domingo, 29 de noviembre de 2015

ME DESPERTÉ, DE REPENTE...


Me desperté, de repente,
con un beso en la mejilla,
era la luna, en el cielo,
reluciente y muy tranquila.

Un cuarterón, simplemente,
de blancura cristalina,
que enviaba la esperanza
con sus rayos de alegría.

Y desperté, muy dichoso,
con la tarde ya dormida,
aunque envuelto por las sombras
de una noche que era mía.

Fue la imagen de algún sueño,
un crisol de fantasía,
esa historia tan soñada
que pervive en la retina.

Me desperté, de repente,
y busqué tu compañía,
bajo la luna de plata
que ofrecía maravillas.

Pentagramas de ilusiones
con sus notas escondidas,
y a su lado nuestras almas,
corazones en puntillas.

No sé bien si suspiraron
tus ojitos y pupilas
y si acaso recibieron
esa música divina.

Pero sé que, entre mis manos,
floreció la poesía,
y mis dedos, dulcemente,
engarzaron estas rimas.

"...Me desperté de repente
sin saber que no dormía,
por un beso entre mis labios
de la luna y tu sonrisa..."

Rafael Sánchez Ortega ©
16/11/15

8 comentarios:

  1. Te despertaste y a tu lado la tenias entre besos despiertos y abrazos sentidos.

    Un beso dulce de seda

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    1. Así se encontraba el protagonista de esos versos, María.
      Otro "beso dulce de seda" también para ti.

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  2. Buenos dias...
    Maravillosos tus versos ...huelen a ternura ...
    Te deseo un feliz dia ...
    abrazos

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    1. Gracias Marina, me alegro de verte ya recuperada.
      Un abrazo y feliz domingo.

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  3. De veras, qué bien rimas!
    Me ha encantado imaginar ese beso despertando la magia de la noche y el amor.
    Muy, pero que muy bonito.
    Un beso.

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    1. Gracias por tus palabras, Marinel.
      Un beso y que tengas un lindo domingo.

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  4. ay que despertar tan dulce y tierno
    quien no desea despertar de esta manera
    feliz domingo Rafael,
    abrazos
    María

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    1. Es que, todos, hemos suspirado, en algún momento, por instantes parecidos, María, ¿no crees?
      Un abrazo y feliz domingo.

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