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miércoles, 1 de marzo de 2017
DE SIEMPRE ME GUSTÓ LA SOLEDAD...
De siempre me gustó la soledad
y fue mi amiga.
Formamos una larga comunión
en forma de paseos y silencios,
de sitios visitados, y en otros,
de atalayas de la vida.
Recuerdo los lugares recorridos
que eran como un brazo de los sueños.
Quizás eran los sitios ideales
para vivir aquello que escapaba
de los libros a mis ojos.
Solía subir a la iglesia
o ir al malecón de la barra,
en la entrada del puerto,
y allí me pasaba largos ratos mirando, pensando
soñando...
Conservo algún poema de aquellos tiempos
surgido en esos sitios y creado por mis dedos.
Desde la entrada de la iglesia hay una balconada
con una marisma enorme;
sobre ésta se ve una colina con algo de bosque
y al fondo todo el macizo de los Picos de Europa.
En la barra está el mar con su horizonte
infinito y verdeazulado y esas olas
con su cadencia infinita que van llegando
hasta nosotros.
Estar allí y ver el final de la tarde,
contemplar al sol como se ocultaba tras las cimas
y luego imaginar mil fantasías con ese cielo rojizo
que dejaba entre las nubes.
Por otro lado, en la otra punta del pueblo,
comulgar con las olas y verlas romper en la escollera,
sentir sus latidos, sus gritos, su rabia
y también oler y empaparte del salitre
para luego volver, febril hacia casa,
con el alma nueva y renovada.
Fue una etapa, aquella, muy bonita para mi,
aunque puede que visto, desde hoy,
sea una tontería.
Sin embargo alguien me dice que no,
que no son tonterías,
que es "el contacto humano con el mundo
y que la tontería sería pasar de puntillas"
y no verlo, ni detenerse a mirarlo.
Yo no lo sé,
ni sé el tiempo se detuvo algún instante,
pero sigo sintiendo el corazón enloquecido
cuando pienso en aquel niño, luego joven,
y en aquella comunión sagrada,
con la soledad y el silencio,
que trajo a mi corazón el amor
con la esencia de la vida
y la poesía.
Rafael Sánchez Ortega ©
28/02/17
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Que bonito final el recorrido de toda una vida siempre lleno de amor por las poesias, lo soledad es necesaria pero a veces duele, precioso poema un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tu comentario Bea.
EliminarUn abrazo.
Olé, pues imposible pasar de puntillas por algo que dice tantas cosas, cada día que pasa aprecio más el tiempo que dedico a ver una puesta de sol o una ola romper o un paseo por la naturaleza. Gracias.
ResponderEliminarEs que ese tiempo es el que realmente importa Xan Do Río.
EliminarUn abrazo.
La soledad, el silencio y la naturaleza con su cielo, sus paisajes y su mar nos llenan el alma y nos renuevan, Rafael...Todo aquello, que viviste y sigues viviendo es la chispa y la inspiración, que te permite seguir adelante con ilusión y capacidad de asombro...El espíritu te lo agradece, porque no envejece y sigue vivo y alerta...
ResponderEliminarMi felicitación por tu grandeza espiritual, que vas dejándola en tus versos, amigo.
Mi abrazo y mi cariño.
Gracias por tus palabras, siempre tan sabias y llenas de razón, María Jesús.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Para nada es una tontería sentir...comulgar con la naturaleza, con los lugares y hasta con sus gentes, con el entorno, sin dejar que las palabras y el bullicio entorpezcan esos momentos, es algo maravilloso y de un valor incalculable que hay que saber valorar como tú lo haces.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias sinceras Marinel
EliminarUn abrazo más.
La soledad a veces es necesaria, ayuda a calmar la ansiedad y a encontrarse con uno mismo.
ResponderEliminarHermoso poema.
Besos
Cierto Luján, así la veo yo.
EliminarBesos en la noche.
Wow, unos versos llenos de verdad, de pasión, de nostalgia tal vez, de un querer volver. Pero no es necesario volver, se puede hacer otra vez, todas las veces que queramos. Creo mucho en la espiritualidad a través de la emoción con la naturaleza, creo que en cada suceso precioso, está la presencia y voz de Dios. Él siempre nos tiene un mensaje directo al corazón y aunque soy católica, a mí me llega más al alma, ese mensaje a través de los altares naturales.
ResponderEliminarMuchos significados... te felicito amigo.
Es que en la naturaleza se puede encontrar más cerca toda esa espiritualidad de que hablas Paty.
EliminarUn abrazo y feliz semana querida amiga.