Estrellas que vais pasando
y nos dejáis vuestro brillo,
con esa gran elegancia
del parpadeo infinito,
decidme si en esta noche
se escucha el canto del grillo
y si también las cigarras
tienen su canto dormido,
ya que me afano y esmero
pero el silencio es el signo
que me devuelven las sombras
cuando reclama mi oído,
y es que no veo la luna
en esta noche en su sitio,
en ese cielo estrellado
con su sonrisa y su mimo...
Estrellas que vais pasando,
con vuestro alegre vestido,
sobre este mundo de locos
y donde el cuerdo es el niño,
quisiera que me dejarais
vuestro candor cristalino,
ese verso primoroso
con la nube y el rocío,
quisiera vuestra caricia
en el beso y el latido
que me llegue y que me llene
y que se quede conmigo,
ya que la luna está ausente
y no siento su cariño
en los rayitos de plata
que me dejaba en su escrito...
"...Estrellas que temblorosas,
hoy escucháis este grito,
llevadle pronto a la luna
la petición de este niño..."
Rafael Sánchez Ortega ©
14/06/18
Bonitos versos. Besos al alma.
ResponderEliminarGracias Pau.
EliminarBesos al alma.
La inocencia en la petición... hace que una sonrisa aflore al sentir la ternura de tu poesía, amigo Rafael.
ResponderEliminarMil besitos en la noche.
Gracias sinceras, Auroratris.
EliminarUn abrazo y feliz noche.
Bravo amigo , me encanto tu poema , lleno de ternura y sensibilidad , segura estoy que la Luna y las estrellas a palmas te recibirán pq hoy les has hecho un gran poema .
ResponderEliminarUn fuerte abrazo y feliz noche de sábado.
Gracias por tu comentario, Campirela.
EliminarUn abrazo y feliz noche.
Mecerse en la noche sin luna desde los ojos de un niño. Fíjate que en las ciudades el cielo no nos regala estrellas por la contaminación lumínica, y es una añoranza inmensa la que me produce recordar un techo alto e intangible de mi niñez.
ResponderEliminarPrecioso poema. Besos
Quizás tenemos que volver a esos recuerdos de la niñez para traer a las pupilas aquellos instantes mágicos, Albada Dos.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Pues el beso y la poesía te fue dado por ese cielo nocturno tan inspirador.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael,