El tiempo sigue.
Los días continúan en este encierro.
A veces, las mañanas, parece que despiertan
con otra luz.
Es como si quisieran animarnos,
decirnos que estamos en primavera,
que asomemos los ojos y miremos al fondo,
a los prados y a los campos,
que busquemos los árboles que el viento
cimbrea en sus ramas,
que escuchemos el río que baja juguetón
besando los meandros,
que sintamos la brisa que llega
y que nos besa los cabellos...
Pero luego la soledad y el silencio
rompen esa imagen que la mañana ofrece
y nos vuelve a la realidad.
La imagen se rompe, se transforma en mil retales
y fragmentos por el suelo.
La primavera silenciosa aparece muy lejana,
como si estuviera, invisible, en alguna parte,
esperando.
Los prados son como una acuarela inmóvil
en el fondo de la retina,
los árboles no danzan ni se mueven con el viento
y son espigas de algún cuadro gris y sucio,
el río es una legaña, en este lienzo,
que ha perdido la paleta de un autor desconocido
y el viento, con la brisa, no me llega
y me sofoco en un abrazo insoportable
del encierro involuntario.
¡Creo que pesa el cansancio y mucho!
Creo que tengo necesidad de amar
y de sentirme amado.
Siento que debo decirlo, de gritarlo,
pero no puedo.
Mi corazón es como un reloj de sol,
que en su, tic-tac,
lleva un monólogo invisible
que se apaga lentamente.
¡Te quiero, te quiero...!
(Sonríe la paloma mientras se enjuaga una lágrima...)
Rafael Sánchez Ortega ©
16/04/20
Tu corazón es inmenso en sentimientos y cada latido es un verso que nos llega.
ResponderEliminarFeliz tarde.
Un abrazo.
Gracias María.
EliminarUn abrazo y feliz noche.
Triste y bello.
ResponderEliminarBesos.
Gracias Amapola.
EliminarBesos.
Wuo, tal vez el texto tenga más de una lectura, para mi la que siento es que se pasó mal en ese confinamiento pensando tal vez en la libertad que tenemos de poder salir y entrar.
ResponderEliminarDe contemplar aquello que el día a día nos hace feliz.
Un abrazo y muy feliz jueves.
Sí, Campirela, es una lectura válida la que haces.
EliminarUn abrazo.
Todos necesitamos amar y sentirnos amados, es muy universal y muy humano.
ResponderEliminarPor esa sensación de estar aquí por algo, y por alguien. Un abrazo
Por lo mismo que dices, Albada Dos.
EliminarUn abrazo.
Hola Rafael, todos sentimos desde la profunda soledad de silencio y ahora más que nunca esas ganas de libertad.
ResponderEliminarÁnimo, te envío un abrazo poeta.
Gracias Juan.
EliminarUn abrazo también para ti.
A mi me pasa que miro a través de la ventana y veo un día soleado precioso, pero está muy frío, como es siempre durante agosto, y ese frío me hace extrañar aún más a mis seres queridos a quienes hace 5 meses no he podido abrazar. Me hacen mucho sentido tus versos Rafael, me encantó, gracias, gracias. Un afectuoso abrazo para ti!
ResponderEliminarMe alegro de lo que dices en tu comentario, Lady Blue.
EliminarUn abrazo.
Muy lindo
ResponderEliminarGracias R`s Rue
EliminarMe llevaste al día, en que pensé, que los lilos estarían florecidos en la extraña primavera que vivimos.
ResponderEliminarEl amor, qué necesario, Rafael, más cuando sentimos la carencia.
Abrazo.
Es cierto lo que dices, Verónica.
EliminarAbrazo.