No hay banderas en el cielo
ni tampoco escapularios,
solo nubes peregrinas
que recogen nuestros llantos,
y los llevan silenciosos
a otras tierras y pantanos,
a enjuagar allí la gleba
y los frutos del arado,
los sudores de los hombres,
el trabajo de sus manos,
con las frentes pensativas
recordando mil pecados,
en el labio un padrenuestro
y hasta un credo surge raudo,
desde el pecho de los hombres
que hoy esperan un milagro...
No hay personas en las calles
ni tampoco carromatos,
los vehículos, contemplan
vacaciones sin mecánicos,
hoy es día de silencios,
soledades y descansos,
confinada singladura
de velámenes y barcos,
un patrón está dormido
y el grumete se hace cargo,
de llevar a la trainera
no sé dónde y hasta cuándo,
pesadillas que estremecen
entre el sueño y el cansancio,
con los hombres y la vida,
entre el miedo y entre el pánico...
"...No hay banderas en las almas,
ni en los ojos del anciano,
que gozaron de una vida
que ahora escapa de sus labios..."
Rafael Sánchez Ortega ©
21/04/20
Si Rafael con ternura y besos la vida es mas hermosa b....
ResponderEliminarGracias Marina.
EliminarUn abrazo.
Bueno Rafael , siempre estás inspirado pero últimamente llegan muy hondo tus poemas. Gracias poeta.
ResponderEliminarAbrazos!!
Gracias Campirela.
EliminarAbrazos.
Qué soledad la de los ancianos ante la muerte, volvemos a un mes aciago que creímos ya en pasado
ResponderEliminarUn abrazo
Totalmente de acuerdo, Albada Dos.
EliminarUn abrazo.
Es un sobrecogedor poema Rafael. Tienes la sensibilidad a flor de piel. Un agrado leerte siempre. Te deseo un bonito fin de semana y te dejo un abrazo afectuoso!
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Lady Blue.
EliminarUn abrazo y feliz fin de semana también para ti.
Emotivo poema, siempre acertados tus versos, llegan al corazón, porque se viven.
ResponderEliminarUn abrazo.
mariarosa
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo.
Maravilloso! No tengo palabras... has abarcado tanto y están conmovedor y tan armoniosa su lectura.
ResponderEliminarBravo👏👏
"es tan"... Sorry
EliminarGracias por tus "palabras", Galilea.
EliminarUn abrazo.