Déjame verte,
pequeña mariposa
que tanto añoro.
Sé que te marchas,
que vuelas a otras tierras
y que te alejas.
Sigues tu rumbo
llevando la alegría
a quien te mira.
Deja que sienta
los últimos suspiros
de este verano.
En él me diste
momentos de ternura
inolvidables.
También canciones
robadas a la luna
junto a sus nanas.
Pero tus alas
hicieron que mis ojos
se iluminaran.
Vivieron sueños,
instantes de locura
y de emoción.
Por eso quiero
mirarte y despedirme,
una vez más.
Rafael Sánchez Ortega ©
24/08/22
Las mariposas como las golondrina llegan con el calor, ya regresarán en la proxima primavera a regalarte su color y belleza. Hermosa poesía. Un abrazo, desde el frío a tu calor estival.
ResponderEliminarmariarosa
Gracias María Rosa.
EliminarUn abrazo desde el calor de este verano que termina.
Despedirte de tu mariposa entre preciosos versos ❤❤
ResponderEliminar👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼
Gracias Galilea.
EliminarUn abrazo.
Por quienes nos iluminan la vida. Un abrazo
ResponderEliminarPor ellos, Maripau.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Cuantas despedidas hay en una mirada... ese final me llegó al alma
ResponderEliminarBesos Rafael y que tengas un feliz día
Gracias Cora.
EliminarUn abrazo en la tarde.