En esta tierra mía,
tan llena de misterios,
abundan las iglesias
cargadas de recuerdos.
Los tienes en sus piedras,
grabados con esmero,
en forma de figuras
que narran mil secretos.
Allí dejaron mucho
los monjes y canteros,
narrando sin descanso
cinceles bien dispuestos.
Por eso, con los años,
las piedras trazan sueños
y forjan poesías
pues son como los versos.
Nosotros al mirarlas
sentimos un respeto
y oímos los susurros
de siglos y del tiempo.
Las piedras desafían
las lluvias y los vientos,
las guerras y las luchas
de ricos y plebeyos.
En esta tierra mía
la vida es todo esto,
conjunto de pasiones
suspiros y deseos.
Por eso yo sonrío
y lo hago con respeto,
mandando mi sonrisa
a iglesias y conventos.
Rafael Sánchez Ortega ©
Cervera de Pisuerga, 11/09/11
Ya llevabas tiempo sin actualizar :) Es bonito encontrarte de nuevo por aquí. Esto de las iglesias me recuerda a algo que he visto hoy en "Andaluces por el mundo" (versión micro de "Españoles por el mundo". Se trataba de las iglesias de Malta. Malta tiene más iglesias que días tiene el año y parece ser que hay una que tiene una particularidad: dos torres con dos relojes que marcan horas distintas, una verdadera y una falsa. El origen de esto es confundir al Diablo, para que cuando vea los relojes no sepa cuándo es la misa y así no se lleven a las almas que están dentro de la iglesia. Curioso ¿verdad?
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