez Ortega ©
29/08/18
Hoy tu poema lleva música en las letras pues cuando lo lees va solito dando saltos con bellas palabras ..me encanto ese ritmo que le has puesto.
ResponderEliminarUna feliz noche y feliz semana .
Es por la rima, Campirela.
EliminarUn abrazo en la noche.
Es verdad...arriba tanta magia y abajo nos lo cargamos todo.
ResponderEliminarO casi todo.
Besos.
Así es la vida, por suerte y desgracia, Carmen.
EliminarBesos.
No hay guerra que encienda poética alguna, pero la imagen que proyectas, de la noche en calma, de ese cielo bello, sobre la figura de un soldado me ha parecido preciosa
ResponderEliminarQué necios los hombres, dirán las estrellas. Un abrazo
¡Qué necios los hombres, dirán las estrellas, que queman sus vidas,
Eliminarsin ver el Poema...!
Un abrazo y gracias Albada Dos.
Miramos hacia arriba y nos damos cuenta tras la puerta estelar, de la grandeza que esconde su misterio; sin embargo, no queremos cuidar ni convivir en este planeta, sabiendo que somos parte del Universo y que sin él, nuestra existencia es efímera.
ResponderEliminarUna denuncia social bien expresada en un tradicional romancillo exasílabo, el mismo de siempre, con su hermosa cadencia y musicalidad.
Un abrazo Rafael.
Gracias por ver todo eso que dices en tu comentario Juan.
EliminarUn abrazo en la tarde.
La tierra esta enferma y no sabemos curarla, nuestras acciones no alcanzan para parar su efervescencia.
ResponderEliminarAbrazo
Cierto, María del Rosario.
EliminarUn abrazo.
La constancia y fidelidad del universo, frente a la infidelidad y maldad del ser humano...Precioso poema, Rafael. Debemos mirar más a menudo al cielo y sentir lo que nos dice cada noche y cada día...
ResponderEliminarMi abrazo y feliz jueves.
Gracias por tus palabras.
EliminarUn abrazo.