Somos cenizas,
partículas de arena
en este cosmos.
Pequeña parte
de un todo indescifrable
que nos abraza.
Y resistimos,
anclados a la tierra
y a mil embates.
Quisimos vernos
un día, como dioses,
y lo creímos.
¡Pobres mortales,
buscando en esta idea
una entelequia!
Esa utopía
de ser el superhéroe,
y el rey de Todo.
Pero las huellas
dejadas por los hombres
no dicen eso.
En los recuerdos
se encuentran las respuestas
y los pecados.
Seres de paja,
pequeñas marionetas,
buscando a Dios.
Rafael Sánchez Ortega ©
04/05/20
Muy mistico tu poema , pero no exento de razón. Un abrazo feliz tarde de domingo.
ResponderEliminarGracias Campirela.
EliminarUn abrazo en la tarde.
uuufff versos reflexivo invitan a detenerse, preciosos , un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bea.
EliminarUn abrazo.
Cuanta verdad hay en tu poema Rafael. Duelen esas huellas dejadas por los hombres producto de esa ignorancia que es el peor de los males! Que tengas una buena tarde de domingo. Besos.
ResponderEliminarGracias Lady Blue.
EliminarBesos en la noche.
Alta reflexión, ya lo creo. Me ha gustado.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Albada Dos.
EliminarUn abrazo.
Buenísima reflexión para un cambio en la humanidad.
ResponderEliminarAbrazo
Gracias María del Rosario.
EliminarAbrazo.