Volveré tras mis pasos
a intentar encontrarte,
aunque tenga perdido
el placer de ese viaje,
porque tú eres primero
esa rosa salvaje,
y la fruta añorada
de mis labios y carne,
y aunque no te lo diga
eres alma con sangre,
el latido incipiente
de mi pecho vibrante,
y por mucho que insistan
siempre iría a buscarte,
a tomarte en mis brazos
y a saciarte del hambre...
Volveré por el día
a llevarte en mi nave
a ese puerto distinto
más allá de los mares,
y quizás soñaremos
con aldeas y calles
y con bailes y fiestas
sin vestidos ni guantes,
porque en playas doradas
bailaremos sin margen
al compás de las olas
y resacas en lance,
cuando llegue la noche
buscaremos las artes
que en la punta del faro
con su manto nos tapen...
"...Volveré, no lo dudes,
para darte la clave,
la que tú me pediste
una tarde imborrable..."
Rafael Sánchez Ortega ©
23/05/19
Y cuando llegue la noche los sueños serán playa y arena.
ResponderEliminarUn beso y feliz noche.
Gracias María.
EliminarUn beso y feliz domingo.
Umm, qué delicioso poema de ayeres. Precioso recorrido al pasado
ResponderEliminarUn abrazo y feliz domingo
Gracias Albada Dos.
EliminarUn abrazo y feliz domingo también para ti.
Qué bonito canto,el poeta volverá,sí...
ResponderEliminarGracias Carmen.
EliminarBesos.