Dejemos que las aguas se serenen
y vuelvan los gorriones a sus nidos,
es fácil que se calmen las borrascas
y canten las alondras en el río.
No deben ofuscarnos las galernas
que llegan con potentes remolinos,
la lluvia deja besos en las almas
y cura al corazón que viaja herido.
Dejemos que se calmen las pasiones
y duerman en el lecho muy tranquilos,
los hombres impacientes de la vida
y aquellos que se empeñan en ser niños.
Retumban en el cielo las tormentas
y el rayo nos ofrece sus chasquidos,
el choque de las nubes con su daño
resuena en el oído como un grito.
Dejemos que retornen las resacas
y vuelvan a los puertos los marinos,
envueltos de sudor y del salitre
en busca del abrazo merecido.
Seguro que conservan el recuerdo
del cuerpo y del hermano, con cariño,
que el fiero vendaval les ha robado
y añoran con dolor al ser perdido.
Dejemos que se empañen las pupilas
y mojen lentamente los anillos,
los lazos con que unieron tantos sueños
los hombres y mujeres siendo amigos.
Si acaso dispusieran del pasado
seguro cortarían, con cuchillos,
la seda y el cordón con que se atan,
los pechos que palpitan como cirios.
Dejemos que el amor brote en las almas
y tiemblen corazones intranquilos,
que vuelen mariposas por su lado
y azucen el candor de sus sentidos.
Es hora de esperar que, en la distancia,
se quiebren los silencios y los lirios,
mirándose los ojos, sin palabras,
y hablando el corazón, con sus latidos.
Rafael Sánchez Ortega ©
04/03/13
y vuelvan los gorriones a sus nidos,
es fácil que se calmen las borrascas
y canten las alondras en el río.
No deben ofuscarnos las galernas
que llegan con potentes remolinos,
la lluvia deja besos en las almas
y cura al corazón que viaja herido.
Dejemos que se calmen las pasiones
y duerman en el lecho muy tranquilos,
los hombres impacientes de la vida
y aquellos que se empeñan en ser niños.
Retumban en el cielo las tormentas
y el rayo nos ofrece sus chasquidos,
el choque de las nubes con su daño
resuena en el oído como un grito.
Dejemos que retornen las resacas
y vuelvan a los puertos los marinos,
envueltos de sudor y del salitre
en busca del abrazo merecido.
Seguro que conservan el recuerdo
del cuerpo y del hermano, con cariño,
que el fiero vendaval les ha robado
y añoran con dolor al ser perdido.
Dejemos que se empañen las pupilas
y mojen lentamente los anillos,
los lazos con que unieron tantos sueños
los hombres y mujeres siendo amigos.
Si acaso dispusieran del pasado
seguro cortarían, con cuchillos,
la seda y el cordón con que se atan,
los pechos que palpitan como cirios.
Dejemos que el amor brote en las almas
y tiemblen corazones intranquilos,
que vuelen mariposas por su lado
y azucen el candor de sus sentidos.
Es hora de esperar que, en la distancia,
se quiebren los silencios y los lirios,
mirándose los ojos, sin palabras,
y hablando el corazón, con sus latidos.
Rafael Sánchez Ortega ©
04/03/13
Rafael: me asombra tu capacidad poetica, un placer leerte.
ResponderEliminarDejemos que el amor brote en los corazones desérticos e intranquilos, sólo así la paz llega a ellos.
hermoso.
mariarosa
Gracias María Rosa, de momento vamos aprovechando la inspiración. Espero que dure.
EliminarUn abrazo en la noche.
Hola Rafael
ResponderEliminarPrecioso poema, a veces es necesario un tiempo para darse cuenta de muchas cosas que son vitales.
Rafael admiro a tus musas. Un placer leer tus versos.
Besos
Sonrío con lo de las musas Luján, pero sí, es cierto, la vida y lo que nos rodean son las musas y la fuente de inspiración para mis versos cada día.
EliminarUn abrazo en la noche.
Ya casi que es adictivo, leer tus versos antes de irme a la cama, con una hermosa melodia en mi cabeza.
ResponderEliminarBuenas Noches
Gracias por ello Natalia, espero y deseo que sirvan para llevar una sonrisa a tus sueños.
EliminarUn abrazo y feliz martes.
a veces es necesario que se serenen las aguas y el corazon hable . bello poema amigo un fuerte abrazo
ResponderEliminarCierto Alicia, así es.
EliminarUn abrazo y feliz día.
tu último verso me encantó si las cosas deben dejar que fluyan de forma natural hoy te digo sabios versos Poeta , muy bello como siempre amigutio siempre dejando dulce melodía, besos desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por ver así mis versos Beatriz.
EliminarUn abrazo.
Siempre hay que buscar la paz,sobre todo en los corazones de cada uno.
ResponderEliminarSaludos Rafael.
Ese es el fin que se debe perseguir siempre Jerónimo.
EliminarUn abrazo.
es mejor tomar decisiones con las aguas calmadas... al igual que conversar o algo racional... pero siempre la pasión es un torbellino de aguar revueltas!!!
ResponderEliminarsaludos!!!
gracias por tus sonrisas!!!
Por supuesto que si, La quiltra, de esa forma la decisión será más equilibrada.
EliminarUn abrazo.
afortunadamente todo termina y las aguas siempre llegan a su cauce
ResponderEliminarun abrazo
Esa es la esperanza que nos queda Arena.
EliminarUn abrazo.
Muy sabia decisión, dejar que las aguas se serenen y dejar que el corazón hago lo suyo.
ResponderEliminarLinda metáfora, Rafa!
Abrazos alados.
Gracias Diana por tu comentario.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Bellos y serenos latidos se escuchan en esta poesía tuya. Besos.
ResponderEliminarMe alegra de que te llegaran Amapola.
EliminarBesos y feliz día.
Nunca es bueno hacer las cosas en caliente,dejando que llegue la calma se ve todo distinto,tus versos dan esa paz que serena el alma Rafael,leerte siempre un placer,besitos amigo
ResponderEliminarGracias por tus palabras Shantal.
EliminarUn abrazo.
Un paréntesis para dejar reposar los sentimientos y apreciar con claridad los consejos del corazón.
ResponderEliminarBellísimo mi querido Rafael, un placer pasar a leerte!
Te dejo un fuerte abrazo, bonita noche.
Gracias Cristina, tomo en consideración tu mensaje.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día querida amiga.
Dejemos que las aguas se serenen...Si,Rafael,el tiempo todo lo va poniendo en su lugar y todo vuelve a su ser y a su calma...naturalmente que si...amigo.
ResponderEliminarGracias por tu cercanía y la belleza de tus poemas.Un beso y feliz tarde.
M.Jesús
Gracias también a ti M.Jesús por ese quehacer y estar al tanto en el campo poético.
EliminarUn beso y feliz tarde también para ti querida amiga.