Hoy no quiero escribirte corazón
ni llorar con mis lágrimas cautivas,
prefiero suspirar con el silencio
arrancando del pecho las espinas.
Prefiero caminar por los senderos
y observar a las flores amarillas,
entre el verde florido de los campos
y el azul de los cielos más arriba.
Prefiero contener las emociones
y aguantar marejadas y sequías,
de la vida que pasa y no regresa
como estrella fugaz que se disipa.
Prefiero que la tinta se me seque
y aparezca vacía la cuartilla,
porque nadie verá lo que yo siento
ni el dolor de mi alma malherida.
No quiero mendigarte una palabra
ni el saludo casual de tu sonrisa,
prefiero continuar con el silencio
soñando con las cosas más sencillas.
Prefiero disfrutar con las estrellas
soñando con sus besos y caricias,
a pesar de saber que solo es sueño
la respuesta que mandan y que envían.
Prefiero traspasar las mil barreras
que me acerquen temblando hasta la orilla,
y mirar los barrancos de la costa
al compás del nordeste y de la brisa.
Prefiero conversar con las paredes
y escuchar el silencio de las mismas,
en la iglesia que tanto visitamos
a rezar en su pórtico y capilla.
"...Hoy no quiero escribirte corazón,
la palabra que tengo está marchita,
prefiero que se quede en mis entrañas
sin que el llanto me aflore a las mejillas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
15/10/12
ni llorar con mis lágrimas cautivas,
prefiero suspirar con el silencio
arrancando del pecho las espinas.
Prefiero caminar por los senderos
y observar a las flores amarillas,
entre el verde florido de los campos
y el azul de los cielos más arriba.
Prefiero contener las emociones
y aguantar marejadas y sequías,
de la vida que pasa y no regresa
como estrella fugaz que se disipa.
Prefiero que la tinta se me seque
y aparezca vacía la cuartilla,
porque nadie verá lo que yo siento
ni el dolor de mi alma malherida.
No quiero mendigarte una palabra
ni el saludo casual de tu sonrisa,
prefiero continuar con el silencio
soñando con las cosas más sencillas.
Prefiero disfrutar con las estrellas
soñando con sus besos y caricias,
a pesar de saber que solo es sueño
la respuesta que mandan y que envían.
Prefiero traspasar las mil barreras
que me acerquen temblando hasta la orilla,
y mirar los barrancos de la costa
al compás del nordeste y de la brisa.
Prefiero conversar con las paredes
y escuchar el silencio de las mismas,
en la iglesia que tanto visitamos
a rezar en su pórtico y capilla.
"...Hoy no quiero escribirte corazón,
la palabra que tengo está marchita,
prefiero que se quede en mis entrañas
sin que el llanto me aflore a las mejillas..."
Rafael Sánchez Ortega ©
15/10/12
Tremendamente emotivo, amigo!
ResponderEliminarSus palabras nunca estarán marchitas, irradian luz hasta en las más profundas sombras...
Un placer...
Abrazo en su silencio...
Gracias algamarina, eres muy generosa con tu comentario.
ResponderEliminarUn abrazo también desde mi silencio.
Rafael, esos versos no están marchitos, quizás sedientos.
ResponderEliminarDeja que beban de la nostalgia y volverás a escribirle.
Que así sea.
Un abrazo.
Hay momentos en que hay que pasar página Alicia, y quizás todos hemos pasado por esa situación. En mi caso sigo escribiendo y trato de plasmar mi fantasía y realidad, al mismo tiempo, pero tratando que a nadie alcance, ni nadie se sienta reflejado en ella.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
Muy bueno,Rafael...A veces es bueno que el corazón se distraiga y se recree...Todo lo que nos hace sufrir hemos de detenerlo y guardar un equilibrio,no permitir nunca,que nos obsesione y nos domine...aunque a veces se difícil..
ResponderEliminarMi felicitación por la variedad de puntos de vista con que miras y creas tus poemas.
Mi abrazo inmenso y feliz noche.
M.Jesús
Nuevamente agradecido por tus comentarios M.Jesús y por seguir atentamente el contenido de mis versos. Tu definición sobre la generalidad de mis poemas es acertada y eso trato de buscar la variedad en los temas, aunque no es fácil y la inspiración no está todos los días igual.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche y feliz semana.
