Yo no sé lo que falla, en este mundo,
ni por qué se pervierten las palabras,
y se mira a los ojos del extraño
suplicando promesas y migajas.
Aunque entiendo a los hombres que protestan,
al que cruza desiertos por el agua,
al que escarba y revuelve la basura
y al que espera comida en su garganta.
Es posible que tiemblen las estrellas,
que las olas se duerman en la playa,
que susurren los ríos y meandros
y que dios no se entere de esta farsa.
Porque un mundo cruel y envilecido
es el cáliz que, afuera, nos aguarda,
el que pinta a los ricos de colores
y a los pobres les hurga las entrañas.
Yo no sé tantas cosas, lo confieso,
que me guardo las mismas en el alma,
y me digo que sí, que estoy soñando,
y que son pesadillas que me alcanzan.
Es por eso que bajo a los marjales
para ver los flamencos como nadan,
y paseo sin rumbo, en la ribera,
hasta dar con la arena de la playa.
Yo quisiera ser viento, en un momento,
temporal y galerna desatada,
y un compendio de grito enfurecido,
que limpiara a mi alma de su rabia.
Porque creo en el hombre, sin reservas,
en su lucha y sudor en la batalla,
por un mundo mejor y sin complejos,
y también por la paz tan deseada.
"...Yo no sé corazón, si estás dormido,
o si Dios te protege y te reclama,
pero quiero que vuelvas a mi lado
y me ayudes a ver, sin telarañas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
06/03/16
ni por qué se pervierten las palabras,
y se mira a los ojos del extraño
suplicando promesas y migajas.
Aunque entiendo a los hombres que protestan,
al que cruza desiertos por el agua,
al que escarba y revuelve la basura
y al que espera comida en su garganta.
Es posible que tiemblen las estrellas,
que las olas se duerman en la playa,
que susurren los ríos y meandros
y que dios no se entere de esta farsa.
Porque un mundo cruel y envilecido
es el cáliz que, afuera, nos aguarda,
el que pinta a los ricos de colores
y a los pobres les hurga las entrañas.
Yo no sé tantas cosas, lo confieso,
que me guardo las mismas en el alma,
y me digo que sí, que estoy soñando,
y que son pesadillas que me alcanzan.
Es por eso que bajo a los marjales
para ver los flamencos como nadan,
y paseo sin rumbo, en la ribera,
hasta dar con la arena de la playa.
Yo quisiera ser viento, en un momento,
temporal y galerna desatada,
y un compendio de grito enfurecido,
que limpiara a mi alma de su rabia.
Porque creo en el hombre, sin reservas,
en su lucha y sudor en la batalla,
por un mundo mejor y sin complejos,
y también por la paz tan deseada.
"...Yo no sé corazón, si estás dormido,
o si Dios te protege y te reclama,
pero quiero que vuelvas a mi lado
y me ayudes a ver, sin telarañas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
06/03/16
Rafael .. bellas letras que llevan
ResponderEliminara la reflexión.
Recibe mi saludo desde Argentina.
Gracias por tu visita y comentario, Doris.
EliminarUn abrazo desde España.
No hay nada peor que las telarañas en el alma.
ResponderEliminarVersos muy bonitos.
Feliz Domingo.
Pienso igual, Efe.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Esas telarañas abunda mucho, sí...
ResponderEliminarUn abrazo, Rafael, y lindo domingo para tí
Fina
Es cierto, Fina.
EliminarUn abrazo en la tarde de este domingo.
Tu poema es excelente...
ResponderEliminarTe corrijo: Sí que sabes mucho y
mucho más.
No estás soñando, es tal
cual lo ves, estás muy
despierto...tu consciencia
es envidiable, tanto como
tu poesía.
Abrazo.
Gracias infinitas por tus palabras y ese comentario tan especial, Impersonem.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Hola Rafael...hoy son fuertes los versos...bueno es domingo y todo se pondrá bien...abrazos
ResponderEliminarEsperemos que así sea, Marina.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Triste realidad que se vive. El lamento del alma. Yo tambien quisiera un mundo mejor.
ResponderEliminarTodos queremos un mundo mejor Jackie, eso es algo inegable.
EliminarUn abrazo.
A veces las telarañas nos rodean y sólo nos dejan ver lo que ellas quieren.
ResponderEliminarmariarosa
Por desgracia así es, María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Sabes más de lo que crees,yo no veo telarañas en tu corazón.
ResponderEliminarBesos.
Me haces sonreír, Carmen.
EliminarBesos.
Yo creo en todas las personas como también creo en el amor.
ResponderEliminarUn beso de seda.
PD.- Espero ahora no tengo problemas para comentar desde mi pc.
Eso es algo muy bonito, María, sigue creyendo así.
EliminarUn "beso de seda" también para ti.
Mucho mejor que tu corazón se acerque a ti, y tanto si ves claro como si no, un corazón amado es buena cosa para vivir en compañía.
ResponderEliminarTe deseo lo mejor.
Pienso igual, Tecla.
EliminarUn abrazo y feliz comienzo de semana.
Tanta preguntas sin respuesta y sólo saber con certeza que lo que se necesita es otro corazón a tu lado. Bella manera de reflexionar sobre la vida.
ResponderEliminarMil besitos, Rafael.
Ya ves, Auroratris, al final todo es muy sencillo, ¿verdad?
EliminarUn abrazo en la noche.
Hola Rafa. Hermoso tu texto y sobre todo bueno para pensarlo. Cada ser humano en definitiva es una historia muy difícil de comprender mirándola desde la nuestra propia. Ojala si, algún día dejemos de tratarnos como extraños para darnos cuenta que todos somos parte de un todo. Un abrazo
ResponderEliminar¡Ojalá llegue ese día que dices, Demina...!
EliminarUn abrazo.
Cuando el alma habla, el corazón escribe. Bello, muy bello Rafael
ResponderEliminarBesos y mi cariño
Gracias Deray, me alegro de que te guste.
EliminarBesos.
Yo como en aún creo en el ser humano,
ResponderEliminarHermoso como siempre Rafael
Un abrazo y buen comienzo de semana
No pierdas nunca esa fe, María.
EliminarUn abrazo y feliz semana, también para ti.
como no , creo
Eliminar.. disculpa , a veces me quedo pensando no lo que comentar , si no lo que me trasmite lo que leo que se me va el pensamiento y hasta las palabras
No te preocupes María, eso nos pasa a todos cuando un escrito nos llega.
EliminarUn abrazo y feliz noche.
Que bello ese final claro que si Dios te ayudará ver sin tele arañas ni nubes siempre hay cosas linda sy gente linda por ejemplo como tú !!!! que Dios te bendiga un abrazo muy fuerte como siempre muy bello y sentido poema
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Bea.
EliminarUn abrazo en la noche.
El poeta es consciente de su entorno y sufre, quisiera cambiar el mundo, pero tan sólo puede gritar y airear sus sentimientos...No obstante, insiste y eleva su voz sensible y rotunda...Nada es en vano y el universo es testigo para trazar los hilos de la causalidad...Mi abrazo y feliz semana, Rafael.
ResponderEliminarM.Jesús
Tu comentario es extensivo a todos los poetas, María Jesús.
EliminarUn abrazo y gracias por tus palabras.