Preciosos versos
que alegran la mañana.
¡Es primavera!
Dejan las huellas
de rimas y luciérnagas
en el cuaderno.
En estas letras
hay sueños y suspiros
del corazón.
Y son tus sueños,
unidos a los míos
muy revoltosos.
Piden respuestas
a un mundo de preguntas
que no las tienen.
Piden miradas
en ojos que no miran
donde miramos.
Y mientras tanto
unimos nuestros labios
en oración.
Pedimos fuerzas,
en medio del silencio
que nos acosa.
Pedimos poco,
tan solo que se acabe
la pesadilla.
Rafael Sánchez Ortega ©
03/04/20
Escrutamos la realidad y la interrogamos a través de versos, prosas, sueños, pensamientos... no parece haber respuestas ciertas, tan solo las conclusiones personales a las que podamos llegar a la luz de nuestra lógica intelectiva... ¡A ver si se acaba esta pesadilla! ... y vuestra petición se cumple en su plenitud...
ResponderEliminarAbrazo
Gracias Impersonem
EliminarUn abrazo.
Hermoso... Pedimos volver a ser.
ResponderEliminarBesicos.
Gracias Galilea.
EliminarUn abrazo.
Cuando se pide por todos algo se debe de estar escuchando.
ResponderEliminarUn abrazo en esta tarde de calor .
La pesadilla acabará y espero que todo sea un mal recuerdo del que hallamos aprendido.
ResponderEliminarBesos
Seguro que sí, Paula.
EliminarBesos.
Que acabe, y los versos preciosos vuelen, libres, revoltosos, juguetones.
ResponderEliminarUn abrazo
Que así sea, Albada Dos.
EliminarUn abrazo.
Precioso y llenos de dulzura amigo un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea.
EliminarUn abrazo.
Las penas y tristezas compartidas son menos y antes se siente el alivio y el cambio a la alegría, Rafael.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo, amigo.
Así es María Jesús.
EliminarUn abrazo y gracias.
En mitad de la belleza, la pesadilla.
ResponderEliminarEs lo que tenemos ahora, de manera latente.
Abrazo, Rafael.
Cierto, Verónica.
EliminarAbrazo.