En el jardín de los sueños
hacen guardia golondrinas,
que revuelan en las tardes
con sus notas de alegría.
Ellas vuelan y se acercan,
por los prados y campiñas,
y hasta llegan a la iglesia
a la hora de la misa.
Llevan gracia y con su encanto
nos renuevan energías,
consiguiendo que volemos
tras sus alas y la brisa.
Yo recuerdo muchas tardes
de la infancia, en compañía
de estas aves juguetonas
que lograban mi sonrisa.
Era el turno de la escuela,
la lección bien aprendida,
y aquel verso de Machado
junto al Bécquer de la rima.
Hay un halo de nostalgia
cuando vuelvo atrás la vista,
pero veo que el presente
es la esencia perseguida.
Porque fueron esos tiempos,
donde el fruto y la semilla,
de unos versos temblorosos
conquistaron mis pupilas.
Y es allí donde comienza
la incipiente poesía,
la que intentan estos dedos
cada día en la cuartilla.
"...Una clase en una escuela,
una tierna margarita,
y dos labios temblorosos
que a un poema le dan vida..."
Rafael Sánchez Ortega ©
14/07/16
hacen guardia golondrinas,
que revuelan en las tardes
con sus notas de alegría.
Ellas vuelan y se acercan,
por los prados y campiñas,
y hasta llegan a la iglesia
a la hora de la misa.
Llevan gracia y con su encanto
nos renuevan energías,
consiguiendo que volemos
tras sus alas y la brisa.
Yo recuerdo muchas tardes
de la infancia, en compañía
de estas aves juguetonas
que lograban mi sonrisa.
Era el turno de la escuela,
la lección bien aprendida,
y aquel verso de Machado
junto al Bécquer de la rima.
Hay un halo de nostalgia
cuando vuelvo atrás la vista,
pero veo que el presente
es la esencia perseguida.
Porque fueron esos tiempos,
donde el fruto y la semilla,
de unos versos temblorosos
conquistaron mis pupilas.
Y es allí donde comienza
la incipiente poesía,
la que intentan estos dedos
cada día en la cuartilla.
"...Una clase en una escuela,
una tierna margarita,
y dos labios temblorosos
que a un poema le dan vida..."
Rafael Sánchez Ortega ©
14/07/16
que lindo cuando uno llevas recuerdos dulces de infancia sin embargo persigues tu presente como meta con alegría precioso poema mi querido amigo dulces sueños un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tu comentario Bea y sí, los recuerdos, cuando son "dulces", siempre son agradables.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Preciosos tus versos de hoy que me recuerdan mi vida de adolescente cuando las monjas me hacían leer y recitar preciosos versos que jamás se olvidan.
ResponderEliminarUn gran abrazo Rafael.
Marina
Entonces vivimos una vida adolescente paracida, en la educación, ya que a nosotros eran los "curas" los que nos hacían leer y recitar esos versos.
EliminarUn abrazo y feliz día Marina.
Hola Rafael, preciosos versos, los recuerdos de la infancia son buenos aliados. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Gema, pienso como tú.
EliminarUn abrazo.
Me encanta este blog, ojalá pueda intercambiar con todos, pues administro tres blog literarios, dos en español y otro en inglés. saludos de antemano.
ResponderEliminarGracias por tu visita y comentario Pedro.
EliminarUn saludo.
Si, Rafael...Las golondrinas siempre estarán presentes en nuestra vida, como mensajeras de la primavera y como recuerdo y nostalgia de nuestra infancia...Grandes poetas las tuvieron en cuenta y las inmortalizaron en sus versos.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo por tu buen hacer.
M.Jesús
Por suerte así ha sido, María Jesús.
EliminarUn abrazo y gracias por tus palabras.