Un manantial
surgía de sus ojos,
calladamente.
Yo lo miraba,
salir desde la nada,
en aquel río.
Pero era un alma,
la fuente de ese líquido,
tan sugerente.
Laguna negra,
algunos le llamaban,
por su espesura.
Pero en el fondo,
no importa mucho el nombre,
si acaso, el sitio.
Y ese lugar,
perdido en la montaña
era admirable.
Tenía magia,
un manto de ternura
y candidez.
Entre sus aguas
el cielo se bañaba
celosamente.
Y los viajeros,
que a ella se acercaban,
la sed calmaban.
Rafael Sánchez Ortega ©
22/10/20
Intento llevar a la figura de un viajero que se acerca a un lago y ve manar una fuente del mismo. Es algo curioso y yo he visto algo similar, en la vida real, pero ha sido en un río y la columna de agua que se incorporaba era algo mágico ya que sus burbujas me llevaban a otro mundo con su magia y hacían que soñara en mil cosas mientras calmaba mi sed con sus gotas.
Ese viajero, ante el lago, sueña, y hace bien.
ResponderEliminarUn abrazo, Rafael. Por un bonito día
Gracias Albada Dos.
EliminarUn abrazo y feliz día también para ti.
Hola Rafael: sé que cascadas hay en todo el mundo, pero en Bariloche sobre el lago Nahuel Huapi está la Cascada blanca, un lugar hermoso. Tu poema la trajo a mi memoria, tus versos parecían reflejar aquella imagen
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Naría Rosa, esta laguna se llama así, la "Laguna Negra" y está en la Sierra de Urbión, provincia de Soria. Muy cerca de la laguna está el nacimiento del río Duero. Es un lugar encantador y muy visitado.
EliminarUn abrazo.
Lo intentas y lo logras, has descrito esa fuente donde el cansado viajero se inclina para beber y saciar su sed.
ResponderEliminarLa laguna negra es preciosa fui hace años, que por cierto la conocimos por la vuelta ciclista a España y al verla por tv decidimos viajar en verano a visitarla y mereció la pena. Un abrazo y feliz tarde-noche.
Gracias por tus letras Campirela y me alegro de que conozcas un sitio tan precioso.
EliminarUn abrazo y feliz tarde-noche, también para ti.
Hola, Rafael. Vuelvo a tus poemas, y me encantan, como siempre.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias sinceras, Fany.
EliminarUn abrazo.
Un fresco y transparente manantial en tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo Rafael.
Gracias Carmen.
EliminarUn abrazo.
Calmo la sed, dando paseos por la playa... ¿sirve?
ResponderEliminarBesos.
Por supuesto que sí, Laura.
EliminarBesos.
Bella la descripción de "La Laguna negra". Tan mágica como tu inspiración.
ResponderEliminar"Tenía magia,/un manto de ternura/y candidez".
Un gran abrazo Rafael
Gracias Ceciely.
EliminarUn abrazo y feliz día.
En la naturaleza todo vibra. Cuando estás en sintonía con ella, todo es un asombro.
ResponderEliminarAbrazo, Rafael.
Gracias Verónica.
EliminarAbrazo.