¡Ay, qué triste melodía
recibían las estrellas,
de la boca de aquel niño
que lloraba por su abuela!,
y lloraba por los brazos,
las caricias y, la ausencia,
de aquel cuerpo y su figura
que buscaba sin respuestas,
y lo hacía cada noche
con palabras y maneras,
desgranando la sonrisa
de su boca siempre fresca,
y es que ahora estaba solo
con las sombras que se acercan
y se llevan a la anciana
a otro mundo de tinieblas...
Yo asistía estupefacto
a este llanto y pataleta,
de aquel niño tan precioso
que mostraba así su pena.
No sabía qué decirle
ni qué hacer por su problema,
ya que el alma es un misterio
y se escapa a nuestra esencia,
hay que ser como los niños
y buscar esa sorpresa
de ilusión y fantasías
en los versos de un poema,
porque ellos ven la vida
de otra forma muy diversa,
con los ojos infantiles
y cargados de inocencia...
"...¡Ay, qué triste melodía,
deja el niño en esta escena,
porque siempre, en su recuerdo,
tendrá el beso de la abuela!..."
Rafael Sánchez Ortega ©
04/05/20
Muy buenas tardes, un poema repleto de amor y ternura. Me has hecho recordar a los besos de mi abuelo, hace mucho tiempo que nos los siento en físico, pero en mi alma siempre están y nunca me dieron un beso con tanto cariño como cada dia al despertar de los veranos en mi pueblo, esa era la manera de dejar a morfeo y entrar en la vida real , el beso de mi abuelo Félix
ResponderEliminarUn abrazo Rafael, hoy has tocado mi fibra más sensible.
Pues me alegro mucho de lo que me dices, Campirela, y de que mis versos te hayan llevado a recordar los besos de tu abuelo Félix.
EliminarUn abrazo y gracias por seguir mis versos.
Estoy segura que los besos de los abuelos no se olvidan .
ResponderEliminarLos buenos amigos tampoco ,
BESOS
Cierto Marina, es como dices.
EliminarBesos y feliz fin de semana.
Cuato sentimiento en tu poema.
ResponderEliminarLos nietos son un cascabel que nos regala la vida.
mariarosa
Así es María Rosa.
EliminarUn abrazo y gracias.
Mis abuelos ya han partido, pero siempre vuelvo a ellos para acurrucarme cuando lo necesito, aunque sea en mis recuerdos. Bellísimo poema Rafael, me he emocionado al leerte. Un abrazo con mi afecto sincero.
ResponderEliminarGracias por tus letras, Lady Blue.
EliminarUn abrazo y feliz domingo.
Cómo se llora la ausencia de las abuelas. Son esos seres que, sin alas, son ángeles
ResponderEliminarUn abrazo
Cierto, Albada Dos, pienso igual.
EliminarUn abrazo.
Me hubiera gustado mucho tener a mi abuelito , cerca , tus letras me hicieron viajar a mi infancia con mi abuelita, que la echo tanto de menos, preciosas letras que llegan al acorazón, un abrazo amigo
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Bea, y seguro que desde el cielo te sigue.
EliminarUn abrazo.
Se van los seres queridos...
ResponderEliminarMuy triste
Un saludo
Gracias mariposa.
EliminarUn saludo.