jueves, 5 de noviembre de 2020

4.357 - UN ROBLE CIEGO...



 Un roble ciego

se alzaba con sus ramas

entre las sombras.


Tú le mirabas,

buscabas a sus ojos

sin conseguirlo.


Era tu amigo,

también tu confidente

y tu almohada.


En su costado

dormiste muchas tardes

con el nordeste.


Aquella brisa,

lejana de los mares,

fue tu caricia.


Ahora la extrañas

y extrañas hasta el roble,

que están muy lejos.


Atrás quedaron

los días de colores

y juventud.


Días de sueños,

de brisas y suspiros

bajo los cielos.


Y a todo esto,

un roble, medio ciego,

secó tus lágrimas.


Rafael Sánchez Ortega ©

14/06/20

18 comentarios:

  1. Me encantó tu sencillo homenaje a ese roble de tu juventud, que ahora está ciego y envejecido. Los árboles tienen alma, están conectados con el universo y nos transmiten buenas energías. Mi felicitación por tu amor a los árboles.
    Mi abrazo y feliz semana de noviembre, Rafael.

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  2. Un árbol viejo siempre produce respeto e inspira bellos poemas.

    mariarosa

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  3. Atrás quedaron tantas cosas...
    Un abrazo.

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  4. Como queriendo escapar hacia el cielo... preciosa nostalgia, amigo Rafael.

    Mil besitos en la tarde.

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  5. Esos árboles, confidentes callados, que nos acompañan.

    Un abrazo

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  6. Ay, si los árboles hablaran con palabras para los humanos cuántas cosas nos dirían.Pues no olvidemos que ellos son cómplices de amores incomprendidos. Un precioso poema. Abrazos!!

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  7. Y el roble viejo, a pesar de los años, sigue fiel a sus recuerdos y añoranzas porque tiene madera noble.
    Un abrazo poeta.

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  8. Arboles o personas que acompañan momentos entrañables y quizás nunca volvamos a ver, pero jamás olvidaremos. Un bello poema Rafael!! Abrazo grande!

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  9. Por muchos años y vida que pasen, hay personas a las que no se olvidan.
    Enraizado como un roble al poema.

    Abrazo, Rafael.

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  10. Ese viejo roble en su fortaleza... firme e inamovible en tu recuerdo.
    Una belleza tus letras, Rafael.

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