Cuando te falta la persona
a quien decir "te quiero"
y buscas a tu lado, y no encuentras,
el soplo del nordeste con su brisa,
y el cielo verde azul que se ha cambiado
por otro, gris plomizo, y de tormenta...
Es fácil que ya acuses la galerna
tan cercana
y notes que el invierno ya ha llegado
hasta tu lado.
Que veas que no existen margaritas
en el campo
ni vuelan mariposas por el aire
que inunden de alegría tus pupilas.
Es fácil que si sientes todo esto,
el llanto se derrame de los ojos
y corra por tu cara estremecida
en busca de unos labios temblorosos
que claman y preguntan por tu ausencia
y obtienen de respuesta el vil silencio.
Es fácil que te sientas traicionado
del cielo que te aparta de tus sueños
y a cambio te presenta, ante el espejo,
un alma envejecida y solitaria.
"Cuando te falta la persona
a quien decir "te quiero",
es fácil que ya estés de retirada
envuelto en el invierno de tu vida
y lejos de añoradas primaveras,
de otoños y veranos compartidos
y sean ya, los besos y caricias
recuerdos y utopías incumplidas
que yacen en el fondo de tu alma..."
Rafael Sánchez Ortega ©
03/05/23
Es un poema precioso, pero en tal medida es triste, y eso no me gusta.
ResponderEliminarEn la vida siempre hay un ser que vela por nosotros y él nos quiere, asi que esa parte todos la tenemos cubierta.
Un besote.
Gracias Campirela.
EliminarUn abrazo en la tarde.
Un bello poema, con su dolor a cuestas como todo poeta que sabe decir buenos versos aunque su corazón llore.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Así es.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.
Gracias Verónica.
EliminarAbrazo.