Dicen que lloran los niños
y que los hombres no lloran,
porque se dice y supone,
su corazón una roca.
Más yo conozco poetas
con corazón de personas,
y sí que lloran sus ojos
bajo el trasluz de las olas.
Lloran por cosas pequeñas
y por las grandes y hermosas,
aunque también de alegría
surgen de pronto las gotas.
Llora la dama en su casa
cuando recibe una rosa,
más que la flor, en sí misma,
por ese beso que porta.
Dicen que lloran los niños
y que los hombres se enojan,
que solo arrugan su frente
para evitar la derrota.
Pero conozco pintores
que con paleta y con brocha,
andan plasmando su llanto
en tantas telas que mojan.
Y allí transmiten su encanto,
con los colores y notas,
en una imagen sublime
y en el retrato sin sombras.
Quiero creer, que en el cielo,
hay quien temblando se asoma,
y que al mirar a la tierra
siente la lágrima sorda.
Dicen que lloran los niños
y que los ángeles sobran,
que se precisan valientes
y los cobardes estorban.
Más si llorar es premisa
de la locura más tonta,
de enamorarse en el tiempo
de otra sensible persona,
pienso que soy un cobarde
porque he llorado por otra,
porque he querido y amado
con las pupilas ya rotas.
Fueron fontanas sublimes
que derramaron, copiosas,
gotas de yodo y salitre
sin importarles las horas.
"...Dicen que lloran los niños
y que los hombres no lloran,
más yo te digo, que un hombre,
saca el dolor de esa forma..."
Rafael Sánchez Ortega ©
13/07/13
y que los hombres no lloran,
porque se dice y supone,
su corazón una roca.
Más yo conozco poetas
con corazón de personas,
y sí que lloran sus ojos
bajo el trasluz de las olas.
Lloran por cosas pequeñas
y por las grandes y hermosas,
aunque también de alegría
surgen de pronto las gotas.
Llora la dama en su casa
cuando recibe una rosa,
más que la flor, en sí misma,
por ese beso que porta.
Dicen que lloran los niños
y que los hombres se enojan,
que solo arrugan su frente
para evitar la derrota.
Pero conozco pintores
que con paleta y con brocha,
andan plasmando su llanto
en tantas telas que mojan.
Y allí transmiten su encanto,
con los colores y notas,
en una imagen sublime
y en el retrato sin sombras.
Quiero creer, que en el cielo,
hay quien temblando se asoma,
y que al mirar a la tierra
siente la lágrima sorda.
Dicen que lloran los niños
y que los ángeles sobran,
que se precisan valientes
y los cobardes estorban.
Más si llorar es premisa
de la locura más tonta,
de enamorarse en el tiempo
de otra sensible persona,
pienso que soy un cobarde
porque he llorado por otra,
porque he querido y amado
con las pupilas ya rotas.
Fueron fontanas sublimes
que derramaron, copiosas,
gotas de yodo y salitre
sin importarles las horas.
"...Dicen que lloran los niños
y que los hombres no lloran,
más yo te digo, que un hombre,
saca el dolor de esa forma..."
Rafael Sánchez Ortega ©
13/07/13
llorar es una forma de lavar el alma
ResponderEliminary liberar la angustia que nos oprime
abrazos
Cierto Elisa, pienso igual.
EliminarUn abrazo en la noche.
Cada cual se defiende del dolor a su manera. Llorando por fuera o por dentro, el caso es amainar el sufrimiento.
ResponderEliminarAbrazos
Cada persona combate el dolor de una manera, TriniReina, eso es lo importante.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Ha versado bellamente sobre los llantos de la gente ellos en su arte dejan el alma desnundado en lágrimas el sentir de sus almas que bello !! feliz sábdo, un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Beatriz, un abrazo desde el cantábrico.
EliminarPrecioso!!! Lleno de sensibilidad. Me encanta.
ResponderEliminarUn beso grande.
Me alegra de que te guste el poema Misterio.
EliminarUn beso también para ti.
Llorar es a veces necesario. Sea niño, hombre dama, el alma no entiende de esas cuestiones, más necesita liberase de una carga.
ResponderEliminarPrecioso poema
Besos
P.D ¿como estás?
Llorar se convierte, muchas veces, en una liberación del alma Anna.
EliminarBesos en la tarde.
Pd... Estoy bien y espero que tú te sigas recuperando.
Llora, es preciso,para limpiarse por dentro.
ResponderEliminarAbrazos.
Cierto Alicia, eso se debe hacer.
EliminarUn abrazo.
Es bueno llorar, mantiene fresco y limpio ese niño interior que necesitamos para seguir adelante con curiosidad e ilusión,Rafael...Las personas que no lloran se les murió el niño interior y el corazón se endureció...
ResponderEliminarMi gratitud por la profundidad y belleza de tus versos.
Mi abrazo y mi cariño, siempre.
M.Jesús
Ese aire fresco, que dices en tu comentario, hay que mantenerlo siempre M.Jesús, aunque sea con esas lágrimas frescas que limpien las pupilas.
EliminarUn abrazo.
El dolor tiene tantas caras....pero a la vez enseña tantas cosas...como dice Jaime Sabines poeta mexicano, " No despreciéis al dolor..."
ResponderEliminarUn poema de mucha intensidad el que nos has dejado.
Un abrazo de domingo en la mañana.
Cierto Natalia, el "dolor tiene muchas caras" y por eso no se debe nunca "despreciar".
EliminarUn abrazo en la tarde del domingo.