Quiero sentir aquí, en mi costado,
la seda de tu tacto, dulcemente,
el labio con el beso tan osado
y el roce que me dejas con tu frente.
Más quiero imaginarte, ser amado
viniendo con tu sed hasta mi fuente,
y en ella recoger con sumo agrado
el néctar que destila tan ardiente.
Espero restañar aquellos giros
que borren de tu pecho la amargura.
No quiero que te agobien los lamentos,
y menos el temblor de los suspiros.
Deseo que te inunde la ternura
y vivas como nunca este momento.
Rafael Sánchez Ortega ©
27/07/13
la seda de tu tacto, dulcemente,
el labio con el beso tan osado
y el roce que me dejas con tu frente.
Más quiero imaginarte, ser amado
viniendo con tu sed hasta mi fuente,
y en ella recoger con sumo agrado
el néctar que destila tan ardiente.
Espero restañar aquellos giros
que borren de tu pecho la amargura.
No quiero que te agobien los lamentos,
y menos el temblor de los suspiros.
Deseo que te inunde la ternura
y vivas como nunca este momento.
Rafael Sánchez Ortega ©
27/07/13
Rafael que erótico, me encanta!
ResponderEliminarGracias Miguel, un abrazo.
Eliminaruuff he suspirado con tus versos profundos, intenss y dulces que me abrazan que bello, besos desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por verlos así Beatriz. Un abrazo desde el cantábrico.
Eliminarcuanta ilusión en el deseo del Hablante
ResponderEliminarya sea un beso o una caricia
lo importante es saberse parte del sueño del otro
otro beso pa'ti
Tienes razón Elisa, pienso igual.
EliminarUn beso en la tarde.
Hay versos como estos que te hacen temblar como una hoja y llenan el corazón de pasión...y ternura, haciendo de su lectura una dulce melodía.
ResponderEliminarEs el sentir de un alma enamorada… aunque realmente sean solo letras, son tan hermosas.
Un beso grande Rafa.
Gracias por tu comentario y ver así mis versos Lore.
EliminarUn abrazo y feliz comienzo de semana.