En una esquina
había una maceta
con unas flores.
La casa triste,
con sombras de la noche
se despertaba.
Un gato rubio
dormía, soñoliento
en una hamaca.
¡Cuánta quietud
se muestra en esta imagen
encantadora!
En su interior
tenía habitaciones
y moradores.
Padres y abuelos
de bellos querubines
que descansaban.
Ojos cerrados
por sueños infantiles
de amor y paz
Cuerpos nerviosos
mirando a la ventana
y al nuevo día.
Y los ancianos
pidiendo un rato más
de dulce cama.
En una esquina
el día de hoy comienza
sin darnos cuenta.
Rafael Sánchez Ortega ©
10/07/23
Estampas de vida, y el recuerdo de que todo sigue. Un abrazo
ResponderEliminarGracias Ester.
EliminarUn abrazo.
Una descripción de una habitación donde la vida esta tranquila y sosegada.
ResponderEliminarAbrazos desde el caluroso centro del país.
Gracias Campirela.
EliminarUn abrazo desde el norte nublado y fresquito.
Atractiva imagen de lo que es la vida, con esos detalles tan simples a la vez de tan hermosos. A veces lo trivial parece lo dado, lo natural, pero todo es una bendición.
ResponderEliminarFeliz día para ti querido amigo.
Gracias por tus palabras Paty.,
EliminarUn abrazo y feliz martes.
La vida, como una esquinita cualquiera, nos deja otra fachada al otro lado.
ResponderEliminarUn abrazo, Rafael
Gracias Maripau.
EliminarUn abrazo.
Instantes que dejan huella en nuestra vida diaria, bellísimo, un abrazote desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias Bes.
EliminarUn abrazo.