III
Más quiero que suspires muy serena,
que vengas simplemente hasta mi lado,
que busques a mis ojos en la arena
y goces como nunca hayas gozado.
Permite que retire la cadena,
que libre de tu pecho su candado,
que suelte de tu pelo la melena
y busque entre tus labios su legado.
El beso corazón, el puente grato,
el beso del amor a la llanura
que inunde el alma fiel de sensaciones.
Por eso te conmino de inmediato,
vibrante corazón de tal locura,
que aumentes el tic-tac de mis pasiones.
Rafael Sánchez Ortega ©
01/08/12
¡Caramba con la trilogía, Rafael! ¡Qué fecundidad la tuya, tres sonetos en la misma noche! Me dejas pasmada por la capacidad de hilar versos con costura tan fina, por amalgamarlos con sueños y deseos, con recuerdos y anhelos.
ResponderEliminar¿Qué más puedo decir...? Si ya lo dices tú de todas las poéticas posibles y con las palabras más bellas que inventarse pudiera.
Un abrazo cerquita del amanecer.
Hermosos los tres poemas. Una llamada al amor, a la entrega. Besos Rafael...
ResponderEliminarEs cierto Mafalda, ya hacía un tiempo que no escribía un soneto y esta noche pasada me vino la idea con los primeros versos de esa "trilogía" que mencionas, (yo los llamo "sonetos encadenados").
ResponderEliminarConsidero este ejercicio un verdadero arte dentro de la escritura poética y tengo la fortuna de tener, en mi tierra, la huella y la semilla de grandes autores que dejaron su legado y otros que aún siguen en activo.
Ante esto mi aportación es pequeña y tímida, consciente de mis posibilidades, ya que sé de mis limitaciones.
Un abrazo ya pasado el mediodía.
Gracias Alicia. Pretendí hacer una pequeña historia sobre el amor y la entrega con los tres sonetos y me alegra saber que te gustaron.
ResponderEliminarBesos también para ti.
Sería imposible no suspirar con la belleza de tus letras. El tan solo entrar en tu espacio, el suspiro está garantizado.
ResponderEliminarPrecioso como siempre!
Como siempre muy generosa con tus palabras, Diana.
ResponderEliminarUn abrazo.