Las palabras están tan vivas como el sentimiento que alberga ese corazón sediento.
ResponderEliminarMuy bueno!!!
Cariños...
La vida que pasa y no regresa....
ResponderEliminarSuficiente para ahogarse en su poema.
Disfruto mucho de su verso
Abrazo
No sé si ha salido mi comentario.
ResponderEliminarHay veces que es mejor callar y pensar en otras cosas, que tu mente este ocupada. Besos
ResponderEliminarDejar que el sueño calme el corazón herido es una manera de poder ir poniendo los pies en el suelo, por contradictorio que parezca.
ResponderEliminarY además, nacen hermosos y sentidos poemas.
Ni una palabra escrita, todas sentidas y al final, irremediablemente, el poeta sucumbe a la poesía.
Besos
pues para que no tuviese ganas de escribir ha salido un poema con sus cuartillas completas
ResponderEliminarbuen trabajo Rafael
abrazos y feliz semana
Hola ... la palabra está marchita!! Muy buena imagen!!! tienes el
ResponderEliminardon de dejar perlas como esta en
cada composición.
Musical y bello!!
Un fuerte abrazo y que pases una
semana de lujo
Amalia
Hay veces que sentimos esa ausencia de inspiración y solo plasmamos lo que nos dicta el corazón en silencio al suspirar por un recuerdo.
ResponderEliminarMuy bello, como siempre!
Besos y abrazos alados, Rafael.
A veces las palabras no se escriben, se sienten,y el corazón sabe de ellas aunque no las pronuncies.
ResponderEliminarHermoso Rafael, mis felicitaciones.
Un abrazo
Sabemos que la inspiración es una veleta y no siempre nos señala, pero tus versos siempre están bien inspirados, porque el resultado es sublime y los admiramos y los disfrutamos. Pero cuando tu corazón no quiera escribir también lo respetaremos.
ResponderEliminarTu poema de hoy me ha robado un suspiro. Muy bello.
Un beso grande.
Rafael, he venido por primera vez a tu espacio y tu poema me ha gustado mucho, con tu permiso me uniré a tu lista de seguidores.
ResponderEliminar¡Será la número cien!
Un abrazo fuerte.
Hola, Rafael:
ResponderEliminarTus versos son muy emotivos, tienen un ritmo que los hace muy agradables de leer... Y pensar que hoy no queras escribirle al corazón.
Un abrazo.
Gracias Oriana y sí, "las palabras están vivas", a pesar de todo.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
La vida que pasa y no regresa Natalia, a veces nos ahoga.
ResponderEliminarUn abrazo.
No, Morgana, nada ha salido salvo este comentario.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cierto Alica, a veces es mejor callar... Shhhh...
ResponderEliminarUn abrazo.
Quizás es mirar la realidad a la cara Verónica, pero lo mejor es no darnos por enterados y así nos puede ir con el tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Elisa, pero tú, mejor que nadie, sabes como va y viene la inspiración y no siempre uno acierta.
ResponderEliminarUn abrazo y que sigas tan inspirada como estos últimos días.
Gracias por tu visita y comentario Tribu amada, es un placer recibirte y leer tus letras.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Diana por tu comentario.
ResponderEliminarUn abrazo alado.
Yo creo Osvaldo, que los poetas sí dejamos las palabras que sentimos y por eso somos la clase "odiada", (entre comillas), por nuestra sinceridad y por no tener pelos en la lengua.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me alegro que mis versos te hayan arrancado un suspiro, Teresa. Por otro lado es cierto que muchas noches me quedaría sin escribir nada, y sin embargo casi es imposible.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
Gracias por tu visita y comentario Rosario y sí, puedes unirte si lo deseas y ser ese número cien que señalas. Aún nadie lo tiene.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
Ya sabes Rafael, hay días y noches, pero todos las tenemos.
ResponderEliminarUn abrazo.
A veces es mejor dejar pasar el tiempo.
ResponderEliminarBello como siempre que te visito
Besos
A veces, Anna, las lágrimas nos obligan a seguir adelante y a no mirar atrás.
ResponderEliminarBesos y feliz día.