Me ahogo en una cárcel sin barrotes
compuesta de recuerdos y nostalgias,
no existen las cadenas en la misma
tan sólo el peso amargo de las almas.
Hay sombras desgarradas que aparecen
y que nublan los techos y ventanas,
y también se descuelgan los retales
de pañuelos mojados por las lágrimas.
Es una hipocresía vacilante
sonreír con los labios y mirada,
cuando tienes el pecho dolorido
por el fuego que quema tus entrañas.
Es una insensatez pensar que ahora
repican más alegres la campanas,
porque pacen tranquilos los rebaños
y su esquila resuena con el alba.
Pero trato de huir de mi destino
y escapar, aunque sea, hasta la nada,
a ese mundo de sueños y utopías
donde nace la música y el agua.
Y es allí donde siento escalofríos
y hasta el aire me quema la garganta,
es allí donde siento que la vida
tiene un algo que vive y que se apaga.
No sé bien el motivo y referencia
pero escucho la brisa que me llama,
y percibo el susurro de los vientos
que me deja caricias y palabras.
Es un soplo quizás irreverente,
una nota de música cifrada,
una brizna de sol hasta mis ojos
que al final me despierta entre la calma.
Ya no es tanto el ahogo del principio,
ni la cárcel, mazmorra que me aguarda,
ya no veo cadenas en sus muros
ni la niebla me cierra las pestañas.
Me ahogo, sin embargo, de otra forma,
rebuscando la miel y la esperanza,
en el limbo sagrado de los niños
y en los sueños formados con sus nanas.
Pero debo seguir hacia adelante,
caminar por desiertos y cañadas,
escapar de recuerdos y pasados
con su agobio de espinas que atenazan.
Rafael Sánchez Ortega ©
07/12/08
La soledad de amor es la que nos hace desfallecer de verdad...saludos desde Nicargua
ResponderEliminarY el amor Mario, ¿no es también un sueño y una utopía muchas veces?, ¿acaso no morimos por ello?...
ResponderEliminarUn saludo desde España.
"celda y cerrojo son los versos truncados de las esperanzas marchitas"
ResponderEliminarabrazo y feliz semana
Cierto Elisa, así es.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz semana también para ti.
Escapar de recuerdos y pasados ...
ResponderEliminarEs dificil Rafa , yo tengo muy bonitos recuerdos pero tambien muy dolorosos
Un abrazo con cariño por la noche
Fuera de ser un tema siempre presente en muchas almas, creo que hay que amigarse de los recuerdos dolorosos, o de esas situaciones que uno quisiera que volvieran pero ya es imposible que lo hagan...Es necesario perdonar lo que haya que perdonar (incluso a si mismos), creo mucho en ello, Rafael, para no vivir en esta cárcel sin barrotes por siempre.
ResponderEliminarY tu poema hermoso nos hará reflexionar a todos esta vez.
ABRAZOS Y BESOS, RAFAEL.
Todos tenemos, sin duda, Patricia, todos...
ResponderEliminarUn abrazo y feliz martes.
Es cierto Martiza, como tantas veces hemos escuchado y leído, hemos de recoger sólo lo hermoso y lo que nos llenó de alegría de ese pasado. El resto, aun siendo nuestro, no merece la pena que se convierta en una cárcel sin barrotes.
ResponderEliminarAbrazos y besos también para ti en este martes.
Escapar de la cárcel, de los recuerdos malos es tarea difícil, pero hay que continuar el camino de la vida con esperanza y fe. Abrazos...
ResponderEliminarAsí es Alicia y nada mejor que continuar el camino de la vida, como bien dices.
ResponderEliminarAbrazos en la mañana.
Hay cárceles peores que las propias cárceles, cuando los barrotes son invisibles y el alma no puede volar por las tormentas que la eclisan.
ResponderEliminar´Buen día
Leonor
Sí, Leonor, esas cárceles son mucho peor que las físicas y ya es decir, porque sus barrotes, invisibles, encarcelan el alma.
ResponderEliminarUn abrazo.
Rafae,
ResponderEliminarBuenos días,
te ha salido algo incisivo! tal que duelen esas barreras invisibles que nos aprisionan.
Saludos.
Casi ha salido sin pensar, Beatriz, pero así quedó.
ResponderEliminarUn abrazo.
Quizás has descrito la vida, llena de amarguras, pero siempre habrá una dulce nana que la alegre.
ResponderEliminarBesos.
Por supuesto que sí, que seguro que hay en la vida de toda persona esa "nana" esperando Laira, otra cosa es la metafórica cárcel sin barrotes que todos tenemos voluntaria ó involuntariamente y de ella debemos huir y salir, si es posible.
ResponderEliminarBesos en la tarde.
No te ahogues en los recuerdos, Rafael... deja que la vida y el amor que llevas dentro te rescaten de aquella infértil cárcel.
ResponderEliminarBesitos en el alma!
Es una expresión metafórica, Diana, como supongo que nos ha podido pasar a todos en algún momento de la vida, ¿no crees?.
ResponderEliminarBesitos también para ti.
Si, Rafael, siempre hacia delante.
ResponderEliminarEl pasado siempre nos traerá amargor cuanto menos, por muy felices recuerdos que tengamos, una leve añoranza amarga empaña.
Precioso poema, dices verdades con tu sabiduría.
Un abrazo
Debemos de poner todo de nuestra parte para no volver la vista atrás, al menos no, a todo aquello que pueda amargarnos el presente y el futuro.
ResponderEliminarUn abrazo Verónica C y feliz noche.