Busca la vida
y todo lo que el día
te va ofreciendo.
Hoy, amanece,
con lluvia, de los cielos,
para la tierra.
Es el regalo
que llega en este otoño,
un poco tarde.
Ya falta poco,
apenas casi un mes,
para el invierno.
El tiempo corre
y pasa, ante nosotros,
espectadores.
El padre invierno,
despacio, va llegando,
con barbas blancas.
Eso decían,
antaño los ancestros,
en nuestras casas.
Aquellos ratos,
de charlas por las noches
con los abuelos.
Junto a la lumbre
nacían los relatos
y cuchicheos.
¡Cuánto se añoran
sus ratos y momentos,
inolvidables!
Pero la vida,
del hoy, con este otoño,
hay que vivirla.
Sentirla cerca,
saciarse en sus latidos
y amar en ellos.
Rafael Sánchez Ortega ©
10/11/24
Hay que vivir este milagro de vida, sin olvidar aquellos ratos al lado de la lumbre con nuestros abuelos, que tanto nos enseñaron, Rafael...Vivamos el otoño lluvioso y preparémonos para el invierno, que ronda cerca...
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y feliz semana, amigo poeta.
Gracias por tus palabras y comentarios de hoy, María Jesús, eres muy generosa con mis letras.
EliminarUn abrazo desde Cantabria.
Tal cual Rafael, la vida hay que vivirla y disfrutar el nuevo amanecer, y reconfortarse con los recuerdos gratos del pasado, aunque el invierno se acerca, sabremos que luego llegará una estación mas calida...abrazos!!!
ResponderEliminarGracias por tus palabras y comentarios, Merce.
EliminarUn abrazo y feliz día.
Vivir el instante, con lo que nos cuesta, y revivir los buenos momentos sin nostalgia, con lo que cuesta también.
ResponderEliminarEl invierno es un regalo para compartir letras. Siempre fue así.
Abrazo, Rafael.