No sé por qué razón
recuerdo la textura de tus senos,
el blanco sinuoso de los mismos
y el dulce escalofrío de mis besos.
Recuerdo que la noche se acercaba
y estábamos los dos en blando lecho,
desnudas, frente a frente nuestras almas,
desnudos, piel con piel de nuestros cuerpos.
La fiebre desataba sensaciones,
pasiones alocadas y tormentos,
allí se deshacían las galernas
mezcladas, con suspiros y jadeos.
Sudaban nuestros cuerpos tibiamente
por todos los rincones y senderos,
las manos transformaban, con su magia,
el lindo recorrido de los dedos.
No sé por qué razón
hoy quiero recordar aquel momento,
tus manos en mis manos, simplemente,
mis labios en tus senos con un muerdo.
Entonces se volvieron con dulzura
tus dedos, recorriendo mi cabello,
buscabas retener las sensaciones
y el dulce escalofrío del deseo.
Buscabas el placer de las resacas
y el pulso de los mares en aumento,
la entraña desvirgada de la costa
sintiendo el oleaje tan intenso.
Querías a mi cuerpo sudoroso
volviendo de ese mundo de los sueños,
saciando y compartiendo aquel instante
y uniéndonos, en uno, sin lamentos.
No sé por qué razón
me quedo en los umbrales del desierto,
recojo los recuerdos uno a uno
y mando mis suspiros a tu encuentro.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/07/13
recuerdo la textura de tus senos,
el blanco sinuoso de los mismos
y el dulce escalofrío de mis besos.
Recuerdo que la noche se acercaba
y estábamos los dos en blando lecho,
desnudas, frente a frente nuestras almas,
desnudos, piel con piel de nuestros cuerpos.
La fiebre desataba sensaciones,
pasiones alocadas y tormentos,
allí se deshacían las galernas
mezcladas, con suspiros y jadeos.
Sudaban nuestros cuerpos tibiamente
por todos los rincones y senderos,
las manos transformaban, con su magia,
el lindo recorrido de los dedos.
No sé por qué razón
hoy quiero recordar aquel momento,
tus manos en mis manos, simplemente,
mis labios en tus senos con un muerdo.
Entonces se volvieron con dulzura
tus dedos, recorriendo mi cabello,
buscabas retener las sensaciones
y el dulce escalofrío del deseo.
Buscabas el placer de las resacas
y el pulso de los mares en aumento,
la entraña desvirgada de la costa
sintiendo el oleaje tan intenso.
Querías a mi cuerpo sudoroso
volviendo de ese mundo de los sueños,
saciando y compartiendo aquel instante
y uniéndonos, en uno, sin lamentos.
No sé por qué razón
me quedo en los umbrales del desierto,
recojo los recuerdos uno a uno
y mando mis suspiros a tu encuentro.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/07/13
Maravillosamente recuerda este protagonista hoy...cuánta dulzura envuelta en una nostalgia enorme, pero digna de ser traída al presente, una y mil veces si el alma lo requiere...pero que no duela...
ResponderEliminarPRECIOSO!
Te dejo mi abrazo grande, con admiración y cariño, amigo querido.
http://expresiongraficayverbal.blogspot.com/
Gracias como siempre querida Maritza, un abrazo grande también para ti.
EliminarLa pasión que se alimenta de recuerdos suele transformarse, con el tiempo, en la más fría ceniza...
ResponderEliminarAbrazos
Suele pasar tal y como dices, por eso hay que alimentar los recuerdos con vivencias recientes, a poder ser, para que sigan vivos.
EliminarUn abrazo.
Sensual y divino... Como todo lo que escribes.
ResponderEliminarUn beso grande.
Gracias por ver así mis versos Misterio.
EliminarUn beso y lindo día.
Entregándolo y recibiéndolo todo,salvaje locura en el silencio de la noche...y ahora recordando esas locuras de pasión.
ResponderEliminarA veces pasa,pero el amor está ahí, esperando por nosotros.
¡Precioso...!!! como no iba a ser así.
Beso grande Rafa.
Gracias Lore por tu comentario.
EliminarUn beso y lindo día.
sensual recorrido Rafael
ResponderEliminarademás de pasión en la voz hablante
abrazos
Gracias Elisa, un abrazo en la tarde.
EliminarMe encanta este poema, uno de los más bonitos que he leído, Rafael, es muy sensual, y me quedo con ese final de mandar los suspiros a su encuentro.
ResponderEliminarUn beso.
Me alegra de que te gusten estos versos María, salieron así, simplemente.
EliminarUn beso en la tarde.
Rafael uufff que pasión!!!! es un viaje hermoso por el borde exquisito de la piel de forma melodiosa y sensual me dejas... te ha quedado fantástico, besos amigo y feliz día desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tu apreciación de mis versos Beatriz.
EliminarUn abrazo.
Un poema sensual y muy sentido...El recuerdo renueva el sentimiento y deshace el olvido...Buenas letras, amigo.
ResponderEliminarMi felicitación por tu maestría y buen hacer.
Mi abrazo grande siempre.
M.Jesús
Gracias por tu visita y comentario M.Jesús. Me alegro que te gustaran este poema.
EliminarUn abrazo.