Nunca pierdas ni olvides la sonrisa
aunque tengas motivos de negarla,
porque quiero tus labios temblorosos
y esa fuente de luz en la mirada.
Hay momentos, quizás, desesperados,
en que falta el humor, y las palabras
se congelan y atoran en la mente,
provocando galernas y nostalgias.
Pero entonces despierta un torbellino,
una flor de pasión, desmelenada,
esa nota que surge de tus versos
y nos deja sonrisas en las almas.
Porque tienen el néctar sacrosanto
y esa chispa de luz tan deseada,
la pimienta que acera los sentidos
y que excita y eleva las entrañas.
Nunca pierdas el rumbo de tus pasos
ni aunque sople el nordeste por la playa,
para así continuar, con mi trainera,
y seguir esas huellas delicadas.
Es posible que vayan hacia el cabo
a mirar como llegan las resacas,
o penetren al mar azul celeste
a fundirse, en un soplo, con el agua.
Pero siempre estarán en movimiento
más allá de suspiros y esperanzas,
y las olas sabrán como cubrirlos
de salitres, de espumas y de algas.
Seguiré, si me dejas, esas huellas,
para ir a escribirte a lontananza,
unos versos que aparten la negrura
y recojan la brisa de tu espalda.
"...Nunca pierdas amor, esa sonrisa
ni tampoco los pasos hacia el alba,
porque quiero contigo, y en mis sueños,
susurrarte estos versos y una nana..."
Rafael Sánchez Ortega ©
09/03/16
aunque tengas motivos de negarla,
porque quiero tus labios temblorosos
y esa fuente de luz en la mirada.
Hay momentos, quizás, desesperados,
en que falta el humor, y las palabras
se congelan y atoran en la mente,
provocando galernas y nostalgias.
Pero entonces despierta un torbellino,
una flor de pasión, desmelenada,
esa nota que surge de tus versos
y nos deja sonrisas en las almas.
Porque tienen el néctar sacrosanto
y esa chispa de luz tan deseada,
la pimienta que acera los sentidos
y que excita y eleva las entrañas.
Nunca pierdas el rumbo de tus pasos
ni aunque sople el nordeste por la playa,
para así continuar, con mi trainera,
y seguir esas huellas delicadas.
Es posible que vayan hacia el cabo
a mirar como llegan las resacas,
o penetren al mar azul celeste
a fundirse, en un soplo, con el agua.
Pero siempre estarán en movimiento
más allá de suspiros y esperanzas,
y las olas sabrán como cubrirlos
de salitres, de espumas y de algas.
Seguiré, si me dejas, esas huellas,
para ir a escribirte a lontananza,
unos versos que aparten la negrura
y recojan la brisa de tu espalda.
"...Nunca pierdas amor, esa sonrisa
ni tampoco los pasos hacia el alba,
porque quiero contigo, y en mis sueños,
susurrarte estos versos y una nana..."
Rafael Sánchez Ortega ©
09/03/16
Preciosos versos, Rafael, el amor compañero, ese que que anima y habla.
ResponderEliminarSaludos
Así es, Entre palmeras.
EliminarUn saludo y lindo día.
Gracias Rafael por tu compañía en mi blog y por tus hermoso poema en estos bellos versos de amor ...sol y esperanza.
ResponderEliminarUN GRAN ABRAZO
Gracias por tus palabras, Marina.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Deliciosos versos que narran un deseo hermoso.
ResponderEliminarQue no surja el olvido.
Que tengas un feliz Día Amigo.
Que se cumpla ese deseo para todos nosotros, Efe.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Tu poema rebosa amor y ternura
ResponderEliminarque hermoso leerte
un abrazo :-)
Gracias María, me alegro de que te guste.
EliminarUn abrazo.
Tus versos dan vitalidad y esperanza.
ResponderEliminarSaludos
Leyéndote seguro que no pierde la sonrisa.
ResponderEliminarBesos.
uuff Mi querido amigo Rafael que bello , me ha encantado tu poema me quedo con el primero y el segundo mehace falta no perderla ahora estoy enfermita uufff muy pachcuchcita jajajaja meha dado fuerte una gripe tengo hasta voz de hombre jaajjajaja es verdad uufff bueno pos nada amigo muy lindo me sentí animada al leerte un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarVenga, Bea, que tú eres fuerte. Ánimo y a seguir en la brecha...!
EliminarUn abrazo y cuídate.
Y ser mariposa que se viste en esencia de sentimiento para alejar con sus alas los vientos que arrastras lealtades y vidas.
ResponderEliminarMi abraz✴
Sería muy bonito Athenea.
EliminarUn abrazo.