Es posible que esperes al verano
para ver en la noche a las estrellas,
y también encontrar unas botellas
con mensajes escritos por mi mano.
Es posible que busques de antemano
la ilusión y el arcón con prosopeyas,
aunque puede te alcancen epopeyas
al sentir a las teclas de un piano.
Es posible, mi amor, y no lo niegues,
que murmures y jures en la espera,
y que luego, nervioso, te sosiegues.
Es posible, que al fin, en tu ceguera,
con pasión y lujuria te me entregues
y tu cuerpo, en el mío, se durmiera.
Rafael Sánchez Ortega ©
12/05/17
para ver en la noche a las estrellas,
y también encontrar unas botellas
con mensajes escritos por mi mano.
Es posible que busques de antemano
la ilusión y el arcón con prosopeyas,
aunque puede te alcancen epopeyas
al sentir a las teclas de un piano.
Es posible, mi amor, y no lo niegues,
que murmures y jures en la espera,
y que luego, nervioso, te sosiegues.
Es posible, que al fin, en tu ceguera,
con pasión y lujuria te me entregues
y tu cuerpo, en el mío, se durmiera.
Rafael Sánchez Ortega ©
12/05/17
Posibles puede ser tantas cosas, desde encontrar belleza en tus versos hasta escuchar las emociones latidas en ellos, un placer siempre leerte, amigo Rafael.
ResponderEliminarBesos en la noche.
Gracias por tu comentario María.
EliminarBesos en la tarde.
Què bonito escribes.
ResponderEliminarUn poema precioso.
Besos.
Me alegro de que te gusten mis versos, Amapola.
EliminarBesos.
Todo es posible en el amor.
ResponderEliminarHermoso soneto.
Besos
Cierto Julia.
EliminarUn abrazo.
Soneto endecasílabo muy melódico y precioso . Saludos Rafael .
ResponderEliminarCierto Edith, así es.
EliminarUn saludo en la tarde.