Capea el temporal dulce gaviota
y busca tu cobijo por la arena,
la playa tendrá a punto su melena
y en ella meterás tu cabezota.
Es fácil que si evitas la derrota
encuentres resguardada a la sirena,
la misma que llevaba una azucena
prendida de su pelo como nota.
Evita el temporal y sé prudente,
gaviota sin igual y previsora,
no vaya a secuestrarte la corriente.
Entiende que es preciso la demora,
el puerto aguardará, pacientemente
que vuelvas, por su calma, en otra hora.
Rafael Sánchez Ortega ©
10/11/17
Realmente me da gusto venir y encontrar tanta belleza, escribes sin parar. Excelente amigo.
ResponderEliminarAbrazo
Es un "sedante", María del Rosario.
EliminarUn abrazo.
Esos consejos que damos pero no usamos.
ResponderEliminarUn soneto muy bonito, amigo Rafael.
Mil besitos para tu noche.
Sí, Auroratris, es como dices.
EliminarUn abrazo en la noche.
Juguemos a ser sirenas con camelias en el pelo que danzan entre las aguas salvajes y turbulentas.
ResponderEliminarMe gusta la idea, Tecla.
EliminarUn abrazo.
feliz sábado ...no haces fiesta para tus bonitos versos ...feliz fin de semana
ResponderEliminarGracias Marina, pero la poesía está latente en cada día y bien lo sabes.
EliminarUn abrazo y feliz fin de semana también para ti.
Hola Rafael , por motivos personales no he podido entrar en tú blog , pero como siempre
ResponderEliminarte digo ,que es un placer leer tus poemas ..Saludos
Gracias por pasarte de nuevo, Amparo.
EliminarUn saludo y feliz fin de semana.
Un poema hermoso! me encanta volver y leerte.
ResponderEliminarsaludos
Gracias por tu visita y comentario Karin.
EliminarUn saludo.
La prudencia evita muchos accidentes.
ResponderEliminarBesos.
Cierto Amapola.
EliminarBesos.
Una chispa de dulce imaginación, me encanta amigo, un abrazo.
ResponderEliminarGracias Paty.
EliminarUn abrazo.