Quisiera caminar por los senderos
llevando de la mano a las estrellas,
y luego conseguir que las centellas,
vibraran por la calle en los letreros.
Quisiera los motivos verdaderos
que hicieron que marcharas con tus huellas
a un mundo, sin razón, y de querellas,
basado en la razón de bandoleros.
Quisiera ser un niño, en un instante,
el simple portador de la alegría
y el hombre capitán y navegante.
Quisiera ser en ti la poesía,
el verso que palpite cual diamante,
y un beso que te llene de alegría.
Rafael Sánchez Ortega ©
20/05/17
llevando de la mano a las estrellas,
y luego conseguir que las centellas,
vibraran por la calle en los letreros.
Quisiera los motivos verdaderos
que hicieron que marcharas con tus huellas
a un mundo, sin razón, y de querellas,
basado en la razón de bandoleros.
Quisiera ser un niño, en un instante,
el simple portador de la alegría
y el hombre capitán y navegante.
Quisiera ser en ti la poesía,
el verso que palpite cual diamante,
y un beso que te llene de alegría.
Rafael Sánchez Ortega ©
20/05/17
Que maravilla, las imágenes son soñadas.
ResponderEliminarAbrazo
Gracias María del Rosario, me alegro de que así te lleguen.
EliminarUn abrazo.
Qué tiernos tus versos, cuando sentimos al niño que llevamos dentro todo se transforma en mágico.
ResponderEliminarUn beso
Sí, Luján, es como dices en tu comentario.
EliminarUn beso.
y todo querer es legítimo Rafael, así que bien por decirlo.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Beatriz.
EliminarUn saludo.