HERMOSO MES Y HERMOSA PRIMAVERA...

Hermoso mes y hermosa primavera,
con sus flores,
con sus gentes,
con su cielo inmaculado de ese azul
con esperanzas y promesas.


Yo salí, como hace años,
a buscarte.
A sentir la somnolencia, en los rayos
de ese sol que nos calienta,
a gozar del suave beso del nordeste
en la mañana,
a mirar a las gaviotas
que pasaban con su vuelo
y a encontrar la margarita
en mis recuerdos.


Y la vi y me estremecí, como aquel niño
de hace años,
y me hice, como entonces,
mil preguntas.


Yo quería y deseaba
una nueva primavera,
el contacto de unas manos
en mis manos,
yo quería una mirada y un reflejo,
unos ojos que me hablaran sin palabras,
unos labios que emitieran un susurro,
una sangre acelerada que latiera
por mis venas...


Yo quería esa respuesta, sin sonidos,
ese signo irreverente de unos ojos,
ese beso a la pregunta que tenía
entre mis labios...


Yo quería ese gemido de tu alma,
esa fuerza irresistible de tu pecho
suspirando y deseando mis caricias,
mis palabras y silencios...


...Y quería tu presencia y tu recuerdo
hacerlo vivo,
rescatarlo entre los pliegues
de este mayo,
reanimarlo y darlo vida,
caminar con nuestros sueños
por los campos de mi tierra,
navegar entre las olas
por los mares del Cantábrico
y buscar entre los cielos a las nubes
con su lecho,
con sus flores,
con sus pétalos divinos
con que quiero recubrirte,
y desnudarte,
con mis manos.


Rafael Sánchez Ortega ©
05/05/11